¿Hoy no?

Valentina

15 de septiembre: Me fui al centro de la ciudad a festejar la independencia de México, todo tranquilo y todo correcto, terminando el evento en el palacio municipal, el amigo que me acompaño ese día, menciona que conoce un men's club cerca de dónde estábamos, que iríamos ahí enseguida para continuar tomando, yo sin chistar accedí, la verdad esa fue la primera vez que entraba a un lugar así, tenía un poco de miedo pero supuse que no pasaría nada malo durante la noche y así fue, antes de entrar el guardia del lugar me reviso el cuerpo entero, buscamos una mesa mientras caminábamos por el lugar, tenía dos niveles, el primer nivel dónde se encontraba el tubo y bailan las chicas, ya estaba saturado, así que subimos al segundo piso, la vista era panorámica pero teníamos un mal lugar y terminó por dolerme el cuello de tanto voltear para poder ver bailar a las chicas en el nivel de abajo, realmente tenía más interés por embriagarme que por ver gente desnuda, aunque la verdad es que una chica me llamo la atención cuando la mire pasar, casi dos horas después de haber llegado al lugar y de que mi amigo estuviera abordando chicas cada dos por tres, una de ellas vino directo hacia mí, en la mirada se le notaba la molestia pero sonreía disimuladamente, se paró a un costado, me dio golpecitos con la rodilla en mi pierna y en cuanto gire la cabeza, se inclinó hacia mi oído y me preguntó si podía sentarse, yo un poco nervioso le contesté...

-Claro, aquí hay un lugar- y estirando el brazo, haciendo el intento por acomodar la silla que tenía a mi lado, la chica aventó mi brazo, jalo mi pierna con ambas manos y busco colocarse sobre ella, no sin antes esforzarse mucho, porque yo estaba pegado a la pared y en esa posición era muy incómodo, para mí y quizás también para ella pero no le importo y una vez que se acomodó, me preguntó si le podía invitar una copa, le conteste que sí, ella levanto la mano para llamar al mesero y después de pedir lo que haya pedido, me preguntó cómo me llamaba

-Me llamó Luis ¿y tú?

-Valentina-

- ¿eres de aquí Valentina?

- no, soy de Veracruz ¿y tú?

-vengo de hidalgo, llegué este año-

-pues yo tengo un mes aquí en Cancun-

- ¿cuántos años tienes Luis?

-tengo 19 ¿y tú?

-oh eres un niño... yo tengo 24

-vaya entonces tu podrías ser mi madre-

-ja, ja ¿y quisieras ser mi bebe? -

Tomando mi mano la llevo a uno de sus pechos, la verdad es que pocas veces había estado en esa situación y con una chica atractiva como lo era ella, con buen cuerpo, media al menos 1.60, morenita, labios gruesos, gordibuena, buen pecho, cinturita y un hermoso par de piernas y nalgas acorde a todo lo demás, ese día, el día que la conocí llevaba un traje de encaje azul turquesa y olía particularmente rico, lejos de excitarme con la acción que acababa de hacer, me dio bastante pena, ella se dio cuenta y haciendo mención de lo rojo que me había puesto, tomó mi cabeza y la presiono contra sus pechos, abrazándome cálidamente, muy nervioso y tratando de liberarme de aquella situación, empuje un poco para liberarme y empecé a hacer más preguntas, el tiempo pasaba y terminamos platicando de cosas al azar, la cerveza hizo su trabajo y solo recuerdo que terminamos divertidos y coqueteando el uno con el otro como niños tontos, te daría más detalles pero no los recuerdo la noche había terminado, el lugar ya casi vacío y las ganas de irme a dormir me ganaron, hizo que terminará apresuradamente la conversación con Valentina, pagué la cuenta y salimos del lugar mi amigo y yo.

Olvidé ese tema durante casi un mes, pero un día tomando en casa de otro amigo, se mencionó lo que había pasado en el men's club y esta vez animados por la historia, 4 personas nos dirigimos al lugar.