Vegeta abrió los ojos, se percató de que la mujer que hace un momento dormía con él ya no estaba, pero era casa de ella, no podía irse.
Se sentó en la cama y estiró los brazos, divisó por la puerta a la peli-azul con una bandeja de café, jugo y pan tostado, ella traía puesta su camisa pero por debajo estaba completamente desnuda.
No sabía qué le había provocado esa imagen, pero quería ver a esa mujer cada día de esa manera.
—Buen día— dijo ella con una sonrisa.
—Buen día, preciosa-— y le besó los labios mientras ella reía.
Desayunaron un poco y decidieron darse un baño juntos, para después proceder a cambiarse y arreglarse.
—Debo ir al trabajo, ¿Compartimos el taxi?— le preguntó Vegeta.
—No puedo, debo ver a mi novio en una hora—
Él se quedó estático, casi sintió un balde de agua fría caer sobre su cuerpo con un horrible vuelco en el estómago.
—Dijiste que eras soltera...— soltó casi en susurro.
—Ya sé, pero bueno, no pasa nada— contestó fríamente.
"Pero qué mierda..." pensó Vegeta casi al borde de querer gritarle, la vio vestirse lentamente.
Estaba peor que confundido, qué diablos le pasaba a esa mujer, por qué mentir así. En cambio Bulma parecía muy tranquila, casi parecía no importarle lo que estaba pasando justo en ese momento.
Él terminó de vestirse rápidamente y en ese silencio incómodo para Vegeta sonó el celular de ella.
—Hey— contestó ella fastidiada.
La vio voltear los ojos, suspirar y fastidiarse el doble, pero no entendía por qué.
—Raditz, ya te dije que no puedes estar cuestionando todo lo que hago, eres mi novio, no mi padre— y dicho esto le colgó.
"MIERDA, MIERDA, MIERDA"
Eso pensaba Vegeta una y otra vez, si aquel hombre del teléfono era el mismo que él creía estaba más que jodido, su amistad con Kakarotto estaría de por medio.
Tomó sus zapatos, sus llaves y caminó hacia la puerta sin decir nada, quería irse de ese lugar YA.
—Llámame— escuchó decir a Bulma en forma burlona.
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Pasó por un café y camino hacia su trabajo, ninguna mujer lo había usado de esa forma, se dejó enredar más rápido de lo normal. Pensaba y pensaba en aquel nombre que Bulma dijo durante la llamada, habría problemas MUCHOS problemas.
En cuanto llegó a su empleo vio a Gokú a lo lejos despidiéndose de...la chica de anoche, ni siquiera recordaba su nombre. Caminó más rápido para no toparse con él en el pasillo, se situó en su lugar y decidió iniciar su labor.
—911 ¿Cuál es su emergencia?—
Y así continuó su llamada sin prestar un poco de atención a su amigo que estaba sentado a su lado.
Para cuando terminó su turno Gokú lo detuvo.
—¿Cuál es tu problema?— le reclamó.
—¿De qué hablas, Kakarotto?— le contestó casi indignado.
—No me has hablado todo el día, por eso pregunto— Vegeta se quedó algo estático.
—Tengo una resaca terrible, es solamente eso— atinó a responder rápidamente.
—Bueno, en fin. El viernes haré una fiesta en mi casa y obviamente debes ir porque eres mi mejor amigo—
Vegeta solamente lo miró algo dudativo pero finalmente aceptó, qué más da.
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Llegó a su casa y se dio una ducha rápida, comió algo y su celular sonó, no respondió "Si es importante volverán a llamar" pensó ignorando el celular, a los pocos segundo sonó nuevamente y fastidiado respondió.
—¿Diga?—
—Vegeta...— escuchó que dijo su nombre de una forma tan excitante que sus sentidos reaccionaron.
—Bulma...?— dijo casi sin aliento.
—Ven por favor...— escuchó su respiración entrecortada y ella soltó un gemido que le hizo tomar su chaqueta rápidamente.
—Estoy en 5 minutos— y colgó.
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HOLAAAAAAAAAAAAAA
¿CÓMO ANDAN?
Yo bien la vdd
En fin, voten y comenten se les agradece muchísimo y me motiva a seguir.
Tomen agua, hagan ejercicio y coman sano.
Chao!