Café Mentolado || VOLKACIO

XV

[H]

Gustabo estaba durmiendo en la sala. Horacio estaba bostezando mientras era golpeado por la única luz del computador encendido, trataba de hacer un ensayo acerca de los daños que provoca la contaminación hacia el océano.
Aquel era su último trabajo antes de que las vacaciones del curso que estaba tomando en línea comenzaran, así que debía concentrarse para acabarlo pronto y entregarlo en tiempo y forma.

El de cresta bosteza y le hecha un vistazo al borrador final, un sonido proveniente de su teléfono lo distrae llamando su atención.
Hace un poco de presión en su tabique debido al dolor de cabeza que comenzaba a ser más insistente que las ganas de vivir de Horacio, da un trago a una taza café sobre algunos papeles regados sobre la superficie y toma su teléfono con un notable cansancio bajo sus ojos. Eran cerca de las 7 a.m. y el pobre Horacio no había dormido nada.

Había un mensaje de instagram, el de cresta lo abrió para echarle un vistazo.

"Hey, ¡en que hotel te hospedarás?" Decía el mensaje, de la cuenta de Victor_V.

Horacio sonrió con levedad, presionó el pequeño botón de llamada en la parte superior de la pantalla y acercó el teléfono hacia su oído.

Alguien contesta con un suspiro.

—¿Te molesta tanto tomar el teléfono? —Preguntó Horacio fingiendo estar ofendido.

El contrario ríe con levedad, como si también estuviese cansado de cojones.

—Claro que no...

—Entonces, ¿aceptaste ser arrastrado a conocer a una linda neoyorquina? —Habla Horacio bajando un poco la voz.

Se levanta con cuidado de no hacer ruido y comienza a recoger cada una de sus cosas, ordenándolas de manera pulcra.

—No necesito a ninguna neoyorquina, solo quiero... pasar la navidad lejos de casa. Lejos de mi familia...

—¿Lejos de tu familia? —Toma la taza y la deja en el grito de la cocina —, yo daría lo que fuera por pasarla con ellos...

—Ha... quizá, quizá es porque ellos no son como la mía —Menciona de una manera deprimente —, probablemente tu madre hornea galletas y tu padre se la pasa viendo la televisión contigo en la sala...

Horacio frunce el ceño.

—¿Me acosabas cuando era un niño, o algo así? —Cuestiona entre risas, aún susurrando.

El contrario suspira probablemente con una sonrisa en el rostro.

—Aparentemente cualquier otra familia en el mundo es mejor que la mía.

—¿Ellos tienen problemas o algo así?

—Ellos deciden no tener problemas —Responde de manera sarcástica.

Horacio camina en silencio hacia su habitación. Echándole vistazos a Gustabo para asegurarse de que siga durmiendo.

—Como sea, son extraños, pero creo que no quiero hablar de ello por ahora.

—Bueno, podemos quedarnos en el hotel Hapthom —Propone el de cresta cuando finalmente llega hasta su habitación, ahora normaliza un poco la voz — ...tengo un amigo que puede hacernos descuentos en las habitaciones

—¿Descuento? —Pregunta de manera simpática mientras ríe.

—Él es como el mejor amigo del dueño, ¿puedes creer que una vez me quede en la suite presidencial?

—Vaya eso... —Ríe y continúa —, eso suena divertido...

—Sí, tenían un jacuzzi y un armario lleno de comida. —Continúa emocionado y se arroja a la cama — El baño era del tamaño de mi departamento y tenía mi propio comedor...