César
Cuando llegamos a la subasta todos se giran mirándonos, siento como Ariel se tensa caminamos por el salón viendo las joyas subastadas hasta que paramos en una toma un hermoso billar con una corona de dije y dentro de esta hay un diamante, Ariel la observa con fascinación.
Mi vida junto a Ariel es maravillosa, tener a alguien que te esperen casa cuando llegas es increíble, sentir el calor de su cuerpo en el mío mientras dormimos, ver sus cosas en mi cuarto y escuchar su respiración mientras duerme es como música para mis oídos. La amo y no lo puedo negar, me enamoré desde que tropezó conmigo en la calle y aún más desde que se entregó a mí por primera vez. Y fue su primer hombre y el último porque después de haber estado con ella se convirtió en mi paraíso personal y no permitiré que nadie la parte nunca de mi lado.
Mientras caminamos por el salón escucho una voz que llama a mi novia.
-pero mira nada más la belleza que tenemos aquí- dice Damon delante de nosotros, trata de besar la mejilla de Ariel pero ella se quita. Sonrío orgulloso.
-buenas noches señore Snow-saluda ella amablemente mientras se pone frente a mí yo lo abrazo por la cintura mientras me apoyo una mesa que hay tras de mí.
-Déjate de formalismos, nos conocimos hace mucho tiempo-dice y siento como mi sangre hierve-no sabía que eras una de las amiguitas de César Williams .-lo dice con todo el descaro mirándome.
-Ella no lo es, ella es mi novia-digo hecho una furia.
-no por mucho, porque hasta donde yo sé tu única relación es con Angela- dice y Ariel se tensa.
-permiso necesito salir un momento-dice Ariel separándose de mí y atravesando el salón.
-qué demonios te pasa-le digo furioso levantándome a Damon.
-te lo dije, la quiero a ella y no permitiré que te la quedes-dice.
-no es un trofeo para tu información.-le digo con enojo.
-no, no lo es, sé que no lo es yo la amo pero ella nunca me ha dado la oportunidad que tú tienes. Y no descansaré hasta hacerle a mi esposa.-me dice y luego se va.
Voy en busca de mi novia pero como la mala suerte me persigue Angela se me atraviese en el camino.
-con que por esa poca cosa me cambiaste-dice conozco yo odio.
-en primer lugar respeta a mi novia y segundo ella si se respeta y no vas mendigando amor al primero que se le atraviesa.-le digo con odio.
Paso por su lado dejándola con la palabra en la boca y sigo buscando a mi adorada Ariel, la encuentro en la terraza pero no está sola está con ese malnacido, me quedo a escucharlos hablar.
-no me interesa de limón, yo estoy con mate y él me hace feliz-dice ella.
-pero por cuánto tiempo?-le contesta él.
-El tiempo que dure, yo sé la fama que tiene y también sé que lo nuestro no será para toda la vida como yo quisiera, pero yo lo quiero, desde el primer día que lo vi y aprovechar el tiempo que él quiera darme-Al escuchar sus palabras me duele pero sé que yo mismo me gané esa reputación.
-O acaso estás con él por su dinero? Porque yo te puedo dar mucho más de lo que él te...-Ariel le da una cachetada.
-A mi me respetas, lo menos que me interesa de él es su dinero, lo que igual aunque fuera pobre-le dice enojada.
-serás mía eso te lo juro-dice mientras veo como ella camina de vuelta al salón, voy hasta donde se encuentra Damon y sin darle tiempo de hablar le propinó un puñetazo.
Vuelvo al salón buscando a Ariel y es cuando nos llaman porque está por iniciar la subasta. La encuentra sentada en nuestros asientos.
-Ariel... Ella me levanta la mano.
-no es ni el momento ni el lugar adecuado-tiene razón-solo quiero que cuando esto termine nos vayamos pronto.
La subasta transcurre normalmente, joyas por joyas se va vendiendo hasta que llega el turno del collar.
-10 mil dólares-grita una señora detrás de nosotros
-15 mil- grita alguien delante de nosotros
-18 mil- grita Angela.
-18 mil a la una, a las dos...
-50 mil- grito.
-80 mil- grita Angela otra vez, pero no dejaré que me lo gane.
-medio millón- digo.
-vendido al señor Williams- dice el presentador.
Luego de que termine la subasta le digo a Ariel que me espere y voy a por el collar, cuando me lo están entregando llega Angela.
-vaya que te tiene atrapado-dice viendo el collar-pero recuerda que va atrás tu dinero.
-si es lo que tú dices para no sentirte menos, no te sacaré de tu error- le digo,
Cuando volvemos a casa y yo soy directamente a la habitación, no me dirigió la palabra mientras veníamos a casa. Voy hasta el minibar y me sirvo tres dedos de whisky. Luego de tomar valor subo a la habitación. Pero al entrar no la veo, voy al baño y me la encuentro en la bañera rodeada de espuma y con el cabello recogido.
-podemos hablar?-pregunto. Asiente con la cabeza-qué te pasa, por qué no me hablas, porque estás tan rara?
-tengo miedo-me dices sin mirarme.
-miedo de qué hora qué?-le contesto intrigado.
-de enamorarme de ti-me duele que lo diga pero sé que debe tener sus razones-lo que ha pasado esta noche despertó mis miedos, sé que hay mujeres más hermosas que están dispuestas para ti y tengo miedo de no ser suficiente para ti- dice.
-sabes por qué nunca he tenido una relación?- le pregunto.
-no- dice ella girándose para verme.
-porque yo siempre he soñado con una relación como la que tienen mis padres, y esas mujeres de las que hablas nunca me darían esa clase de amor, yo quiero una mujer que me ame por encima de todo, que esté conmigo en las buenas pero que me apoye y trabaje conmigo hombro a hombro en las malas. Y sé que esa mujer eres tú.-le digo mirándolo a los ojos.
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Lo eres todo para mi
RomanceAriel Smith es una chica tímida y reservada, estudia en una universidad de Detroit a escondidas de su padre. Nunca pensó que podría escapar de él pero gracias a un ángle consigue lo que siempre soñó y empezar una vida lejos de su padre y de la cuida...