Titans - Don't Look Back (Dick Grayson y Tu)

Capítulo 3: I Don't Like It

Dick rápidamente se dirigió a su escritorio a realizar una llamada para verificar la información que había dado la chica Rachel. Claramente después de todo estoy yo iba a tener que irme, así que tome mi vianda pronta para irme cuando terminara su llamada.

–Clarisa, lo siento pero...

Paro su disculpa en el momento que su mirada se pauso sobre la tele, se reproducía la grabación de Robin luchando y debajo un gran cartel que decía "vete a casa", también llamándolo de sociópata violento, a él le afecto y a mí me hizo enojar, claramente esa información no era correcta.

–¿Me acompañas al auto? –pregunte mirándolo, este asintió y se paró, me guió hacia afuera del edificio con su mano en mi espalda.

–No sé a qué hora volveré al apartamento, perdón –admitió mirándome, el auto estaba a una escasa distancia.

–Tranquilo, debes hacer tu trabajo, si la chica necesita ayuda llámame, puedes contar conmigo –con lo último claramente me refería a que aceptaba volver a colocarme el traje.

–¿Puedo preguntarte algo? –apareció la rubia de apellido Rohrback.

–Estoy en el medio de algo –le contesto Dick mirándola y señalándome con la cabeza, dándole a entender que no quería que nos interrumpiera.

–¿Entonces? ¿Tú y tu compañero se pelearon? –indago la rubia mirándonos, ella también ya se estaba yendo.

–¿Perdón? –Dick ya había agotado su cupo de molestias el día de hoy y pronto explotaría.

–Tu compañero en la policía de Gotham –hablo la mujer, porque querría inquirir tanto en la vida de Dick–. No es que lea la mente, pero parece obvio.

–Teníamos ideas diferentes de cómo hacer el trabajo –se sinceró Dick mientras la mujer comenzaba a acercarse a donde estábamos.

–¿Cómo? ¿Aceptaba sobornos? –trato de saber más–. Oí que la mayoría en Gotham lo hace.

–No, él no –admitió mientras tomaba mi mano, claramente se estaba refiriendo a mi padre–. Era un héroe para mucha gente, también para mí. Un tipo que no se detenía ante nada y resolvía todo con sus puños. Lo admiraba al principio –todos lo hacíamos, era lo que todos deseábamos llegar a ser–, lo que hacía o lo que intentaba hacer. Pero finalmente, tuve que alejarme.

–¿Por qué? –pregunto inocentemente la rubia, yo podría darle una larga lista de motivos para alejarse de Bruce y no la terminaría de redactar ni en un mes.

–Porque me estaba pareciendo mucho a él –sus ojos buscaron los míos, esperando alguna clase de emoción, pero permanecí inmutable.

–Entones. ¿No lo eres, verdad? –volvió a preguntar un poco esperanzada.

–¿Ser qué? –pregunto Dick sorprendido.

–Un cretino –contesto ella provocando que me riera, Dick estaba lejos de ser un cretino actualmente, en el pasado tuvo sus momentos.

–No lo cuentes, debo mantener mi reputación –bromeo mirándome y sonriendo al verme.

–Tu secreto está a salvo conmigo –se despidió la mujer caminando lejos de nosotros.

–¿En qué estábamos? –pregunte bromeando cuando la mujer desapareció entre los autos.

–Cualquier cosa te llamare –dijo exactamente lo que deseaba escuchar.

–Me parece perfecto –acorde dándole un rápido beso, entre en el auto y en el asiento de copiloto coloque la porción de comida.

Al llegar al apartamento me serví una buena copa de vino y coloque música, algo me decía que esta sería la última vez que comiera tranquila en mucho tiempo.