cold coffee » lrh

tres.

Esa noche no había logrado dormir bien del todo.

Luke no paraba de mandarme mensajes estúpidos.

Supongo que él era igual de estúpido como para desperdiciar todo su crédito mandando mensajes estúpidos.

A la mañana siguiente entré al baño para ducharme rápidamente; por alguna razón esa mañana no quería llegar tarde al café. Probablemente el nombre de esa razón era Luke.

Terminé de bañarme y regresé a mi habitación con una toalla cubriendo mi cuerpo. Tomé la ropa interior para colocarme pero preferí revisar primero mi teléfono.

"Te estoy esperando en la sala de tu casa, tu madre es muy amable, tu padre no." Casi suelto un grito al leer el mensaje de Luke, ¿él estaba en mi casa? ¿a esa hora? y peor aún, ¿había hablado con mi padre? Oh, diablos.

Me vestí utilizando una camiseta color crema, unos pantalones y mis viejos tenis. Tome mi celular y al salir pude ver a Luke de espaldas sentado en un sofá, vistiendo totalmente de negro. Entonces los nervios llegaron a mí.

"¿Buenos días?"

"Buenos días." Luke respondió poniéndose de pie para posteriormente estrechar su mano con la mía. "¿Nos vamos?"

"Oh, claro." Honestamente me parecía demasiado extraño y absurdo que Luke hubiera ido hasta mi casa. Habíamos quedado en encontrarnos en el café.

"Ma, ya me voy al café." Asomé mi cabeza por la puerta de la cocina y note que mi madre estaba cocinando huevos.

"¿Con ese tipo?"

"Hm, si."

"Solo nada de fajes por favor."

"¡Mama!"

"Cuídese mi retoño."

"Ew, adiós." Salí de la cocina y Luke estaba de nuevo sentado en el sofá, pero esta vez no estaba solo, sino que Walter, mi pequeño —y también molesto— hermano, estaba sentado sobre Luke, jugando con su piercing.

"¿Que haces?" Pregunté.

"Mira boba, es un piercing." Walter me señaló y comenzó a moverlo.

"Suficiente, lárgate a tu habitación, ya nos vamos."

"Luke es mi nuevo amigo, ya no soy tan antisocial como tú." Walter salió de las piernas de Luke y comenzó a reír.

"Deberían darte un Grammy." Le sonreí sarcásticamente y tome a Luke del brazo. "Vámonos."

Salimos de ahí y Luke comenzó a reír sin explicación alguna.

"¿Que es tan gracioso?" El comenzó a caminar y yo hice lo mismo.

"Tu relación con tu hermanito es tan grandiosa."

"Si, la única que me apoya es Gaby."

"¿Gaby?"

"Mi otra hermana."

"¿Qué edad tiene ella? ¿Cuantos hermanos tienes?"

"Tiene 6, uno más que Walter, y tengo tres hermanos, Walter, Gaby y Shane, pero el ya no está aquí, logró conseguir un departamento con su mejor amigo y ahora ellos dos viven solos, tienen 22."

"¿Y porque se fue?"

"Quería ser independiente."

"Que genial."

Ambos seguimos caminando y ninguno decía nada. Pensé entre sacar mi celular y pretender hacer algo interesante en este, o intentar charlar con Luke. Y sin pensarlo dos veces, opte por la segunda opción.