[911]

Capítulo 9

Bulma llegó a su casa y escribió un mensaje de texto hacia Vegeta.

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Vegeta ♡

Cómo estás? ✔✔

Hola, estoy bien.

¿Y tú?

También lo estoy :)✔✔
¿Vienes a mi casa?✔✔

No lo sé, Bulma. No
quiero otro golpe en
la cara, sabes?

Sólo quiero charlar :)✔✔

Será otro día, sí?

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Bulma suspiró y dejó el celular a un lado de ella, acaba de tener un fuerte pelea con su novio y seguía pensando en Vegeta, debería llamar a Raditz y no a Vegeta.

Se dejó caer en su cama, esperando las millones de llamadas de su novio, ni siquiera le iba a responder. Sólo se acurrucó en su cama y lloró profundamente, se sentía mal, por todo.

Al siguiente día se levantó al rededor de las 5 a.m. era sábado, así que no debía ir a trabajar, se dio cuenta que seguía maquillada y con su vestido, así que se metió a la ducha, se vistió con algo cómodo y a eso de las 6 de la mañana llamó nuevamente a Vegeta.

—911 ¿Cuál es su emergencia?—
Ella se rió amargamente ante su comentario.

—Deseo ordenar una pizza— y ahora él endureció su tono.

—No me lo digas ni de broma, que corro hasta tu casa—

—Ven— Vegeta suspiró tras la línea.

—Bulma, son las seis de la mañana—

—Pasaremos todo el día aquí, anda, ven conmigo—

—Estoy ahí en 5—

Finalmente colgó la llamada, la última vez que Vegeta estuvo en su departamento (pagado por Raditz) ellos había tenido una apasionada noche. Pero aquel día Bulma no planeaba algo así.

Vegeta llegó y tocó la puerta, le abrió la puerta y vio a Bulma sin maquillar ni arreglada, sólo estaba ella en su más simple imagen.

Bulma observó al peliflama detenidamente y se dio cuenta que el labio de este estaba algo abierto por los golpes de la noche anterior, se acercó a él y le acarició los labios con sus dedos de forma muy lenta para finalmente darle un beso que él respondió sin chistar.

Se separaron y entraron al departamento.

—¿Tienes hambre?— preguntó Bulma sonriendo —Puedo hacer de desayunar si quieres—

—Siendo honesto, me gustaría dormir un poco—

Ella se rió ligeramente y asintió, ella también tenía algo de sueño.

—Vamos, ven—

Ella le extendió su mano y lo guió a la habitación que él ya conocía a la perfección.

Entraron y Vegeta se quedó mirando el cuarto, ya lo conocía, pero no había tenido tiempo de observarlo como ahora, lo miró por todos lados, se dio cuenta que habían fotos de ella con amigas, discos, libros, maquillaje, entre otras cosas.

Giró la vista hacia ella y la vio meterse en las cobijas de la cama mientras le daba palmaditas al lugar junto a ella, él sonrió ligeramente y fue a acostarse con Bulma.

Quedaron de frente, se observaron un momento y ella habló...

—Ojalá todo fuese diferente...—

—¿Por qué lo dices?—

—En otra vida tú serías mío y yo sería tuya—

—¿Y por qué no en esta?—

—Porque es difícil...—

Se quedaron en silencio mirándose fijamente a los ojos hasta que finalmente Vegeta la besó dulcemente, sin morbo, la tomó de la cintura obligándola a acercarse, se separó de sus labios para darle un pequeño beso en la frente y suspiró para cerrar lo ojos dispuesto a dormir. Bulma hizo lo mismo y se acurrucó con él.

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Eran aproximadamente las 9:30 de la mañana y Bulma abrió los ojos por la tenue luz que se infiltraba por la cortina de la ventana, respiró profundamente y sintió el olor del hombre que dormía a su lado, sonrió para sus adentros y se levantó sin hacer ruido.

Fue directamente hacia la cocina, encendió el televisor con las noticias y se dispuso a preparar el desayuno para ella y su acompañante.

Más tarde escuchó ruido y alguien caminar hacia la cocina, allí estaba Vegeta, con cierto toque de sueño.

—Buen día— dijo ella.

—Buenos días— respondió Vegeta sentándose en una silla de la cocina —¿Qué miras? ¿Noticias?—

Cuando dijo eso una nueva nota salió

"Seguimos informando, que el millonario Raditz Son, acaba de captarse saliendo de un lujoso hotel de la mano de una chica rubia bastante bella, las malas lenguas están preguntando ¿Dónde está la bonita peli-azul? ¿Será que terminaron?..."

Y Bulma apagó el televisor suspirando fastidiada.

—¿Te molesta eso?— se atrevió a preguntar Vegeta.

—No, por supuesto que no, hace mucho que hace eso cada que discutimos, pero me estresa como los medios viven de esas noticias, además ya te dije que para mí Raditz no significa nada más que un eterno agradecimiento— le sonrió y le dio el control del televisor a Vegeta —Tengo Netflix y Amazon, puedes poner lo que quieras— 

Vegeta se quedó mirando el control remoto y volvió a preguntar.

—¿Por qué sigues con él? Es más ¿Por qué estás con él?—

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Hola, cómo andan?

¿Apoco no Vegeta es una pera en dulce? Yo lo amo.

En el siguiente capítulo descubriremos por qué mami Bulma anda con bb Raditz. :)

En fin, espero les haya gustado.

Voten y comenten que se agradece bastante.

Coman sano, tomen agua y hagan ejercicio ♡

Chao!