Reencarné?, otra vez NO!

Segunda Vida: Aiko (Segunda parte)

En mi debut, ni Rin ni Matias se presentaron...

-Vámonos

-¿Eh?

-Ya estuve mucho tiempo aquí ¿No creen?

-... Esta bien

¿Por qué no se habrán presentado? ¿Por qué no han hecho ningún movimiento? ¿Por qué?

-Aiko

-¿Hmn?

-Ven

En esta vida mis relaciones con todos habían mejorado a excepción de la de Riku y mi padre pero, pensé que con eso era suficiente, ya no quería que se acercaran más, tenía tanto miedo de lastimarlos otra vez, por eso, ese día, ese día yo....

-¿Por qué estamos caminando en el jardín?

-Solo estamos paseando, casi nunca salimos, debemos disfrutar de la luna ¿No crees?

-...

-Tu lo sabes ¿Verdad?

-¿Eh?

-Tu sabes que estoy enamorado de ti ¿No?

-¿Ah?

Al escuchar esas palabras me estremecí... Recordé aquellas palabras que Aaron y Raymond me dijeron... "Te amo". Esas simples palabras se convirtieron en una de las fuentes de mis arrepentimientos.

-... Se muy bien que siempre has guardado cierta distancia con nosotros, no se porque pero siempre creas una muralla que nos separa, incluso con Lina haces lo mismo

-... Lo siento

-Vamos, no te disculpes, así no eres tú

-...

Desde ese día empecé a preguntarme ¿Fue buena idea haberme acercado a ellos nuevamente? ¿Hubiese sido mejor que los dejara y que ellos formasen su propia nueva vida?

Si, creo que lo mejor será alejarnos... Tal vez así ellos logren vivir pero... ¿Qué tal si estoy cometiendo un error? 

Luego de eso empecé a cuestionar todas las decisiones que había tomado en estos catorce años...

° ° °

-¡Aiko!

-Suki

Aunque, en esta vida logre hacer una amiga inesperada, la hermana menor de Ray resulto ser muy buena compañía.

-Quería verte Aiko

-Si, yo también Suki

Pese a que ella era menor por siete años aún así me alegraba tener de su compañía.

Esta vida, podría decirse que marcha bien, no es la mejor pero creo que soy más feliz ahora.

En este tiempo me he dedicado a estudiar, a estudiar sobre Eriberia, sobre política, sobre economía, estudie tantos temas diferentes solo por una razón, quería convertirme en una buena emperatriz, la vez pasada vi como Eriberia se destrozó por mi culpa, eso debió de decepcionar mucho a mis padres, después de todo ellos querían que fuese una buena gobernante...

-...

Ahora ¿Cómo llegaré al trono? Esa pregunta me invadió cuanto cruzaba por los 19 años.

No se si mi padre me corone por voluntad propia, si ese no es el caso no quiero revelarme y tomar el trono a la fuerza, en ese caso solo me queda convencer a los nobles, si ellos me quieren en el trono podrán hacerlo.

El emperador siempre ha tenido mucho poder pero los nobles no se quedan atrás, si todos se unen pueden llegar a ser una molestia para el emperador, mientras más poder se junte menos oposición dará el emperador, en ese caso creo que ese es el mejor plan.

No me quedó de otra más que empezar a socializar algo en lo cual no era muy buena que digamos...

-Raymond, Aaron

-¿Si?

-¿Por qué no invitan a bailar a esas señoritas?

-¿Ah?

Cada vez que podía intentaba emparejarlos con otras personas, intentaba que su cariño y amor se dirigiera a otra persona.

Nunca tuve el valor para afrontar muchas cosas, siempre prefería ignorar o huir, nuevamente aquí, tengo miedo de cargar con la responsabilidad de sus vidas, tengo miedo de que mueran otra vez por mi culpa, pero no tengo el valor de alejarlos, una parte de mi quiere con locura y desesperación aquel cariño que ignore y desprecié en mi vida pasada pero, otra parte tan solo dice que es imposible, dice que yo no merezco esto...

Tengo miedo, miedo de mis propias decisiones, tengo tanto miedo que, algunas veces quisiera rendirme, huir, pero, no me atrevo a abandonarlos, abandonar a aquellos que me quieren, por eso, quisiera que ellos fueran los que me abandonaran a mi; hay muy pocas posibilidades que eso ocurra, lo sé muy bien ya que, aún que quiera o no, yo los conozco muy bien, después de todo llegaron a sacrificar sus vidas por mi, por eso se que ellos no se irán.

° ° °

A mis 21 años ya había logrado ganarme a muchos nobles, pero no eran suficientes, no para hacerle frente al emperador.

Sentí que avanzaba muy lento, demasiado lento, sabía que si seguía así mi tiempo límite se acabaría...

Hice un trato con un demonio en mis últimos momentos de vida, este trato acordaba lo siguiente:

"Tendrás dos oportunidades más, en total habrás vivido tres vidas al final, pero, a cambio quiero dos cosas, tus años de vida y tu alma; en esas otras dos oportunidades que te daré vivirás menos que un humano normal, es decir reduciré tus años de vida, en total, en cada vida que pases solo te dejaré vivir hasta los 25 años como lo harás en esta vida, además, una vez que tus oportunidades lleguen a su fin tomaré tu alma"

Ese fue el trato que hice, un trato no tan favorable que digamos pero lo terminé haciendo por desesperación.

(Suspirar)

Me da miedo tan solo pensar llegar a los 25 y morir.

-¿Princesa?

-¿Ah?

-¿Sucede algo?

-Ah, no te preocupes Lina

-... Princesa, usted... Se parece a su madre

-¿Eh?

-Ella siempre parecía estar sonriendo aparentando estando bien, cualquiera que la viera pensaría que es una persona un poco despistada que siempre muestra una sonrisa pero... Ella sonreía para soportar todo, eso lo note en sus últimos momentos de vida, ella me sonrió y entre lagrimas me dijo: 

"Todo estará bien, el futuro de mi hija será difícil... Demasiado, fallará y fallará pero al final ella... Logrará conseguir la vida que siempre.... Quiso, una vida amada... Soy tan... Feliz... Es bueno... Morir viendo... en tus últimos... Momentos... El futuro de... Mi hija... Siendo feliz... Al fin... Sigue adelante... Aiko" 

-...

Eso es mentira Lina, yo no sonrío para tratar de aguantar todo, yo solo lo hago por apariencias...

Esas palabras, las últimas de mi madre, quedaron gravadas en mi ya que ella hasta el final siempre pensó en mi bienestar.