Titans - Don't Look Back (Dick Grayson y Tu)

Capítulo 10:

Cuando llegamos al convento, no les voy a decir que la explosión estuvo mal por parte de Rachel porque estaría mintiendo, intentaron encerrarla por miedo, tuve que contenerme para no explotarles lo que les quedaba de convento.

-¿Por qué la dejaron acá? –nos preguntó la mujer bajo el seudónimo de Kory.

-¿En un convento? Parecía peligrosísimo –conteste con sarcasmo mientras que Dick masajeaba mi espalda para que me controlara.

-Tu robaste mi auto y huiste –le señalo Dick.

-Creí que podrían con ella unos minutos, pero debí de saberlo si la dejaron en DC –contesto ella también perdiendo la paciencia.

-No quise dejarla en, quise...

-No pudieron con ella y se la dejaron a sus amigos –me interrumpió ella cuando intentaba hablar-, es patético.

-¿Podemos discutirlo después de encontrarla? –preguntó Dick a modo de ponerle fin a esta discusión.

-Se vuelve más poderosa –nos comentó Kory siguiéndonos.

-Sigue siendo un niña sola y asustada, escapando –le dije agarrando la mano de Dick para seguirlo.

Intentamos seguir su rastro por los alrededores, pero no encontramos mucho y dentro de poco iba a anochecer.

-Debe estar muy asustada –comente mientras frenábamos frente a la comisaria.

-No vas a ir con nosotros –le aviso Dick a Kory que se empezó a mover en el asiento de atrás.

-¿Qué? ¿Por qué? –preguntó mirándome.

-Asesinaste a policías –le contesto con obviedad Dick.

-Entra a la comisaria, de mientras nosotros vamos al restaurante más cercano y pedimos algo para llevar –hable y todos asintieron.

Estábamos esperando a Dick mientras comía papa fritas dentro del auto, cuando se subió nos informó sobre la dirección de la casa de un borracho que declaro haber visto a un tigre y una chica de pelo violeta en el bosque, así que hacia ahí nos dirigíamos mientras empezaba a anochecer.

Golpeamos la puerta con perros ladrando como locos, cuando la puerta se abrió nos atendió un hombre con mala cara.

-¿Qué quieren? –hablo el hombre y se podía sentir el olor a alcohol que tenía.

-Hablemos de la chica que vieron en el bosque –le contesto Dick mientras mostraba su placa.

-¿Qué? –preguntó de mala manera.

-¿Dijo algo? ¿Vieron adonde se fue? –interrogo Dick.

-Ya hablé con los policías, así que váyanse –nos intentó cerrar la puerta, pero yo no se lo permití-, ey no pueden hacer eso –empezó a protestar el hombre.

-Necesito una respuesta –hable perdiendo la cordura.

-Mejor apártate –me amenazo el hombre agarrando su escopeta, Dick lo enfrento desarmándolo y dejándolo en el suelo de la casa mientras ingresábamos.

-¿Viste adonde se fue la chica? –le preguntó Dick levantándolo mientras lo agarraba de la ropa-. Respóndeme.

-Psicópatas –grito el hombre forcejeando con Dick.

-¿La lastimaron? –pregunte al darme cuenta de lo violento que era el cazador mientras Dick lo golpeaba en la cara.

-Dick –llamo su nombre Kory, pero ambos estábamos concentrados en lo que dijera el cazador borracho-, Dick basta –detuvo Kory su brazo y nos señaló con su mirada una puerta, donde un niño nos miraba asustado.