(no) tiene miedo | minsung + ¿hyunmin?

6

—Ahora nos sentamos con los cerebritos. — la voz de Minho tiene ese toque gracioso y confuso que aunque intenta disimular no puede.

Seungmin también está confundido. ¿En qué momento ocurrió todo? Porque él no entiende cómo pasó de estar hablando con Hyunjin en la fila del almuerzo a estar sentado con Christopher y sus amigos. Es como un borrón, todo tan confuso.

Puede ver como Minho se sienta junto a Hyunjin, tan cerca de Jisung como puede, nadie parece prestarle atención porque todos comparten conversaciones superficiales sobre detalles que desconoce; In y Christopher hablan sobre una canción que se escucharía bien con la voz del menor, conversación a la que se une Minho sin esperar invitación, Hyunjin, Felix y Changbin conversan sobre un café de perritos que abrieron en alguna parte de la ciudad y del que no tiene ni idea, el único que parece estar en su propio mundo es Jisung; con su cabeza inclinada hacia su libreta mientras traza líneas de un lado a otro sin parar, no parece consciente de todas las personas que se unieron a ellos en el almuerzo, no parece consciente de nada más allá de su propio mundo. A Seungmin le gusta, cree que podrían llevarse bien porque él suele hacer lo mismo con tanta frecuencia que parece irritante para los demás, menos para Hyunjin que no se incomoda o agobia por nada de lo que el castaño suele hacer.

— ¿Sueles dibujar con frecuencia? No pareces del tipo de persona que lo hace, o quizás sí...— el castaño no sabe porqué dijo eso. Lo que menos quiere es que Han tenga una mala idea de él por ser un entrometido e irrespetuoso con los espacios ajenos. Cuando los ojos oscuros del contrario lo miran quiere que la tierra se lo trague por un momento. — Lo siento, no quise ser entrometido. Puedes ignorarme y seguir con lo tuyo.

Pensó que Jisung de verdad lo ignoraría, pero contrario a todo eso, le regalo una sonrisa seguido por una risa tan baja y suave que no la hubiera creído existente si no lo estuviera viendo a la cara.

—Lo siento, no sabía que estabas aquí. He estado ignorándote como todo un maleducado. — la voz de Jisung es profunda, pero no tiene nada de intimidante o escandalosa. Le parece agradable y completamente de acuerdo con el aura del chico. — Y respondiendo a tu pregunta, si suelo dibujar con frecuencia, pero solo es un pasatiempo, lo hago para sacar algunas ideas de la cabeza y poder componer o hacer arreglos apropiados...

Le pareció impresionante la manera como el chico hablaba con tanta comodidad, como si se conocieran desde sus primeros momentos en la universidad, le gustaba. También le impresionaba lo fácil que era para él hablar de música, lo diferente que parecía ver todo, porque así como así empezó a hablar de arreglos musicales y composiciones que plasmaba primero en papel y luego cuando lo veía apropiado lo convertía en una canción. Seungmin no estaba entendiendo todo (casi nada), la manera en la que utilizaba términos desconocidos para él le atraía, pero aun así no lograba el efecto que Jisung buscaba por no entender, tampoco le importaba mucho porque lo estaba disfrutando tanto que se sentía bien ser un ignorante en el tema. Quería saber y ver más, sería tan genial poder ver más cosas de las que desconoce por manos de alguien que si sabe del tema.

— ¿Quieres ver algunos borradores, algunos dibujos?— Jisung lucía emocionado, su semblante distraído cambiando por completo a uno alegre con mejillas abultadas y ojos luminosos. Seungmin noto que esto era lo que le apasionaba y que lo hacía feliz hablar de ello aunque la otra persona no entendiera, le gusto; le recordó a Minho y por eso no pudo negarse.

—Claro.

Cuando tomo, lo que creía era una libreta, noto que era una carpeta de aros que sintió pesada en su mano por la cantidad de hojas sueltas y unidas que tenía, aunque parecía un pequeño desastre se contradijo al abrirla y encontrar todo ordenado por color y tamaño. Quiso reír porque Minho solía tener la misma manera de organizar, o por lo menos era un hábito que había desarrollado desde principios de año; oh, diablos, no podía creer que ya estaba pensando en la posibilidad de que Minho estuviera ocultando todo esto desde hace más tiempo del que creyó, todo por la estúpida manera de arreglar hojas de papel, era completamente apresurado pensarlo pero la mente de Seungmin corría mas rápido de lo que él mismo podía soportar.

Quiso ignorar los pensamientos desubicados que comenzaban a aparecer en su cabeza, porque los ojos de Jisung escudriñaban su rostro buscando reacciones significativas, debía por lo menos ofrecerles reacciones relacionadas a su trabajo y no al posible romance que cree que tiene con su amigo. Es tiempo de que Seungmin apague su lado cotilla por un momento.

Y revisa, revisa hoja por hoja; se impresiona, se altera, se emociona, porque en cada hoja hay un dibujo, notas musicales, palabras y líneas significativas que no entiende, ¿acaso son ondas de sonido? todo es tan impresionante que no sabe qué decir, tampoco quiere meter la pata con un comentario desubicado porque todo lo siente tan personal y privado. En ese momento hubiera querido que Jisung no fuera tan amistoso y le mostrara todo eso, incluso se arrepiente de preguntar porque si no hubiera sido por su curiosidad no estaría hurgando en algo tan intimo.

Siguió pasando las hojas y unas a color, demasiado color, llamaron su atención. Hasta ahora todo lo que había visto era a lápiz o con tinta de lapicero, pero esas páginas nuevas estaban repletas de color y el enfoque principal era Minho, lo sabía por la manera en la que sus piernas fueron dibujadas y por la notable sonrisa que cerraba sus ojos. Había hombrecitos dibujados meticulosamente, todos realizando lo que él creía que era una rutina de baile, supuso que representaban la rotación del cuerpo al bailar; era adorable y magnífico. Los dibujos estaban rodeados por esas líneas y esas notas que no entendía, pero aun así todo se veía tan artístico; se preguntó si quizás Jisung estaba creando una composición para que Minho bailara, o solo se estaba inspirando en él. Cualquiera de las dos opciones le parecía demasiado para asimilar. Estaba encantado.

Jisung lo mira y se escandaliza, no había estado pendiente de las cosas que miraba por estar buscando una explicación rápida de la razón por la que Minho estaba sentado junto a ellos, a una persona de distancia de él para ser preciso, y aun así él no lo había notado. Ambos parecen ignorarse y si Seungmin no supiera las cosas que sabe todo estaría marchando bien, nada se sentiría incorrecto, pero de alguna manera lo hace, ahora más que siente el peso del secreto en la carpeta de Jisung.

Jisung abre sus ojos cuando ve la hoja en la que él está detenido, su semblante cambia y se altera. Seungmin sabe que ha cometido un error y aunque no es del todo su culpa, se siente apenado.

—Eso... No... Mmm, creo que... No es lo qu...— Jisung mueve sus manos rápidamente frente a su cara, intenta quitarle la carpeta sin parecer grosero y Seungmin se la concede no queriendo ser una molestia (y porque obviamente no es el dueño de ella).

—Tranquilo, no vi nada. — no está seguro de que sus palabras son de ayuda, pero aun así las dice.

Seungmin lo mira debatirse sus acciones en cuestión de segundos, parece asustado y casi a punto de gritar. Quiere ayudarlo, quiere decirle que todo está bien, quiere decirle que él no dirá nada de lo que vio, pero el chico parece sumergido en sus propios miedos y él no sabe cómo sacarlo, como hacerlo ver que todo está bien y que no debe preocuparse por ahora. Seungmin quiere ayudarlo de verdad, porque se ve reflejado en sus miedos sin siquiera ser consciente. No pasa un segundo antes de que se sienta triste.

Tamborilea la mesa con sus dedos para llamar su atención sin que nadie más note la situación por la que están pasando. Logra su cometido. Jisung lo mira y sus ojos están acuosos, siempre lo están pero ahora lucen diferentes; lucen cargados de miedo. Seungmin solo puede sonreírle de la manera más amable que puede, trata de expresarle que está todo bien, que él lo entiende, que comprende su situación y que no dirá nada; Seungmin de verdad quiere ayudar, quiere calmarlo, así como quiere calmar a esa parte suya que aún vive encerrado por las mismas razones.

No espera que la reacción de Jisung sea buena porque después de todo no son amigos, pero con el rubio todo parece ir más allá de lo que puede comprender. Lo ve asentir, lo ve respirar y sin siquiera decirse nada sabe que el mensaje enviado llego y que Jisung entiende.