Desde el principio de los tiempos, Los ríos han sido las arterias que transportan vida... Las montañas y la tierra fueron mi piel... Los Bosques y la Selva mi pelaje... Todo estaba en permanente armonía... Hasta que apareció el ser más cruel y caprichoso que jamás conoció este planeta... EL HOMBRE... Una forma de vida supuestamente inteligente, Pero desperdiciada por la codicia, la violencia y la incultura... Yo soy Gaia, la Madre Naturaleza, y todo el mal que me hagas, ¡TE LO DEVOLVERE!