Capítulo 13

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No dejo de mirar la perla mientras Bestia camina detrás de Elliot. No comprendo por qué ya no puedo escucharlo.

— ¿Estás ahí? — pregunto con un hilo de voz — Descuida, ya voy.

— ¿Eso te dice algo? — la voz de Sever me toma por sorpresa haciendo que casi se me caiga la perla — Perdón, no quise asustarte.

— Descuida, no te preocupes — vuelvo a guardar la perla en mi bolsillo. Pero apenas la guardo, vuelvo a sacarla y volteo — ¿Sabes que es esto? 

Noto que Sever se inclina hacia atrás al ver la perla frente a él. Su reacción llama mucho mi atención; pero luego parece relajarse un poco y respirar con tranquilidad.

— Es una perla — responde — la diosa la crea para que el guardian la porte.

— ¿De verdad? — él asiente en silencio — ¿Por qué es importante?

— Cuando la laguna necesita un nuevo guardián, ésta crea una nueva para que la otra sea destruida. — Parece nervioso — la vida del guardián está ligada a la perla.

— Entiendo.

¿Esta perla es tuya?

No está pasando mucho por aquí ¿qué tal si echo un vistazo a Sutan?

¿Para qué?

Elliot dijo que habían de esas criaturas en la ciudad ¿no estás preocupada por Ciro o Mina y su bebé?

Bueno, sí. Claro que lo estoy; pero intento no pensar mucho en ellos para centrarme en la misión.

Aún faltan unas horas para llegar a Zafiro. Sólo déjame echar un vistazo. Volveré cuando lleguen a Zafiro.

Bien, sólo déjame en paz.

En Sutan los habitantes se encuentran encerrados en sus casa, debido a la amenaza que apareció de la nada, y que no hacen más que solo rondar por las calles y atacar a quien se cruce en su camino.

— Ahora —dice Rhys al grupo de personas que habían quedado atrapados en un callejón —rápido, no se detengan.

— ¡Cuidado!

Rhys saca su espada y la clava en la criatura que se dirige para atacarlo.

— Por poco. Vámonos. — Continúa corriendo con todos para llegar al refugio que habían armado en el hospital. —¿Están bien?

—¡Rhys! —Mina se acerca a la gente.

Deberías estar con Ciro y Zoren.

—Solo vine a ver si necesitaban ayuda — Rhys niega con la cabeza.

— Todos aquí están bien ¿Cómo está Ciro?

—La herida de su hombro parece mejorar.

—Suerte que Elliot lo encontró a tiempo.

Las cosas están realmente mal aquí.

Ciro permanece junto a Zoren, quien parece estar mejor del ataque que recibió el día anterior.

—Esto está bastante mal —Dice Zoren comenzando a levantarse.

— ¿Qué planeas hacer? —Pregunta Ciro.

—No tengo un plan realmente. No sabemos nada de esto. Elliot ya se fue, no he sabido nada de Black y Iki, y el único que podría saber más que todos...

—Está muerto... — Finaliza Ciro —Sí...

—¿Crees que sea capaz de soportar todo esto? No creo que esté lista para una misión como esta.

Sangre de lobo: lazos de sangreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora