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Capítulo 12

Habían pasado seis meses aproximadamente, Bulma tenía un trabajo donde Vegeta y ambos seguían viviendo juntos, ahora como una pareja. Aunque era raro, pues se conocían de muy poco y ya tenían muchos planes a futuro.

Bulma iba caminando hacia un Starbucks, compraría tres cafés para ir a trabajar. Los compró y salió disparada hacia su trabajo, el cual le gustaba muchísimo.

Llegó y saludó a todos allí, vio a su novio en su lugar junto a su amigo y saludó a ambos, a uno de beso en la mejilla y a otro de beso en los labios. Les entregó el café a cada uno y subió a donde era su lugar de trabajo.

Ella no estaba en llamada como su novio y su amigo, ella estaba en la parte donde enviaba a la patrulla, ambulancia, protección civil, etc...al lugar indicado por los operadores. Era un punto intermedio.

Justo al medio día, salió a tomar su almuerzo junto a Gokú, a veces le tocaba con él y a veces con Vegeta. Pero los tres salían a la misma hora.

—Dime, azulita ¿Qué trajiste hoy?— le dijo Gokú y ella rió.

—Algo de sushi de ayer, pero no te daré ya que siempre me robas mi comida, así que no— le sacó la lengua divertida.

—¡Vamos Bul!— se quejó e hizo un puchero.

—Te acusaré con Milk si sigues robando mi comida—

—Será la última vez, lo prometo— un nuevo puchero apareció en los labios del peli negro.

—Eso dijiste la última vez— y ambos rieron.

Después de mucho tiempo, Bulma se sentía plenamente feliz, sin ningún tipo de problemas, estaba con el hombre que amaba, tenía buenos amigos y se sentía libre...pero nada es para siempre.

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Vegeta y Bulma llegaron a casa, ambos se quitaron los abrigos y zapatos para poder descansar.

—¿Quieres que pida algo de cenar?— preguntó Vegeta.

—Daría mil dólares por tener un gran trozo de pizza—

—Pues pizza entonces— y le dio un rápido beso en los labios a la chica.

Habían pasado un par de horas, los dos acababan de terminar de comer y estaban recostados en la cama. Comenzaba a ponerse algo candente la situación...

Vegeta besaba con desesperación a Bulma y esta se dejaba hacer lo que él quería. De un momento a otro ella estaba encima de él mientras restregaba su intimidad en el peliflama.

Todo iba increíble hasta que el teléfono comenzó a sonar fuertemente.

—Si es urgente volverán a llamar— le susurró Vegeta.

Siguieron besándose con pasión pero el teléfono sonó nuevamente, Bulma rodó los ojos enfadada y se levantó a contestar.

—¿Diga?—

—Bulma...— se escuchó una voz masculina.

—Ella habla—

—Oh, cariño. Cuanto tiempo sin verte ni oírte—

—¿Quién eres?— preguntó algo asustada y le dio una rápida mirada a su compañero.

—¿Te olvidaste tan rápido de mí? Yo solía ser el amor de tu vida...— y se rió de forma seca.

—Yamcha...— se le cortó la voz y le dieron ganas de llorar.

Vegeta se levantó rápidamente de la cama y fue directamente hacia ella al escuchar el nombre que salió de sus finos labios.

—El mismo en persona— se rió nuevamente tras la línea.

—¿Cómo...?— tartamudeó Bulma con las lágrimas en sus mejillas.

—¡Me alegra que preguntes! Alguien pagó todo, aún no le conozco pero dijo ser amigo tuyo...se llama Rad...Radi—

—Raditz...— le interrumpió ella.

—¡Ese mismo! En fin, te veré muy pronto, bonita— y le colgó.

Bulma soltó el teléfono y se tapó la boca para llorar aún más, Vegeta la abrazó casi por reflejo y le preguntó qué sucedía.

—Yamcha está libre...y viene por mí—

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Hola, cómo andan?

Es cortito, ya sé ):

En fin, voten y comenten que se les agradece muchísimo ♡

Tomen agua, hagan ejercicio y coman sano.

Chao!