Capítulo VI

674 93 21
                                    

«— No te metas entre un dragón y su ira.»

Noche de Reyes, acto I, escena V.

Sasuke

— Hokage-sama —dijo la Hyuga.

Se colocó completamente roja cuando hizo una profunda reverencia. En la puerta del salón se encontraba Tsunade acompañada de Kakashi.

Estaba cruzada de brazos el recinto y a todos los que nos encontrábamos dentro con el ceño fruncido, por su parte Kakashi se reclinó con su aura despreocupada sobre la pared. Debería entrar luego en el papel de próximo Hokage, realmente no lo imagino en el puesto.

— Levántate Hinata —dijo asintiendo hacia ella.

Kakashi intercalaba sus miradas entre ella y yo, sus ojos se contrajeron ligeramente al mirarme, como si bajo su máscara estuviera sonriendo, debe haber sabido esto todo el tiempo.

La Hyuga por su parte se ve más furiosa que esta mañana, de no estar implicado con ella en este asunto lo encontraría divertido, de sus perlados ojos parecen aflorar llamas.

— Mis disculpas por mi exabrupto y conducta Hokage-sama, pero si supiera lo que están planeando, cuando... Cuando se entere sobre el perverso plan de compromiso...

Rodé los ojos ante su inocencia. ¡Por Kami!, no puede ser tan despistada, es que no ve las intenciones de Tsunade.

— Lo conozco bien. Fue idea mía.

— ¿Suya? —murmuro perdiendo potencia en su voz y cerrando los ojos.

¡Oh Hyuga! veo que se te rompió la esperanza. Sabía que Tsunade planeaba algo, solo no pensé que algo como esto.

La sonrisa que le dirigió Tsunade no carecía de bondad.

— Así es —dijo— Y una de mis mejores ideas —nos miró a todos los presentes, con las manos entrelazadas frente a sí— Como les dije a sus padres cuando les plantee el plan. Ustedes Hyuga y Uchiha por igual, han sido una plaga en esta aldea, mucha gente inocente ha perdido la vida por su odio absurdo, tratando de detener sus riñas callejeras. Su división sigue acarreando caos a la aldea y eso no lo puedo permitir. Su promesa de paz dada a partir de estatuas bonitas alzadas a modo de paz, no son garantía de ella.

Tsunade nos miró con dureza, mi mirada se conectó al instante con la de Hinata. Su mirada me dice que ambos pensamos lo mismo, la Hokage está al tanto de la profanación de la estatua de Shion, pero los líderes de los clanes parecen ajenos a ello. La Hyuga y yo no tocamos el tema. No estoy nada seguro de que mi padre o Hiashi Hyuga pudieran dominar su temperamento. Será mejor que se enteren por su cuenta y por separado.

Observe a Kakashi fijamente, fue mi sensei, parte del equipo siete junto a Naruto y Sakura. Está encerrona me la pude esperar de Tsunade, Kami sabe que no nos toleramos, pero de él, no.

Por su parte me miro hasta que suspiro y decidió intervenir.

— Sasuke, Hinata —dijo irguiéndose— Los conozco a los dos desde pequeños, a ti más —posó su mirada en mí— Pasamos muchos obstáculos juntos en todo este tiempo. Sé que ambos aman su aldea y más que todo son capaces de discernir lo que es correcto para ella. No es una decisión que Tsunade-sama y yo tomamos a la ligera. Ustedes miembros honorables y leales de sus clanes, confiamos en ustedes —decía intercalando sus miradas en ambos, pero deteniéndose más en mí— Por eso los hemos elegido para casarse ¿Lo entienden?

Bufe, vaya mierda de argumento, apela al sentimentalismo. Miré a la Hyuga, ella se quedó con la mirada congelada en Kakashi, consternada.

— Ambas familias deben dejar de destruirse entre ellas —continuo el peliblanco— Como le dijo Tsunade-sama a sus padres anteriormente, ya no es posible que existan por separado, por eso deben convertirse en una sola familia —volvió su mirada hacia mí— Hinata es la heredera y primogénita Hyuga y tú ahora eres el nuevo heredero Uchiha.

Una TreguaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora