Capítulo 4

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Gokú esperaba a Vegeta fuera de su casa para que ambos llegaran juntos al dichoso bar, después de unos minutos por fin salió Vegeta, pidieron Uber y fueron directo al establecimiento.

Llegaron y se sentaron en una mesa, al pasar una hora y con unos pequeños tragos bebidos, ambos se sentían con la suficiente confianza para hablar con alguna chica, Gokú buscó con la mirada a alguna que llamara su atención...

—Mira allá, a mis doce— dijo y Vegeta giró la cabeza —Es una hermosa chica ¿No crees?—

—Kakarotto, ni siquiera se le ve la cara, está de espaldas— le contestó mirando a la chica.

—Sólo mira eso...seguro es preciosa, hay que esperar a que dé la vuelta—

Ambos la observaron atentos, con una mirada insistente para que la chica se diera cuenta de ello y funcionó. Ella giró la cabeza.

Vegeta abrió los ojos y la miró de pies a cabeza y sus sentidos explotaron ¡Era Bulma! Claro que era ella, reconocería esos ojos en cualquier parte, no había visto otros así.

—Joder...— fue lo que salió de sus labios y Gokú lo miró confuso.

¿Cuánto había pasado? ¿Un mes y algo? Ella estaba distinta, claro que aquel día la había visto en ropa de trabajo y sin maquillar (¡Y aún así le había parecido hermosa!) Pero ahora tenía un vestido rojo despampanante con su cabello suelto hasta la mitad de la espalda y maquillada. ¡Esa mujer es una diosa!.

—Te dije que era hermosa— se rió Gokú —Ve a hablar con ella, anda— Vegeta asintió y fue hacia la barra.

Bulma volvió a dar la espalda y estaba sentada de manera muy sensual mientras bebía, muchos hombres se acercaron y a ninguno le dirigió la palabra, no había ido a ligar, sólo a beber un poco.

—Bulma—

Giró la cabeza al dueño de la voz y lo miró de abajo hacia arriba.

—Vegeta— respondió ella sonriendo y volviendo la vista a su copa.

—No esperaba verte aquí— dijo él pidiendo un trago.

—Ni yo a ti—

—¿Qué haces aquí?— Bulma giró sobre su silla y lo miró a la cara.

—Lo que todos...un trago y luego sexo con algún desconocido— y cruzó la pierna.

Vegeta tragó saliva ¿Lo estaba provocando? ¿O estaba esperando su reacción?. Porque no pudo evitar bajar la vista a sus piernas...

Él se rió y pasó la lengua por sus labios.

—Nah, te observé un rato y no has hablado con nadie—

—Porque nadie me ha interesado, Vegeta— y bebió de manera lenta, tragando el líquido despacio —¿Qué tal tú? ¿Alguna que te interese?—

—Sólo una, pero sinceramente es demasiado hermosa— le contestó mirándola lentamente.

—¿Y quién es?—

—Eso da igual...el punto es que el vestido rojo que trae puesto me está volviendo loco— se le acercó un poco más y ella retrocedió.

—En fin ¿Por qué no me llamaste?— soltó Bulma pasando la lengua por sus dientes. Esa acción prendió aún más a Vegeta.

—Pues...estuve algo ocupado, pero el día que tú quieras salimos y canceló todas mis sitas— ella se rió y terminó de beber.

—Me tengo que ir, quedé con una amiga para ir a otro sitio a bailar— se levantó de la silla y tomó su bolsa.

—¿Amiga? Yo vengo con un amigo, tal vez podamos ir con ustedes— él le señaló a Gokú que los observaba a lo lejos.

—Claro, no hay problema. Vamos—

Comenzaron a caminar y Vegeta la tomó de la cintura para juntarla con él, pero en un veloz movimiento ella se liberó de su agarre.

—No es así de sencillo, cariño— y le guiñó el ojo.

Llegaron a la mesa donde estaba Gokú y conversaron el plan para que luego los 3 fueran por la amiga de Bulma.

******

La vieron en la famosa discoteca y ambas chicas se saludaron.

—Milk, ellos son mis nuevos amigos. Vegeta y Gokú— presentó Bulma y se saludaron de beso.

Entraron al lugar y se sentaron algo lejos de la pista, el click de Gokú con la chica de cabello negro había sido casi instantáneo. Ambos ya estaban bailando y riendo como si se conocieran de mucho tiempo atrás.

Mientras Vegeta y Bulma estaban sentados observando a el otro par divertirse mientras conversaban.

—¿Y qué pasó con tu ex...?— la chica suspiró y giró la cara.

—No hablaré de ello aquí ¿Vale?— dijo en casi un susurro, mientras el otro asentía lentamente.

De fondo se escuchó una canción en bachata y a Bulma le brillaron los ojos, y Vegeta lo notó. Era el momento perfecto de conseguir por lo menos un beso.

—¿Quieres bailar...?— le extendió la mano y se levantó se su asiento.

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HOLAAAAAAAAA

¿Qué onda? ¿Cómo los trata la vida?

Ya sé que tardé en actualizar pero la escuela me consume mi tiempo. Pero anyway, aquí andamos al cien.

Voten y comenten muchoooo ¿Qué creen que pase en el siguiente cap?

En fin, lindo día, tarde o noche.

Chao!

[911]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora