Capítulo XIII: Una cita en el parque

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Meredith 

Llego el domingo y eso significa que cumplo mi primer mes de ser la novia de Joseph, me citó en el parque. La verdad se me hace raro que no vaya  a recogerme pero lo estoy esperando, como odio su impuntualidad, últimamente siempre llega tarde; incluso a la escuela.

— Hola, ¿Tu eres Meredith? — Me pregunta una chica con un ojo verde y uno azul pero el aroma que tiene me resulta familiar, ¡Karol!. Suena mi celular y es un mensaje de Joseph.

"Hola Amor.

Sé que estas emocionada porque es nuestro primer mes juntos, pero en este día quiero que confirmes que tus sospechas son incorrectas, por eso te hice una cita con Karol. Por favor acepta, esta abierta a responder TODAS las preguntas que cuestiones, es una gran chica y sé que te va agradar, incluso tal vez más que Madison, ojala y puedan llegar a ser amigas.

Te amo y ten por seguro que te voy a reponer este día"

Sin comentarios, siempre quise conocer a la tal Karol porque a decir verdad mi novio se que pasa tiempo con ella, pero nunca me quiere hablar de ella. Lanzo un suspiro.

— Me imagino que tu eres Karol — Ella asiente.

—Mucho gusto, soy amiga de Joseph o más bien tu novio, felicidades por su primer mes juntos. Ojala cumplan muchos más, —Dice con una amable sonrisa —Joseph es un gran chico y jamás de verdad jamás deja de hablar de ti, se nota a leguas que esta complemente enamorado de ti.— Yo le regalo una sonrisa forzada, me siento tan incomoda y llena de celos, no digo que ella no sea agradable pero habla de mi novio como una si lo conociera mejor que yo. Sólo espero que mi curiosidad no me decepcione.— ¿Te parece comer helado? Por aquí hay un señor llamado Mike y no creerás la maravilla de helado que vende. — 

Acepte su invitación llegamos al puesto del hombre que me vio por un momento y me entrego mi helado, ni siquiera me pregunto que helado quería. — Tranquila Mike sabe que helado nos conviene, no te arrepentirás.

—Y Karol este es el tuyo — Le entrega el helado a la chica y ella paga, comenzamos alejarnos del heladero para sentarnos en una banca frente a la fuente que esta en el centro del parque. 

"No puedo creerlo, Meredith ¿Dónde están tus modales?, ¿Por qué no pagaste tu propio helado?"

— Permítame pagarte mi helado — Le digo a la chica.

—No, déjalo así, —Abro la boca para decir algo pero ella continua —  solo disfruta del helado y no me hables de usted,— Me pregunto si Joseph a comido helado con ella. 

Pruebo el helado y ¡Oh por Dios! la combinación es increíblemente perfecta para mi paladar. 

— Meredith no quiero que me veas como una intrusa— Dice captando mi atención mientras sigo disfrutando de este helado — Y sé que no sirve de nada que te diga la basura de que Jos y yo solo somos amigos — ¿Cómo se atreve a decirle Jos a mi novio? — El punto es que puedo decir que en este momento estas incomoda por mi presencia, tienes celos se nota en tus mejillas rojas, eres bastante tímida, te hace falta confiar en ti misma y desde luego haces lo que los demás quieren por aceptación. Conmigo no tienes que fingir, se leer muy bien a las personas y todo lo que te dije sabes que tengo razón, así que pregunta, ¿Qué quieres saber de mí? porque esa la finalidad de una cita, el conocernos — Estoy perpleja por sus palabras porque tiene razón con cada letra que salió de su boca, me describió tan perfectamente, tal vez Joseph le hablo de mí.

— ¿Cómo... cómo? ¿Joseph te dijo todo eso?— Pregunto confundida.

— No y si, a pesar de que no sabes quien soy yo si se quien eres te he visto muchas veces con tu hermana Clarisa y cuando estas con ella se nota la infelicidad en tu cara, tus ojos... Tus preciosos ojos revelan mucho de ti  aunque lo lo creas.

Todo Por Un Maldito ErrorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora