veinticinco.

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Tomé asiento en mi mesa y Luke ya se encontraba ahí. Él, al verme sonrió y se puso de pie dándome un corto abrazo y un beso en mi mejilla. Se sentó a mi lado.

"Buenos días, ¿Dormiste bien?" Preguntó sonriente.

"Eh, sí." Me encogí de hombros.

"Tus ojos no lo demuestran."

"Bueno, Abby durmió conmigo anoche, y nos quedamos platicando hasta tarde." Luke asintió sonriendo y no respondió nada más. Tomó una de mis manos y comenzó a jugar con ella hasta que habló.

"Shay."

"¿Si?"

"Eres muy bonita." Sonreí sin saber si simplemente agradecer o decir algo más. "¿Que harías si intento besarte?" Fruncí mi entrecejo al escuchar su pregunta.

"Ya lo has hecho."

"No en la mejilla, en los labios." Luke acercó su mano a mi cabello y comenzó a acariciarlo.

"Bueno, sabes que practico taekwondo, ¿no?"

"Ya entendí." Ambos reímos y él paso uno de sus brazos por mis hombros. Segundos después una chica de cabello rubio se acercó a nosotros con una pequeña libreta y un bolígrafo en sus manos.

"Buen día, ¿Que ordenarán?"

Me giré a mirar a Luke y el también lo hacía. "Dos cafés fríos." Respondió él. Ella asintió y lo escribió en la libreta.

"¿Dónde está Jess?" Le pregunté a la chica tratando de no sonar grosera.

"Su madre enfermó y pidió permiso para quedarse en casa con ella hasta que mejore."

"Oh. Okay, gracias." Ella asintió con una sonrisa en su rostro, para entonces marcharse.

Tanto Luke como yo permanecimos en silencio. Él aun seguía con su brazo en mis hombros y comenzaba aburrirme, hasta que su pregunta volvió a mi cabeza. ¿Él me había dicho que quería besarme? Probablemente pude haber respondido algo mejor, pero en ese momento, me había quedado sin habla. Tenía un fuerte sentimiento hacia Luke. Pero me aterraba el hecho de arriesgarme al abrirme hacia el y decirle todo lo que sentía. Deje aquellos pensamientos cuando la chica regresó con nuestros cafés. Los dejó sobre la mesa y de nuevo se marchó. Comencé a tomar de el mío cuando Luke finalmente quitó su brazo de mi. Ambos tomamos nuestros cafés sin decir nada.

Al pagar, salimos y Luke tomó mi mano desde el primer momento en que comenzamos a caminar hacia el instituto.

Llegamos a este y nos dirigimos a calculo. Luke entró y fue directo a su pequeño grupo de amigos mientras yo fui hasta donde Dylan estaba quien charlaba animadamente con otros dos chicos. Preferí no interrumpirlos y simplemente los observé.
Luego de un par de minutos su plática termino y Dylan se giró hacia mi sin ninguna expresión en su rostro.

"Ya me cambiaste, ¿cierto?"

"No, ¿por qué dices eso?" Reí y golpeé una de sus mejillas levemente.

"Luke esta contigo todo el tiempo."

"No es cierto."

"Si lo es, está contigo cada momento que le es posible. Creo que si pudiera sería capaz de ir a tu casa para solo verte dormir."

"No es para tanto."

El profesor entro el aula y de inmediato todos regresaron a sus lugares.

"Bien. Necesito que alguien pase al frente a completar la tabla de la pagina noventa y ocho de su libro." Baje mi cabeza fingiendo escribir algo, esperando que él no me eligiera a mi. "¿Algún voluntario? O tendré que decirlo yo." Miré a mi alrededor y nadie levantaba la mano. Abrí mi mochila y comencé a buscar el libro. Ya lo había encontrado pero seguía fingiendo que no. "Adelante Hemmings." Levanté mi cabeza al escuchar su apellido y Luke ya se encontraba frente al pizarron.
"La dinámica consistirá en que tu escribirás el primer numero que hace falta en la tabla, y cuando termines, tu podrás escoger quien sera el próximo en poner el segundo y así sucesivamente. Adelante." Luke asintió y lo escribió sin problema alguno. "¿Quien sigue?"

cold coffee » lrhDonde viven las historias. Descúbrelo ahora