Reencarné?, otra vez NO!

Robert Hayashi (parte uno)

Hace 8 años.

22 de Diciembre:

-Maldición...¡Maldición!...¡MALDICIÓN!

Ya no puedo, no importa cuanto lo intente, tan solo...ya no siento su presencia.

-Debí de detenerla...si tan solo, si tan solo hubiese sabido antes

[flashback]

-Al parecer su alteza la emperatriz esta embarazada

-¿Eh? podrías...repetirlo?

-Su alteza la emperatriz esta embarazada..

-(sonreír) te puedes retirar

-Si, su majestad

-Una cosa más, no le digas nada a Roberth

-. . . De acuerdo

(salir de la habitación)

-Lina, ¿escuchaste eso? voy a ser madre (sonreír)

-Felicidades pero, ¿Por qué no le dirá al emperador?

-El esta ocupado, hace poco subió al trono, no lo quiero preocupar más, así que ¿Me guardas este secreto? (sonreír)

-(suspirar) De acuerdo 

Pasaron dos meses después de que recibí la noticia y entonces Roberth se tuvo que ir a la guerra, mi corazón se destrozó pero, no podía hacer nada, tan solo... anhelar su regreso.

Mientras más pasaba el tiempo más me debilitaba, al principio no sabia porque pero, cuando un mago me vino a checar cuando llevaba 5 meses de embarazo me dijo que al parecer tenía magia, la cual  no era compatible con la de mi bebe y el mago me dijo algunas cosas que podrían pasar si no abandono la idea de tener un hijo:

1. Seguir adelante con la idea de tener un bebe aunque tal vez moriría antes, durante o después del parto  

2. Seguir con la idea de tener un bebe pero que en algún momento pueda morir yo y mi bebe 

3. Puede que muera mi bebe si mi magia termina siendo más fuerte que la del bebe

No me importaba morir, en verdad no me importaba, pero no podía imaginar un mundo en el  cual mi bebe muriera junto a mi o por mi culpa, así que tome mi decisión.

Llame a todos los más poderosos magos para así que le dieran fuerzas solo a mi bebe ya que no quería terminar siendo más fuerte que el bebe.

8 meses  y 29 días de embarazo: 20 de Diciembre

-...Lina

-Si su majestad

-Ayúdame a levantarme

-Pero esta muy débil

-...Solo quiero ver el cielo por la ventana...ya que, tal vez, sea ultima veces  

-...No diga eso su majestad

-Por favor

-...De acuerdo

Al ver al cielo me sentía tan libre, me sentía en paz, aunque solo, en este momento solo anhelaba dos cosas, quería-

-(GRITO) ¡Ay!

-¿Su majestad?

-...Creo que... Ya viene mi bebe

Todo paso tan rápido...después de mucho dolor escuche vagamente a Lina diciendo que no dejara a mi hija con ese tirano, yo pensé, en ese momento....El no es un tirano, solo es alguien incomprendido que ha pasado por muchas cosas, yo...en verdad...quiero verte...solo déjame...déjame verte por una ultima vez.

-Roberth...

Dure dos días peleando entre la vida y la muerte pero, ya no pude más.

-Por favor.....cuida a mi hija

-¡Emperatriz! 

[Fin del flashback]

Lo recuerdo muy bien, mi reino gano la guerra y por eso me dirigía por fin a ver a Alice, después de 7 largos meses...

Llegue a mi palacio el 22 de diciembre para mi sorpresa encontré a la sirvienta de Alice tumbada de rodillas llorándole a Alice quien yacía sin vida en aquella cama.

-¿Alice?

-¡Su majestad! 

¿Por qué? ¿Qué pasó? ¿Por que Alice esta muerta? esas preguntas resonaban una y otra vez en mi mente sin lograr tener una explicación, hasta que la sirvienta se levanto y me llevo a la habitación de al lado, ahí encontré a un bebe durmiendo, ese bebe tenia un peculiar cabello blanco.

-Explícate ahora 

-...Es su hija su majestad...la emperatriz murió dos días después de dar a luz a su hija, ella murió hace unas horas  

Cuando escuche esas palabras estaba furioso, pensaba el por que Alice dio su vida por esa cosa, un ser el cual nunca conoció, no encontré respuesta alguna, la furia me domino, solo quería eliminar a esa cosa quien le quito la vida a Alice, así que abalancé mi espada para matarla pero en eso la sirvienta se interpuso y grito.

-¡Aiko!, ese es el nombre que la emperatriz le dio a su hija

-Ja!

¿Aiko? le pusiste ese nombre apropósito ¿Verdad Alice? le pusiste un nombre que significa hija querida, muy bien, será la ultima vez que te seguiré el juego Alice.

-Ena, ese será su segundo nombre

(irse)

Regalo de dios...Ella no es un regalo de dios, solo es una maldición de muerte...además siento magia negra en esa niña.

-Tsk

Alice ¿Por qué te fuiste? ¿Qué hice mal? Te juro, que yo, en verdad te ame, así que perdón, no voy a poder amar a esa niña quien te quito la vida.

[Cuando Aiko tenia un año de vida:] 

-Siento una presencia parecida a la de Alice...

Quería saber quien producía esa presencia, así que la traje aquí para verla, por un minuto creí que podría ser Alice, desgraciadamente no lo era. Me tope con una niña con mi mismo color de pelo y...esa niña tenia el color de ojos de Alice...

-Papá?

Al escuchar esas palabras desato mi furia como hace un año.

-¿Cuántos años tienes?....¿Qué acaso no sabes hablar?

-Tengo un año...

 Me di cuenta que esa cosa pequeña que no había matado ya había crecido y eso solo me hacia odiarla más al pensar que ahora había vivido un año más, un año que Alice jamás podrá vivir.  

-Riku, llévala a su palacio

Me aleje, no quería volverla verla pero, no paso mucho hasta que empecé a escuchar de ella.