Soy yo, campeón

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Traté de levantarme, pero mi cuerpo aun estaba bajo el efecto del sedante, como pude me sujeté fuerte a la silla y empujé con fuerzas, haciéndome caer al suelo y tirando una bandeja de instrumentos al suelo.

- Nikola ¿Qué haces? - Preguntó sorprendido Pierce.

Yo solo me arrastraba en el suelo hacia Karen, quien me veía tratando de descifrar lo que trataba de hacer.

Pierce me tomo por un brazo, yo me zafé de el y seguía tratando de llegar a Karen quien tenía la inyección en una de sus manos.

Karen comprendió lo que yo trataba de hacer y solo me veía confundida, quizás se preguntaba como pude darme cuenta de lo que ella hacia.

Señalé a Karen, todos voltearon a verla y una voz muy familiar grito - Cuidado, ella tiene algo en su mano -

Pierce salto por encima de Zac para detenerla, los dos cayeron al suelo alejados de Zac.

- Siempre arruinas mis planes - me dijo Karen desde donde estaba.

- Doctor Pierce ¿Esta usted bien? - preguntó de nuevo esa voz tan familiar.

- No, estoy un poco mareado, ella me inyecto algo -

- Era la ultima que quedaba, no puede ser - se lamentó Karen.

- Pasa por favor, y termina esta operación tu, se que puedes hacerlo - dijo Pierce.

Escuché como la puerta se abría y alguien me tomaba por el brazo ayudándome a levantarme y llevándome a mi puesto.

Quizás estaba aun con el efecto de la anestesia, quizás mis ojos me engañaban y me confundían, pero ese rostro era de...

- Si, soy yo, campeón, lamento haberte dejado solo aquel día, pero estoy de nuevo a tu lado y no te dejare, ahora salvemos a tus amigos - dijo Jerry.

A Pierce lo sacaron de la sala y volví a dormirme, esta vez no tuve la dicha de estar con Aneth.


Desperté y Zac hablaba con Bianca...

- ¿Zac? ¿Estas bien? - pregunté.

- Si amigo mío, lo lograron, me han salvado y pronto estaremos lejos de este infierno -

Bianca se acerco a mi y me dijo - Gracias a ti y al doctor Frankenstein estamos vivos y sanos -

- ¿Dónde esta Pierce? - Pregunté

- Lamentablemente entro en un coma, estamos haciendo lo necesario para poder salvarle - dijo Jerry entrando en la habitación.

- ¿Cómo puedo ayudarlo? -

- No creo que puedas hacer algo por el, al menos no por este momento -

- ¿Dónde has estado todo este tiempo? - le pregunté a Jerry

- En el mismo lugar, Karen nos hizo creer a todos que habías sido secuestrado en el hospital aquel día, meses después renuncio al hospital tras recibir la noticia de que te habían asesinado, nadie la culpaba por esa decisión, pero algo no me cuadraba, Clayton había renunciado dos días antes que ella, justo después de que asesinaran a Aneth y sus padres, y jamás se le volvió a ver la cara. Comencé a investigar por mi mismo y descubrí que ni Pierce ni tu madre habían dejado colorado, sino que vivían juntos en una casa abandonada... Fui creciendo en el área de la medicina y me hice famoso, luego recibí una llamada de Gary, el padre de Aneth y me comento que Aneth le había contado que su hija escuchó una conversación de Clayton donde decían que estabas vivo y los experimentos contigo estaban dando resultados muy lentos. El milagrosamente sobrevivió al accidente y creo una identidad nueva junto con policías federales para poder obtener información. Luego de meses Gary se  ganó la confianza de Dittrich y lo enviaron acá a manejar este experimento. El había armado un plan para desarticular esta red, pero nos dimos cuenta de que tu seguías con vida y todo el plan cambio -

- Oseá que ustedes están acá para liberarnos de todo esto -

- Correcto, ya los federales están acá y nos trasladaran a un espacio militar para luego integrarlos a la sociedad de nuevo -

Por fin podía ver un final cercano para toda esta distorsión de vida que tenía, estaba apunto de comenzar una vida nueva.

La DistorsiónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora