Capitulo V: La audición

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Joseph

No puedo creer que mi madre haya aceptado la idea de que Madison durmiera en nuestra casa, pero claro ahí va Joseph de tontito a complacer a su apuesta.

Salgo de mi habitación para ir al baño y justamente en el pasillo me encuentro  con Madison con la pijama que le puso mi madre después de que se quedó dormida mientras que yo sólo tengo puesto un boxer.

Me observa y tiene una sonrisa tonta.

— Buenos días guapo — Dice con sarcasmo y se acerca a mí. Frunzo el ceño y la ignoró para entrar al baño y justo cuando iba a entrar...— Me sorprende que hayas cedido a la petición de Medth, jamás te detendrás hasta tenerla en tu cama. — Eso es más que suficiente para provocarme, comienzo acercarme a esa chica tonta.

— ¿Qué te hace creer que sólo quiero eso? — Ella ríe fingidamente, mientras se acerca aún más a mí poniendo uno de sus esqueléticos dedos en mi abdomen descubierto.

— Por favor Joseph, no buscas más que eso, pero te advierto que si te metes con Medth me conocerás.— Que absurda amenaza, ni me imagino de lo que sería capaz, sale mi sonrisa llena de ego.

— Hola chicos, ¡Ay no! Joseph ponte algo, ¿Cómo puedes estar así frente a una jovencita? — Dice mi mamá sorprendida, mientras sigo estando molesto con Madison, ella sólo se muestra firme ante lo que me dijo.

— ¡¿Madison?! — Exclama mi hermana feliz de verla, eso me confunde.

— ¡Yamis! Amiga.— Corre hacia ella para abrazarla.

— ¿De dónde se conocen? — Pregunto confundida. 

— En la...— Se muestra nerviosa mi hermana.

— En la biblioteca, Yamis me ayudo a encontrar un libro — Dice Madison y mi hermana parece que está de acuerdo, pero aún así me parece que algo ocultan porque mi hermana nunca a tenido amigas, jamás ha sido eso lo suyo.

— Bien chicos, ay escuela, deben cambiarse, Madie, te traigo ropa de Yamis, espero y no te moleste usar este tipo de ropa.—  Ella acepta la ropa y parece estar de acuerdo, aunque mi hermana usar ropa dark  pero elegante, además de que es muy hermosa, tengo que aceptarlo, por eso tiene a sus pretendientes pero me encargo de ahuyentarlos cómo buen hermano Alfa menor, porque soy el hermano menor pero él que manda.

— Gracias Joce, en un momento bajamos las chicas — Dice Madison y las dos se van a la habitación de mi hermana. Mientras voy a la mía para cambiarme.

Agarró unos pantalones negros con una playera negra y me pongo una camisa roja con cuadros negros desabrochada, además mis converse negros, mi cabello medio lo peino y sonrió frente al espejo antes de bajar.

"Joseph si que eres todo un galán".

Lo sé voz interior.

Me digo a mi mismo mentalmente,  me encanto. Bajando observó que mi madre ya tiene preparado el desayuno, waffles y café, eso sí que es delicioso.

— Muy bien desayunen rápido que se hace tarde. — Ordena mi madre.

A decir verdad el desayuno fue tan ruidoso considerando que tengo tres mujeres en la mesa y ambas son tan parlanchinas, sin embargo ya vamos en camino a la escuela.

— Hola chicas y chico — Dice Alan estacionado su auto Mustang rojo frente a nosotros y mi hermana sonríe de verlo al igual que Madison.

— Oh, creo que no se conocen Yamis, Alan, Alan, Yamis — Los presenta Madison y Yamis lo saluda marcando distancia y eso está más que bien, nadie puede acercarse a mi hermanita.

Todo Por Un Maldito ErrorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora