Las horas transcurrieron de manera pacífica en la corporación cápsula hasta que la noche llegó.
Los guerreros z se fueron de allí algo temprano dado que Goku ya no podía seguir escapándose tanto tiempo de su esposa para ir a casa de la científica. Yamcha, por su parte, se había ido algo más temprano para no tener que lidiar con la furia de la peliazul por haberla besado sin su permiso.
¿Dónde está Vegeta? No lo he visto desde que salió de entrenar -preguntó Mikari con tono malicioso. Estaba en el comedor junto con los demás, podía notar que Bulma se encontraba un tanto nerviosa.
Yo tampoco lo he visto ¿Por qué no vino para cenar?-preguntó Saya a su vez. Sabía muy bien que lo que había sucedido era a causa de Mikari, pero pretendía fingir estupidez mientras estuvieran allí.
Vegeta no quiso hablar conmigo, así que no pude decirle que viniera a comer-dijo Trunks excusándose. Había pensado en tirar abajo la puerta de su cuarto para llamar su atención, pero si hacía eso quizás el enojo del príncipe saiyajin podría ser desmedido.
Ya bajará, a veces hace eso de encerrarse y no hablar con nadie -dijo Bulma, no estaba muy segura de qué le pasaba al saiyajin, pero no era algo extraño que quisiera estar solo. No había notado que lo que había sucedido podría haber enfurecido a Vegeta, después de todo no había nada muy consolidado entre ellos aún.
Parecía algo enojado-dijo Eiji a su vez. Estaba cenando con ellos allí. La mayoría de ellos ya había terminado, solo Trunks continuaba comiendo, no parecía querer participar mucho de la conversación.
Yo también lo estoy, ya tengo sueño. Mikari me agotó-dijo Saya con tono cansado. Entrenar ese día la había dejado exhausta, no solía entrenar tan a menudo en Koronī 34.
Deberíamos ir a dormir-dijo Mikari con tranquilidad, se sentía menos molesta desde lo que Yamcha había hecho. Estaba segura de que eso ayudaría a Vegeta a tomar una decisión -Mañana ya tenemos que irnos, lo mejor será que descansemos bien. Es un viaje muy largo-dijo con tono cansado. Tan solo recordar la distancia tan larga que había entre la tierra y Koronī 34 le causaba pereza.
Eso suena muy aburrido-dijo Trunks, acababa de dar su último bocado vaciando por completo su plato-Ojalá hubiéramos podido estar más tiempo aquí. Este lugar es muy divertido-dijo el moreno pensativo, realmente la idea de volver a su planeta no le agradaba.
Espero que puedas despedirte de Vegeta antes de que partamos-dijo Mikari poniéndose de pie. Hizo caso omiso a las quejas del moreno, sabía que el mismo se iría con ellos de todas formas.
Buenas noches-dijo Saya mirando a Bulma, la peliazul le sonrió al notar su gesto de amabilidad con ella. Sabía que la pequeña saiyajin era algo tosca, pero se comportaba bastante amigable con ella.
Mañana me levantaré temprano para despedirlos-dijo Bulma a modo de aviso antes de que ambas se fueran de allí. Eiji se fue un rato después que ellas, también quería descansar lo más que pudiera antes de regresar a su planeta.
Bulma, ve a hablar con Vegeta -dijo Trunks con seriedad. La peliazul lo miró curiosa dado el semblante del saiyajin, no era normal ver en él esa expresión -Está enojado, podría hacer algo estúpido sino hablas con él- aconsejó.
¿Enojado?-preguntó la mujer sorprendida. Pensó algunos segundos qué podría ser. El beso con Yamcha cruzó su mente ¿Era posible que se hubiera molestado por eso?-¿Está molesto porque Yamcha me besó? -preguntó intrigada.
¿Tú qué crees? Ese sujeto te besó en frente de sus narices. No creo que necesite decirte que le gustas a Vegeta. Y yo creí que a ti te gustaba él hasta que te vi besando a ese tipo-dijo el moreno algo alterado. Suponía que al menos si sabía porqué lo había hecho podría intentar hacer entrar en razón a Vegeta.
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Cambios del destino
FanfictionBulma y Vegeta se encuentran en los inicios de su relación en aquellos emblemáticos 3 años. Las acciones de Yamcha ponen en peligro la continuidad temporal causando una serie de problemas para nuestros protagonistas y además pone en peligro a la Tie...