Una Loca Navidad

Capitulo 6

Cami se llevó las manos a la cabeza- Dedme un respiro y les contestaré a todo...- Benja se había sentado en el reposabrazos del sofá que colindaba con la mesa del comedor.
Observaba todo desde la distancia y en él noto la mirada desesperada de Camila, pero obviamente no era el más indicado para ayudarla en ese momento... La bola se había hecho demasiado grande.

Diego bajó malhumorado- ¡¡Ya está!! ¡Lo han jodido todo! ¿contentos?

-Diego, ese lenguaje- lo regañó Nora

-¡Vengo a contarles que estoy comprometido, invito a Jazz a pasar las Navidades en casa! ¿y qué hacen ustedes? ¡¡la insultan!!

-Diego, tranquilízate- esta vez hablo mi padre

Carlos tenía cara de miedo y Cami sentía que el aire no le llegaba a los pulmones.

-Claro, es muy fácil pedir calma, pero mi prometida se ha encerrado en mi cuarto y no quiere hablar conmigo ¡¡¡por la culpa de ustedes!!!

-Eso sí es un problema...- Diego asintió con desesperación - ¿dónde vas a dormir? Porque Carlos, ¿era ese tu nombre, no?- Carlos asintió tímidamente- puede dormir con Camila, claro... pero en el cuarto de invitados sólo hay una cama... La de Benjamín- dijo mi madre

Esa última intervención dejó a todos enfrascados, Diego no podía creer que su problema se hubiera reducido a lo puramente práctico, y Camila, Carlos y Benjamín le daban vueltas al reparto de habitaciones... Cada uno con ideas diferentes.

-¡¡Mamá!! Te estoy contando que Jazz está mal ¡¡y sólo puedes pensar en dónde voy a dormir!!- empezó a caminar en redondo-  vivo en una casa de locos, está claro...

-Camila, estamos esperando una explicación...- dijo mi padre de forma autoritaria

Diego miró a Cami, a él ya le daba igual todo así que era cosa de ella.

Benja, Carlos, Nora y Juan Carlos miraban también a Cami, pero en su caso con curiosidad...

Cami tomo aire- Vamos a ver... Yo sabía que Diego iba a traer a Jazz... con lo que si todos los años tengo que aguantar las preguntitas referentes a si tengo o no tengo pareja, era obvio que este año se iban a hacer mucho más persistentes. -“Cami, piensa rápido, piensa rápido...”- Chochi... y yo llevábamos saliendo... poco tiempo- si pudiera hacer que sonara un poco más convincente sería estupendo- y le propuse que me acompañara a casa por puro egoísmo, porque aún no estamos en esa fase de “presentación familiar” ¿verdad?- Chochi asintió y si lo de ella no sonaba a convencimiento absoluto, el gesto de Carlos parecía el de alguien a quien amenazan de muerte para que conteste lo que se le dice- así, que él se enfadó conmigo, discutimos y me vine sola... Pero seguía sin querer enfrentarme a las preguntas eternas y opté por contaros una mentirijilla que desviase un poco la atención de “lo único que les interesa siempre”...

Ahora era el momento de las reacciones... pero eso no parecía estar ocurriendo. Diego se había sentado a maltratar un par de revistas y pasaba absolutamente de todo lo que se estuviera hablando en ese momento.

Carlos no sabía dónde meterse, ni siquiera se había quitado el abrigo aún...

Benja no apartaba los ojos de Cami, su mirada era penetrante, estaba claro que estaba intentando leer todo lo que sus ojos le dijeran acerca de la historia que acababa de contar...

Y Nora y Juan Carlos..., ellos aún estaban procesando la información.

-Bueno, ¿qué?- dije ya exasperada porque nadie decía nada

-Hay algo que no entiendo, Carlos se ha presentado como tu prometido, ¿no se supone que no llevan mucho tiempo?

Cami maldijo la memoria de su madre- Bueno... es que en principio no íbamos a decir eso para que no preguntaran más de la cuenta...