Capítulo 12

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  La joven se levantó del sillón y se dirigió a su cuarto, en el cual abrió su ordenador, entrando a Instagram y creándose una nueva cuenta la cual se llamaba: Asociación de los YouTubers Perdidos o AYP como lo llamaría la gente a partir de ahora.

Ahora solo tenía que esperar...

(...)

El móvil de una joven pelirroja sonó por la habitación interrumpiendo la canción de la banda 4x3 que sonaba por la habitación.

-¿Qué puto se atreve a llamarme mientras que escucho música?- preguntó Dark ( o Brittany para su familia) molesta.

Cogió su móvil, parando la canción de Quizás de mala gana, atendiendo la llamada.

-¿Hola?- se oyó una voz de una chica joven a través del teléfono.

-¿Quién eres? ¿Cómo has conseguido mi número?

-Lo primero, soy Aisaah. Y lo segundo, me lo dio Lemoni.

-Puercas... - masculló Brittany mientras que se levantaba de la cama - ¿Qué quieres?

-Mira... He empezado una organización para investigar las recientes desapariciones de los de Karmaland... Tengo algo en mi ser que me dice que esto no va a terminar aquí... Y necesito toda la ayuda posible. ¿Cuento contigo Dark?

-Ok... Pero, no me interrumpas cuando escuche música.

-Ok, trataré de no hacerlo. Te he añadido a un grupo de Discord, ¿puedes hacer llamada mañana a esta misma hora?

-Dale, nos vemos Aisaah.

-Adiós Dark.

La llamada se terminó a la vez que la pelirroja pensaba:

"Espero que Aisaah no tenga razón y que lo peor ya halla pasado..."

Que equivocada estaba...

(...)

Vegetta abrió los ojos lentamente, volviendo a sentir como las emociones lo abrumaban. Miró a su alrededor un poco nervioso intentando recordar donde se encontraba.

-¿Cómo he llegado hasta el hospital? - se preguntó el de ojos amatistas en voz alta a la vez que se sentaba en la camilla blanca.

La sala se encontraba vacía por lo tanto nadie contestó sus dudas.

-Espera... La mina... ¿Estarán los demás bien?

De repente una oleada de felicidad lo invadió, sin saber por qué y el amante del morado pensó:

-Si mi teoría de que tengo el poder de la empatía es correcta... ¿Quién está sintiendo esto?

(...)

Cristina se encontraba en la habitación de su prometido, acostada a su lado con lágrimas saliendo de sus ojos verde azulados.

De repente sintió como su futuro esposo se removía a su lado, por lo que se giró para poder ver cómo el albino abría sus ojos verde esmeralda con lentitud.

-¡Guillermo! ¡Estás bien! - dijo Cristina o como la llamaban aquí en Karmaland "Kristina" mientras que se tiraba a abrazar a Willy.

-¿Cristina? ¡Cristina estás aquí! - exclamó el de boina verde mientras que se acercaba a su prometida y unían sus labios en un dulce beso - ¿Cómo es que has llegado a Karmaland? ¿Ha venido alguien más contigo cariño?

-La verdad es que no me acuerdo de mucho, solo de escuchar unos susurros y de una intensa luz. Y si, alguien más ha venido, Lanita. Estábamos juntas cuando sucedió - dijo Cristina antes de empezar a llorar.

-Cris, cielo, ¿qué te pasa?

-Lo siento... He perdido al bebé. María... ya no está. Lana también perdió al suyo...

Lágrimas escaparon de los ojos de Willy, el cuál abrazó a su futura esposa, intentando tranquilizarla.

Iban a ser unos largos días...

(...)

Rubius se despertó, tirado en el suelo de su casa, con un increíble dolor en la sien.

-¿Qué ha pasado?- se preguntó en voz alta el híbrido de oso a la par que se levantaba del suelo.

-Pues... Una bruma gris te ha rodeado y te has desmayado- dijo una voz.

-¡¿Quién ha dicho eso?!- preguntó alarmado el falso albino- ¡Muéstrate COBARDE!

-¿Me-Me has entendido?

-Pues claro, ¡ahora muéstrate LADRÓN!

-No soy un ladrón... Soy yo Coringa.

-¿Qué-Qué?

Rubius empezó a buscar viendo como su perrito lo miraba ilusionado, moviendo la cola rápidamente. El híbrido de oso lo tomó en sus brazos, acariciando su pequeña cabecita y dijo:

-Habrá sido el golpe... ¿Cómo vas a poder hablar?

-Pues así... ¡Hola!

Rubius gritó soltando a Coringa haciendo que este cayera al suelo fuertemente sacándole un pequeño grito de dolor.

-Lo-Lo siento... No pretendía hacerte daño.

-No te preocupes, solo estabas sorprendido, al igual que yo... No me puedo creer que me entiendas.

-Igual, igual... ¿Cómo es que lo hago?

-Supongo que fue el Aura, ¿no?

-Seguramente Coringa... Da igual el como, solo estoy contento de poder entenderte- contestó Rubius acariciando al perro el cuál se restregaba en la pierna del humano -Eres justo como te imaginaba...

Que bonita es la unión entre una mascota y su dueño, ¿verdad? Lo malo de eso es que el amor que sientes a tu mascota... Dolerá el triple cuando esta se muera. Y Coringa si somos sinceras... TIENE LOS DÍAS CONTADOS.

(...)

Luzu, Lana y Fargan caminaban hacia casa del último. La joven se encontraba totalmente destrozada, su hijo, su futuro hijo... Había muerto. Hacía unos diez minutos su esposo se había dado cuenta y... No había sido bonito que digamos, pero lo importante es que estaban juntos en esto, igual que estarían juntos para todos los desafíos de su vida.

Y su amor sería eterno...

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O por lo menos los pocos días que le quedaban a uno de ellos...

Atrapados en Karmaland 4Donde viven las historias. Descúbrelo ahora