Parte treinta y seis

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Dolor, era lo único que Jimin podía sentir, la voz de Jin junto a él, diciéndole que todo estaría bien, que estaban en camino al hospital, al menos habían salido del encierro, estaba seguro que harían lo posible para que Jiyong no se le acercara, lo peor había pasado.

Por la intensidad del dolor, era un nivel dos lo que le había pasado, solo un poco de frustración había quedado en el pelinegro, si estaba poco consciente era por lo débil que había estado esos días, por lo aletargado que lo tenían, solo necesitaba descansar.

Dejó su cuerpo caer en lo profundo de su paz mental, no supo nada de sonidos, de espacio, de olores, nada había más en el pelinegro.

Después de unas cuantas horas Jimin despertó, el cuerpo lo sentía pesado, abrió poco los ojos, el cuarto estaba a oscuras, la puerta se abrió y vio entrar a Jin, el cual le sonrió, se acercó a él, prendió una pequeña lámpara que estaba sobre Jimin, la luz era tenue y cálida, por lo que no lastimaba la vista de ninguno de los dos.

- ¿Cómo te sientes?

-Cansado, dime que todo esto terminó. Dime que valió la pena.

-Eres un idiota, no te voy a perdonar lo que hiciste, el cómo te pudiste arriesgar así... pero sí, valió la pena, hasta que no declares, tu padre tiene una orden de restricción, las autoridades están buscando a Know, está prófugo.

- ¿Yoongi?

-No tiene una orden de restricción, pero por sugerencia de la misma juez que lleva el caso, le pidió que no se te acercara, no quiere que todo esto se complique, dice Nam que todo indica que ella piensa que Yoongi es culpable.

- ¿Cuándo podré declarar?

-En cuanto mejores, tal vez en un par de días, la misma juez no va a permitir que nadie más entre a verte, de hecho, hoy es mi última visita.

- ¿Me quedaré solo?

-No tienes de qué preocuparte, hay dos policías afuera de la habitación, solo el médico y enfermeras podrán entrar, Know no podrá acercarse a ti.

Jimin sintió cierto alivio, solo quería ir a casa, descansar en los brazos de Yoongi y de nadie más, le dolía su corazón por la orden de restricción de su padre, pero entendía que todo era por su bien.

Durmió lo que restaba de la noche, las enfermeras entraron haciendo chequeos y supervisando los medicamentos, Jimin pidió encender la tele, al poco rato la apagó, todos hablaban de él, del hijo perdido, los noticieros estaban fuera del hospital, aunque en su habitación no se escuchaba nada, alguno que otro medio informaba de un supuesto infarto, Jimin rodó los ojos ante las noticias amarillistas que se daban de su persona.

La puerta se abrió y Jimin intentó incorporarse, aunque su cuerpo no se lo permitió.

-Tranquilo joven Park, permanezca acostado.

La persona que entró le dio la indicación a un policía y ajustó la cama para que pudiera estar un poco más sentado, el policía lo ayudó en acomodar la almohada, el cuerpo del pelinegro estaba bastante dolorido.

-Permítame presentarme soy la juez Yoo In-Na estoy a cargo de su caso, necesito que me cuente qué es lo que ha pasado en estos últimos meses.

Jimin comenzó a contar lo sucedido, pero fue un poco más allá del pasado de esos meses, la forma en cómo su padre había contratado a Know para "cuidarlo" y el abuso que él había tenido, le informó también de que Jiyong era su medio hermano, de todo lo que Know le había contado.

La juez se mantenía atenta, escribiendo lo que le parecía más importante o relevante, estuvo con él más de una hora, Jimin se sentía cansado.

Sálvame Save meDonde viven las historias. Descúbrelo ahora