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- Eros está mal- dijo Holly paseando de un lado a otro en en la oficina de Nicholas- Jamás lo había visto así. Su comportamiento es errático, no puede hacer su trabajo con normalidad y yo no sé que hacer. No podremos  esconder esto del concejo por demasiado tiempo.

Nick suspiró. En ningún momento creyó que las cosas terminarían de esa manera. ¿Cómo rayos iba a saber que Cupido no podía enamorarse? ¿Y cómo es que estaban tan seguros de que fuera imposible? El hecho que ningún Cupido antes de Eros lo hubiera hecho no significaba que fuera imposible. Vamos, el concejo de San valentín debería saberlo. Se suponía que dar amor era  la prioridad ¿no?.

-¿Y qué pasa si ellos se enteran? - preguntó Norién con seriedad.

- No estoy segura, porque esto nunca había sucedido antes. Lo más probable es que le den un reemplazo mientras evalúan la situación y eso mataría a Eros. Él ama lo que hace y no poder hacerlo con normalidad ya está siendo lo suficientemente malo para él. - Holly por fin se detuvo y su expresión era tan desolada que Nick sintió retorcer su corazón - Lo he visto llorar en más de una ocasión, pero el se empeña en decir que todo está bien.

Soltó un gruñido porque su intención no era que las cosas se tornaran así de complicadas. No quería lastimar a nadie y le jodía aun más que al estar a pocos días de navidad, estuviera demasiado desbordado con tareas como para hacer algo al respecto. Apenas si había tenido tiempo de ir y checar a Matthew un par de veces.

El hombre estaba sacando su vida adelante y eso era genial, sin embargo era difícil no notar el aura de tristeza que lo rodeaba, el como las sonrisas no llegaban a sus ojos y a veces parecía perderse demasiado en sus pensamientos. Un par de noches atrás había ido a checarlo y se arrepintió al encontrarlo llorando en la sala, en brazos de su amiga Julia.

"Es que duele demasiado. Es como si me faltara algo importante y no sé qué hacer con eso" había dicho el escritor entre sollozos. " Sé que no soy el primero al que rechazan, pero no puedo evitar sentir que me estoy muriendo por dentro".

De haber sabido que las cosas resultarían de esa manera, no hubiera intervenido.

-¿Creen que esto sea mi culpa?- preguntó después de un rato. Holly y Norién parpadearon confundidos en su dirección. - Ya saben, por haberlo pinchado con una de sus flechas hace meses.

-No tendría por qué ser tu culpa. Después de todo no se ve afectado por las flechas, es más, incluso todos los colaboradores somos inmunes.

-¿Y cómo es que pueden encontrar pareja? ¿O es que los "golpe relampago" tampoco se pueden enamorar?- Los ojos amatista de Norién se llenaron de curiosidad. El dulce elfo se veía sumamente sexy cuando tenía esa mirada.

- Por supuesto que lo hacemos. Pero no podemos flecharnos los unos a los otros. cuando encontramos a nuestra pareja ideal es como si lo sintieramos, como una energía en nuestro interior.

- ¿Y no crees que para el mismo Cupido podría funcionar de la misma manera?- El elfo entrecerro los ojos- es solo que no me cabe  en la cabeza que no pueda tener amor cuando se asegura de que los humanos puedan tener ese hermoso sentimiento. Solo suena demasiado injusto.

-Lo dije antes. Es algo que no había pasado así que no se tienen antecedentes. Pero supongo que me guste o no, debo hablar con el concejo, las cosas no pueden seguir así.

- Es lo mejor- estuvo de acuerdo Nick. - Cuéntanos como van las cosas.

- De acuerdo y espero que todo salga bien esta navidad- Holly les dedicó una sonrisa encantadora antes de desaparecer.

El hombre de cabello oscuro cerró los ojos y dejó caer la cabeza en el respaldo de su silla. Esperaba que el concejo de San Valentín no reaccionara mal, aunque lo dudaba porque los concejos de cada festividad estaban conformados por cada uno de los que habían estado en el puesto con anterioridad, por lo tanto el concejo de San Valentín lo precedían  todos los Cupidos anteriores y no los imaginaba siendo maliciosos con uno de los suyos y mucho menos con Eros que era uno de los más habilidosos en su trabajo. Al menos esperaba que todo terminara bien porque se sentiría demasiado culpable si resultaba siendo el responsable de arruinar a Cupido.

El Turno de CupidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora