veinticuatro.

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Luke me había llevado a su pequeño escondite, y no perdió tiempo en correr a una estrecha habitación donde de esta sacó una guitarra acústica.

"Ya me preguntaba cuando sería el día en el que pudiera verte tocar guitarra." Le dije al ya haber tomado asiento en el canapé.

"Bueno, ya no esperaras más." Luke comenzó a rasgar las cuerdas y no tarde en sonreír. Luke sabía tocarla perfectamente y me parecía increíble.

Pero me pareció aun mas increíble cuando él comenzó a cantar. Era simplemente imposible el describir lo grandioso que era la mezcla del sonido de la guitarra con la voz de Luke. Y él no dejaba de mirarme.

Unos minutos más tarde Luke terminó y dejó la guitarra a un lado. Seguía mirándome, mientras pasaba su mano por mi mejilla, probablemente esperando a que dijera mi opinión respecto a aquello. Llevé mi mirada al suelo y me levanté. Luke también lo hizo.

"Entonces.."

"Fue hermosa." Le interrumpí. El rió.

"Gracias." Luke pasó sus brazos por mi cintura y yo lleve mis manos a su cuello, recargando mi cabeza sobre su pecho.
"Shay, quiero que seas mía." Al oírle me separé de el bruscamente y Luke sonrió. "No de esa forma. Bueno, tal vez si, pero no aún, me refiero a que, quiero que seamos algo más que amigos."

"¿Mejores amigos?" Él me miro seriamente. "¿Super mejores amigos?"

"Monroe."

"¿Super hiper mega mejores amigos?"

"Shay, tu sentido del humor es muy malo."

"Lo sé."

"Bien. Decía que, quiero que tengamos algo formal, quiero que seas mi novia, por que me gustas mucho, y creeme que me haría muy feliz el tener el papel de tu novio Agnes." Asentí con una sonrisa en mi rostro. Llevé mis manos a las mejillas de Luke y cerré mis ojos fingiendo estar a punto de besarlo. Volví a abrirlos y Luke ya había cerrado los suyos también. Intenté no reír y justo cuando el creyó que pasaría, besé su mejilla.

"Gánatelo." Luke suspiró y yo le sonreí. "Oye, nunca he visto toda la casa. ¿puedo echar un vistazo?"

"Claro." Luke se encogió de hombros.

Me dirigí a la primera puerta y en esta habían solo un montón de cosas acumuladas. Ni si quiera se podía entrar. Seguí abriendo las puertas de las habitaciones y me detuve en una en la cual las paredes estaban llenas de fotografías.

Comencé a observarlas. En casi todas se encontraba una pareja abrazándose y sonriendo con algún lindo fondo detrás.

"Son mis abuelos." Solté un pequeño salto al escuchar a Luke hablar a un lado mío. "Solían viajar muchos y siempre estaban fotografiándose." Caminé hasta un pequeño buró y tomé una cámara fotográfica que se encontraba sobre este. La sacudí un poco provocando que el polvo que tenia cayera.

"¿Sirve?"

"Eso creo." Respondió Luke. Me di vuelta y lo tomé desprevenido, oprimiendo el botón y haciendo soltar un flash. Segundos después la fotografía salió. La sacudí y el color negro desvaneció, mostrando la imagen de Luke.

"Que lindo." Extendí mi mano mostrando la fotografía y Luke río por lo bajo.

"Vamos a mi casa." El no me dejo responder y tomo mi mano llevándonos fuera. Subimos a su camioneta y con un viaje demasiado silencioso, llegamos. Bajé y esperé a Luke. Él, caminó hasta llegar a mi lado.

"Mis padres salieron, estaremos solos." Luke golpeó levemente mi hombro y alzó sus cejas varias veces.

"Asombroso. Tal vez podremos ver un documental juntos, seria muy divertido." Bromeé sonriendo.

cold coffee » lrhDonde viven las historias. Descúbrelo ahora