Capítulo 21: Pendiente

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Después de lo que ocurrió aquel día no había vuelto a ver a Nicholas, ya habían pasado mas de seis días y no aparecía ni por la escuela ni por casa, comenzaba a pensar que mis términos tal vez lo habrían molestado un poco, ¿Alguien alguna vez le habrá exigido algo?

Deje de pensar en todo aquello, casi era semana de exámenes y si no dejaba de pensar en aquel hombre lo único que causaría es que reprobaría las materias, que mis padres creían que repasaba junto a él. 

-Señorita Owen – me llamó el señor Raynod –

-¿Sí señor?

-Le comentaba a sus compañeros que quien pueda responder este problema tendrá diez en la participación del mes, ¿Sabe la respuesta?

Observe atentamente el problema en la pizarra, no parecía tan complejo a pesar de todos los signos que lo acompañaban, en ellos estaba la clave, asentí y pase enfrente a resolverlo, para la sorpresa del señor Raynod todo se encontraba correcto, y anotó en la lista mi diez merecido.

-Pase a sentarse, si sigue estudiando de esta manera tendrá un diez en el examen del viernes, una cosa más, ponga atención, puedo ver que esta en cualquier otro lado menos en la clase, si tiene algo mas importante que pensar, mejor no entre 

-Lo lamento señor Raynod, pondré más atención 

-Eso espero, ahora vaya a sentarse 

Desde que Nicholas no aparecía por la escuela, el mismo se había encargado de conseguir un sustituto, no sabía de que se conocían el y el señor Raynod pero parecía que aquel hombre era agradable, mucho menos formal que el y también más joven, las chicas del salón no tardaron en ofrecérsele apenas había entrado por la puerta. 

-Señorita Owen, ¿podría quedarse un minuto? – ya estaba guardando mis cosas para salir del aula– 

-Claro que si

Una vez todos hubieron salido del salón de clases, el señor Raynod me llamó a su escritorio y me acerque, estaba algo curiosa de lo que iba a decirme, tal vez Nicholas había hablando con el y me mandaría un mensaje.

-Verás he notado que tienes un talento natural para esta materia, eres buena, estudiosa y te desenvuelves bien en clase, quisiera que fueras a concursar por parte de la escuela en un torneo nacional de cálculo avanzado, ¿Qué te parece la idea?– me miró e hizo una pausa – pareces algo decepcionada

-Para nada señor Raynod – sonreí y deje de pensar por un momento en Nicholas– me encantaría participar, ¿Qué debo hacer?

-Tengo entendido que el señor Allen te estaba preparando indirectamente para este concurso, el en su momento cuando fue estudiante también participo en este mismo concurso, pero como el no se encuentra disponible para darte clases privadas, me temo que tendré que ser yo, espero estar a la altura 

-Entiendo, la verdad es que el señor Allen y yo estudiábamos muy pocos días a la semana, me gustaría que fueran mas seguido, si es que voy a ir a competir 

-Me parece lo adecuado, ¿Cuándo te parece apropiado que empecemos las clases?

-Mañana mismo, ¿Cuándo es el torneo?

-En dos semanas – mi cara de asombro pareció alarmarlo también a el– sé que no es tanto tiempo como quisieras para trabajar más tu razonamiento, pero lo lograremos, eres un chica muy inteligente, además no estarás sola

-Por el momento puede que no este sola, pero en el concurso en definitiva que lo estaré y no quiero hacer el ridículo presentándome y representado a toda la universidad –tomó mi mano entre las suyas– 

Grilletes y deseosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora