ALLIANCE ▷ VENOM & SPIDER-GWEN

◾️VEINTICUATRO◾️

En un penal cerca de la ciudad de San Francisco, fue trasladado y encerrado en una celda de extrema seguridad debido a su gran tamaño, solamente afilaba su cuerno para esperar el día en que escapase de nuevo. Luego de su pelea con Venom y Ghost Spider, Rhino no deseaba más que venganza. En la salida del lugar un par de policías se encontraban conversando sin saber que algo se adentró hacia la puerta, y no estaba completamente cerrada, que después se deslizaba sobre el piso y se desvanecía por el aire. Lo raro es que no había corrientes de viento para que se pudiese mover el extraño polvo, o mejor dicho, arena pura.

Con sigilo se esparció por las celdas hasta llegar a la más grande, Rhino notó el sonido de la arena y tomó la forma de un hombre.

—¿Otra vez te atraparon? —exclamó el hombre con burla—

—Cierra la boca —gruñó el gigante—

Durante el proceso de fuga otros policías se acercaron hacia el hombre que llegó, y sin dudarlo emprendieron fuego, los proyectiles sólo lo atravesaban sin ocasionarle ningún daño, en segundos, su cuerpo se había regenerado y formó un enorme martillo de arena. Golpeó a dos policías que terminaron estrellados por el muro, su otra man la formó en un letal mazo que trituró el suelo, logrando con facilidad una estruendosa grieta.

Eso era para bajar la guardia a los policías cuando de pronto el sujeto con traje de rinoceronte frunció las cejas y demolió por completo la pared de su celda gracias a su imparable cuerno y su gran peso. Levantó a uno de ellos con su cuerno lanzándolo por los aires, seguido de eso de una forma salvaje embistió al resto de policías y corrió para finalmente huir.

Usando su objeto puntiagudo atravesó las rejas de la entrada de la prisión, Rhino ha escapado otra vez, ahora tenía compañía, en esta ocasión de su más fiel compañero de robots: Flint Marko.

—¿Como escapaste del lugar donde te encerraron? —cuestionó Aleksei—

—Con una tormenta arena es mejor alejarse del camino —respondió seguido de escupir bruscamente—

—¿Sabes que? No me importa —bufó el cornudo— me quedaré aquí por ahora—

—Pensé que ibas a volver con tu esposa —murmuró Flint—

—Eso haré —dijo Alex presionando los puños— pero antes cobraré venganza —gruñó— hay un sujeto que se hace pasar por un salvador en esta ciudad, el y junto a una mocosa vestida como el hombre araña hicieron que terminara en esa pocilga-

—Espera —lo interrumpió el hombre— ¿una mujer con traje de araña? ¿Ella está aquí? —cuestionó a lo que Rhino asintió— entonces iré contigo, por esa escuincla terminé también en prisión.

—No —exclamó Rhino— está será mi pelea y no quiero que nadie se entrometa —con molestia dijo poniéndose en frente de Marko—

—No me dirás lo que tenga que hacer —añadió Flint alzando más la voz— además, tú me ayudaste a conseguir algo de dinero para mi hija, yo también quiero algo de diversión, así que eres un idiota si crees que irás solo.

—Está bien —gruñó Alex—

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—No entiendo como es eso posible, ¿sufres algún tipo de cambio? —cuestionó la rubia sentada sobre las piernas de Ed—

—Es una larga historia —suspiró Brock— resulta que este sujeto es en realidad un alienígena cósmico —narraba a detalle— hace mucho tiempo la fundación Life envió a sus mejores cohetes y encontraron vida en un planeta extraño.

Mientras le contaba, Gwen lo miraba y lo escuchaba con mucha atención.

—Se identifican como simbiontes, o Klyntar, que es también el nombre de su hogar. —comentaba él— Me enviaron para entrevistar al hombre en frente de la fundación: Carlton Drake, pasaron muchas cosas y fue entonces cuando encontré a ese pequeñín —formó una media sonrisa—