Despues de que salieramos de ese pasillo ibamos caminando hacia la sala común de Gryffindor cuando derrepente:
-Cyli espera!!!! Cyli!!!!.- era Herm.
-Que? Que pasa?.- me frené para voltearla a ver.
-Mcgonagall te busca, es por lo de Seamus quiere hablar contigo o si no le bajara 150 puntos a nuestra casa.
-No tengo tiempo Herms.
-Pero los puntos....
-Me valen una mierda los putos puntos!!!! No puedo okey?! No puedo!!
-Bueno pero....
-Pero nada Hermione!!! Adios.
Y seguí mi camino, la neta iba pensando que me pase de grosera con Herms pero es que estaba realmente preocupada por Draquito osea realmente tenía que estar muy mal para que mostrara sus sentimientos EN PUBLICO y mas LLORAR.
So ya ibamos llegando a las escaleras y en eso un gato se paró enfrente de nosotros pero yo no le tomé importancia y seguí mi camino, entonces en eso el gato se transforma en MCGONAGALL NO MAN ALTO INFARTO ESTABA POR DARME AHÍ.
-Señorita Tomlinson, se podría saber por que no asistió a donde se le pidió que fuera?.
-Perdon profesora pero yo.....
-Pero nada señorita, deje a el señor Malfoy y vaya a mi oficina, AHORA.
En eso se escuchó un super leve susurro de mi bebé que apenas pude entender:
-No... por-favor. Por que hoy Mcgonagall.
Entonces me armé de valor y dije:
-No puedo profesora, estoy ocupada.
-Ah, ahora usted manda aqui?! Dije a mi oficina AHORA o le quitare 250 puntos a su casa más los 70 puntos menos por golpear a un conpañero entonces ahí ya irían 320 puntos señorita, un número que ningun alumno ha alcanzado jamás. (Osea pinche Mcgonagall por que 250 puntos por no ir con ella?!, con 70 estaba bien)
-Esta bien, quitemelos pero ahora estoy ocupada profesora.
Entonces ignoré a Mcgonnagall y empezé a subir las escaleras, iba temblando osea me estaba cagando de miedo tipo IGNORE A UNA MAESTRA Y LE IBAN A QUITAR 320 PUNTOS A EL PINCHE GRYFFINDOR POR MI CULPA Y QUIEN SABE QUE CASTIGO ME ESPERABA POR IGNORARLA Y LOS PUNTOS MENOS POR IGNORAR A UN PROFESOR, pero bueno Draco me importaba más en esos momentos que mis compañeres enojades conmigo por los puntos menos.
Draquito seguía llorando mientras subíamos pero yo notaba que conforme ibamos subiendo iba más lento, como si se cansara de tanto subir y en eso se paro y se dejó caer el el piso que hay entre escalera y escalera, acercó sus rodillas a su pecho, ocultó su cara entre sus piernas y empezó a llorar mucho más intenso, yo no podía creer que fuera capaz que un ser humane llorara tanto pero no le tomé importancia y me agache junto a él y le dije:
-Ven Draquito.
Levantó la mirada y me vió con esta carita:
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.