Capítulo 11: Jugando con fuego

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Camino a casa lo único que pasaba por mi mente era "¿Cómo fue que ocurrió aquello? ¿Realmente había ocurrido?" Y cada vez que lo pensaba menos probable me parecía que aquello sucedido con el señor Allen pudiese ser real.

Sacudí de mi mente aquellos pensamientos al ver el auto de mis padres estacionado fuera, estaban en casa, rara vez estaban tan temprano, algo los debió haber apresurado para que estuvieran ya en casa.

Tomé todas mis cosas y me miré mi reflejo en el vidrio del auto comprobando que todo mi aspecto se encontrara justo en su lugar, retoque un poco mi labial y una vez lista me dirigí a la entrada. Mi madre atendió la puerta antes de que yo siquiera buscara las llaves en mi bolso.

-¿Qué tal tu día de clases cariño?— me sonrío forzadamente—

-Todo estuvo bien madre— la miré extrañada por la forma en la que me miraba— ¿Esta todo bien?

-Claro que si hija, el señor Allen nos llamó

Mis ojos debieron haberse abierto exageradamente porque la expresión de mi madre reprendiéndome por aquel gesto era muy notoria. Respire profundo y tranquilice los latidos incesantes de mi corazón

-¿Para qué los ha llamado?— me aventuré a saber—

-Quería ver con tu padre algunas cosas de los contratos que antes habían discutido en la casa de tus tíos. Por eso, compórtate.

Mis ojos se dirigieron a mis espaldas buscando un auto que destacara entre los otros, para comprobar lo que creía mi madre acaba de decirme, y ahí estaba, estacionado apenas unos metros por delante del mío. Su auto.

-El día de hoy comera con nosotros, quiero que hables solo lo necesario y cuando tu padre te lo indique. Esto es algo muy importante para nosotros, ¿Entiendes? — asentí instantáneamente a la amenaza de mi madre sobre comportarme—

-¿No puedo comer más tarde?— la verdad es que no quería confrontar a aquel hombre justo enfrente de mis padres— de cualquier modo ni siquiera tengo hambre

-Pues espero te dé pronto, tu padre te quiere presente, además tu ves al señor Allen todos los días en clase, no habrá ningún problema

-Será incomodo—suspiré vencida— pero esta bien, aquí vamos

Caminamos juntas hacía la cocina y dejé mi bolsa y la pequeña mochila recargada en el stant central, para tomar los platos y llevarlos al comedor principal, ya debían estar esperándonos.

-Lamentamos la tardanza, algunos platillos necesitaban un poco más de tiempo en el horno

Ahí estaba él, tan tranquilo y formal justo como lo había visto hace algunas horas al iniciar la clase, el brillo en sus ojos claros había vuelto y una sonrisa traviesa se dibujo en sus labios al verme entrando con la ensalada. Mis pensamientos viajaron a hace algunas horas, cuando sus dedos que ahora estaban en nuestra mesa estaban tocándome como nunca pensé que lo haría. Mis labios se secaron y mi lengua paso sobre ellos para regresarles su brillo natural, los ojos de Nicholas estaban fijos en mis labios.

Aquello sería más complicado de lo que imaginaba. Me dispuse a tomar asiento justo enfrente de el, pero mi madre me reprendió con la mirada, pues debía sentarme a su lado, para mantener un equilibrio en la mesa. Tomé una bocanada de aire y me dirigí a su lado y tomé asiento.

La conversación siguió su curso entre mi padre y Nicholas, mi padre estaba animado conversando sobre los contratos que se iban a firmar entre ambas compañías. Mis ojos iban de mi comida a los cubiertos, y de los cubiertos a la comida, la cual apenas había tocado, pero con aquel hombre a mi lado el estómago me daba un vuelco de los nervios.

No sé cuánto tiempo tenían llamándome hasta que escuché a mi madre llamarme ya un poco molesta.

-Ah, ¿Qué? Perdón, estoy un poco distraída el día de hoy, debe ser porque mañana tengo un examen importante

-Hablando de evaluaciones, no sé si su hija les comentó acerca del trato que hicimos— mi miró curioso y negué con la cabeza— le estoy dando clases privadas después de clases, ya que es de las mejores estudiantes

-¡No nos habías comentado nada hija! — dijo mi padre con un signo de orgullo en su voz— la verdad es que Anna siempre ha sobre destacado en cualquier cosa que se propone

-No me cabe duda de ello— dijo y lo mire avergonzada— me mantendré informado de todas su calificaciones durante el año y les comento esto ya que puede que algunas veces ella llegue fuera del horario escolar, no se preocupen por eso, ¿Verdad señorita Owen?

-Tiene toda la razón, debí avisarles antes, pero con lo ocupado que esta el señor Allen a veces me parecía que no sería posible tener esas clases, de hecho hoy— lo miré— fue la primera desde que me comentó el trato

-Así es, y la verdad es que vi un desarrollo impresionante en su hija

No olvidaba sus palabras juguetonas durante aquella clase, y como me había retado en múltiples ocasiones a jugar un juego del que el ya se creía el ganador, pero estaba dispuesta a demostrarle que estaba completamente equivocado.

La platica sobre mis múltiples hazañas como estudiante estaba tomando otro curso y aprovechando el hecho de que todos estaban divertidos y atentos a Nicholas lo haría pagar cada reto impuesto.

Mi mano tomó una servilleta y limpié mis labios com esta, después la baje y despistadamente deslicé mi mano por debajo de la mesa y la dirigí hacía su pierna, al primer contacto, interrumpió su dialogo y endureció la mandíbula antes de comenzar a toser falsamente.

-Lo siento, creo que he masticado muy aprisa— se disculpó y tomó una servilleta para limpiar sus labios y mirarme asesinándome con sus ojos ahora oscurecidos—

Me mordí el labio divertida con aquello y con mi mano libre continué comiendo, deslice mi mano por su muslo acariciando la superficie del pantalón apretado a su piel. Me aventuré y deslicé sensualmente mi mano hacía el bulto que me confirmaba que aquello le gustaba.

Lo toqué, primero suave y noté como Nicholas cerraba sus ojos intentando mantener la compostura y concentrarse en lo siguiente que le diría a mi padre, mi mano pasó a deshacer la unión del botón de su pantalón y deslizar la cremallera hacia abajo, ahora lo único que separaba mi mano de su falo era su ropa interior que pretendía mantenerla.

Lo acaricié primero lento y cada vez más rápido por encima de la ropa interior, con todo el cuidado posible para que mis padres no notaran el movimiento de mi brazo. Nicholas parecía cada vez más tenso con aquella situación.

-Disculpa Susan, ¿Dónde esta el baño?— preguntó y en su voz notaba la urgencia de salir de aquel lugar—

-Esta por aquel pasillo, dando vuelta, y después abres la puerta que te dirige al cuarto de centro, continuas— no dejó a mi madre terminar y yo ya estaba terminando de cerrar su pantalón—

-¿Qué tal si me muestra el caminó señorita Owen? La verdad es que a pesar de ser muy inteligente tiendo a perderme en casas— me miró insistente— sino sería una molestia para sus padres tener que levantarse

-Claro que si Anna, indícale el camino al señor Allen, mientras tanto tu madre y yo iremos a la cocina para traer el postre, que estamos de celebración

Me mordí el labio indecisa, pero cuando Nicholas me tendió su mano para levantarme no pude negarme, estaba segura de algo, su venganza estaba por comenzar.

Me mordí el labio indecisa, pero cuando Nicholas me tendió su mano para levantarme no pude negarme, estaba segura de algo, su venganza estaba por comenzar

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