Una Loca Navidad

Capitulo 5

Diego ahogó una risita, probablemente por la tensión acumulada.

Jazz le dio un golpecito para que se controlara.

Benja se había quedado petrificado con el tenedor en mano, sólo miraba a Cami, quien estaba demasiado ocupada ofendiéndose para percatarse de nada más.

-Camila, a mí me da igual que seas... que seas- dijo su madre.

-Lesbiana- dijo su padre naturalmente

-Gracias, cariño, no me salía la palabra- Cami no podía creerse lo que estaba pasando- Pero eso no cambia nada, está claro que tienes algún problema para encontrar pareja y eso nos preocupa...

-Pero...- no podia creer que a mi madre le importara más que no tenga pareja a que "sea lesbiana"

-¿Cuál fue tu última relación larga, Camila?- ahora él que hablaba era mi padre

Cami miraba alternativamente a sus padres, cada uno sentado a un extremo de la mesa... Todos los que estaban en esa mesa, incluido el mismo Benjamín con toda probabilidad, sabían que él había sido su única relación seria.

-¿Benjamín, no?- dijo su madre sin dar más vueltas.

Cami sintió que los glóbulos rojos volvían a anunciar una sentada en sus mejillas, en dos segundos no se sabría dónde acababa su cara y dónde empezaba el vestido encarnado.

Benja volvió en sí, clavó el tenedor en su porción de pavo, más bien lo ensartó porque era imposible que pretendiera meterse semejante trozo en la boca.

-¿Cuánto hace que reconociste tu condición?- pregunto curioso su padre

Cami intentó reírse y miró a su hermano y a su novia- ¡Por favor!

¿Dónde están mis padres y qué habían  hecho con ellos?

-Cami, tú sabes que yo no me meto en sus vidas, ¿que Diego quiere dejar su puesto en la empresa y montarse por su cuenta arriesgando su carrera? Pues que lo haga, ¿que tú te conformas con un puesto puramente mecánico pero con el que tienes tiempo libre para ti? Estupendo... son decisiones personales...- aseguró su padre

-¿Que tu hermano decide casarse con alguien que claramente no le conviene?, asunto suyo- agregó su madre y Diego dejó caer el tenedor con estruendo mientras Jazz abría los ojos como platos - ¿que tú dejas la relación con Benjamín sin una explicación a pesar de que no vas a conseguir alguien ni remotamente parecido en tu vida?, pues no hay problema ¿te digo algo?
Cami pensó en todo lo que, efectivamente, su madre “no había dicho”, al menos con palabras claro, porque esa sensación no la pillaba de nuevas...

-Mamá...- Empezo a decir mi hermano

-Nora, es posible que esa relación terminara porque Camila no se siente atraída por los hombres...- interrumpió mi padre para dar su punto de vista de MI vida

Jazz se había quedado cabizbaja, removía los pedacitos del pavo en su plato sin atender a nada, Diego la miraba preocupado.

-Ya lo pensé, la verdad es que siempre ha sido un poco obvio pero... Camila, ¿has tenido pareja estable? Una mujer, quiero decir...- dijo mi madre sin yo dar crédito.

Cami tenía la mirada desencajada, estaba tan cerca de entender lo que estaba pasando en su casa como de descubrir el misterio de la Sábana Santa.

-Mamá, por favor, te pido que te disculpes con Jazz- dijo mi hermano tenebroso a la respuesta de mi madre

Nora salió de su diálogo con su marido por un instante- ¿Qué?

-¿Cómo que qué? ¿Es que ni siquiera eres consciente de lo que acabas de decir?