Capítulo 22 (Final)

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Más Lechuzas Mensajeras, ¡Fin de Curso!

Narra Harry

¡Chicos! -Hermione me tiraba de la manga, mirando el reloj-. Tenemos diez minutos para regresar a la enfermería sin ser vistos. Antes de que Dumbledore cierre la puerta con llave.

-De acuerdo -dije yo, apartando los ojos del cielo-, ¡vamos!

Andy le dio una sutil palmada en el lomo a Cynder susurrandole algo a él y el thestral salió batiendo las alas con rapidez y se perdió en las ramas del bosque.

Entramos por la puerta que tenían detrás y bajamos una estrecha escalera de caracol.

Al llegar abajo oímos voces.

Nos arrimamos a la pared y escuchamos.

Parecían Fudge y Snape.

Caminaban aprisa por el corredor que comenzaba al pie de la escalera.

-... Sólo espero que Dumbledore no ponga impedimentos -decía Snape-. ¿Le darán el Beso inmediatamente?

-En cuanto llegue Macnair con los dementores. Todo este asunto de Black ha resultado muy desagradable. No tiene ni idea de las ganas que tengo de decir a El Profeta que por fin lo hemos atrapado. Supongo que querrán entrevistarle, Snape... Y en cuanto los jóvenes Harry y Lily vuelvan a estar en sus cabales, también querrán contarle al periódico cómo usted los salvó.

Apreté los dientes vi que Lily también estaba enojada.

Entre vi la sonrisa hipócrita de Snape cuando él y Fudge pasaron ante el lugar en que estábamos escondidos.

Sus pasos se perdieron.

Los seis aguardamos unos instantes para asegurarnos de que estaban lejos y echamos a correr en dirección opuesta.

Bajamos una escalera, luego otra, continuaron por otro corredor y oímos una carcajada delante de ellos.

-¡Peeves! -susurró Lily, tomando a Samantha por la muñeca-. ¡Entremos
aquí!- nos dijo

Corrimos a toda velocidad y entraron en un aula vacía que encontraron a la
izquierda.

Peeves iba por el pasillo dando saltos de contento, riéndose a mandíbula batiente.

-¡Es horrible! -susurró Mione, con el oído pegado a la puerta-. Estoy segura de que se ha puesto así de alegre porque los dementores van a ejecutar a Sirius... -Miró el reloj-. Tres minutos.

-Esperen, conozco este lugar, y si mal no recuerdo- dijo Lily yendo a unas de las estanterías y saco su varita apuntando a una pared entre las estanterías- si, este lugar conecta con uno de los pazadizos del pasillo de la enfermería, Revelo Ocultus

La pared de dividió a la mitad dejando ver un pasaje oculto

-Rápido- y vi que entro y escuche susurrar un Lumos y empezó a correr

Entonces entramos todos y a la vez susurramos Lumos y salimos del aula y volvimos a correr y Sam de última escuche susurrar Ocultus.

-Mione, ¿qué ocurrirá si no regresamos antes de que Dumbledore cierre la puerta? -jadeó Alex.

-No quiero ni pensarlo -dijo Mione, volviendo a mirar el reloj-. ¡Un minuto!

-Ya llegamos al pasillo de la enfermería- dijo Lily que no dijo un hechizo esta vez, simplemente presionó un ladrillo, y este se abrió, de la misma manera que por donde entramos y al salir el ultimo de nosotros Lily lo cerró diciendo Ocultus

Mellizos Potter, La Verdad Del Prisionero De AzkabanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora