P: Pechos

3K 159 105
                                    

︿︿︿︿︿︿︿︿︿︿︿︿

︿︿︿︿︿︿︿︿︿︿︿︿

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

· •「 ░╎❝. 𝙿𝚎𝚌𝚑𝚘𝚜 . ❞╎░ 」• ·

┌┈               ┄┐

── · 🍑 · ──
Advertencia: La siguiente lectura contiene lime, sexualidad y erotismo que puede llegar a incomodar a algunos lectores.
── · 🍑 · ──

└┄               ┈┘


—¿Por qué miras tanto mis pechos?

Dejó de escribirle el mensaje a su amigo porque por suerte su celular no se cayó de sus manos. Pensó que tal vez había escuchado mal lo que le habían preguntado. Con lentitud y algo de temor, levantó la vista para mirar a la chica.

—¿Qué dices?

—Te pregunté sobre por qué miras tanto mis pechos.

No podía permitirse ser atrapado con tanta facilidad. No podía haber sido tan obvio. —¡Yo no miro tus pechos!

Ella dejó caer levemente su cabeza hacia adelante, sin dejar de verlo, con una expresión de agotamiento. —¿Es enserio? Eres terrible para mentir.

Ah, no podía escaparse de las habilidades de la chica. A veces pensaba que ella tenía superpoderes, o una especie de sexto sentido.

—Todo el mundo lo nota. No es como si disimularas muy bien.

—¡Está bien, quizás lo hago! —le gritó. —¡¿Qué pasa si es así?! ¿Acaso te molesta?

—Responde mi pregunta. —Aoi se acercó a él, y le dio esa pequeña mirada furiosa suya (ahora que lo pensaba le recordaba a un gato, o a un pomerania). —¿Por qué miras tanto mis pechos?

Se cruzó de brazos y miró en otra dirección. —¡Porque me gusta! ¡¿Hay algo malo con eso?!

Aoi lo miró con los ojos entre cerrados unos segundos más, antes de volver a sentarse recta y alejarse un poco de él. —Bien, solo quería que respondieras y fueras honesto conmigo.

Aoi siguió recortando el papel de colores. Su hermano menor estaba cumpliendo años, y él la había acompañado a comprarle un regalo¹. Después pasaron por su casa, y estaban envolviéndolo. Ella estaba cortando tiras de papel colorido para el relleno.

Su propia mente lo traicionó y terminó mirando esa parte de su cuerpo de la que estaban hablando. Estaba usando un suéter rojo que, si bien no mostraba piel, ni le permitía ver el nacimiento de su carne, era ajustado y le daba una vista del tamaño que tenían.

—Lo estás haciendo de nuevo.

Mierda. Se dio un golpe en la cabeza. —¡No lo hago!

—¿Por qué te gustan tanto? —le preguntó, sin rabia, simplemente con su voz calmada y curiosa. —No son los pechos más grandes del mundo.

   ⃟ ཹ։❀ ፧ 𝐈𝐧𝐨𝐀𝐨𝐢 - ̗̀ ː͡₊ˀ⌦𝙰𝙱𝙲Donde viven las historias. Descúbrelo ahora