"Podría no verte en un año,
No coincidir contigo hasta
dentro de diez años y, aun así, te vería
y mi corazón seguiría latiendo tan rápido
como la primera vez"
Se veía hermoso, incluso más que la primera vez que lo vio, a pesar de tener ojeras y verse cansado, a pesar de eso, para Off no había ser humano más bello que Gun, sus largas pestañas, su pelo, todo en él era perfecto, cuando se desmayó sintió terror, podría soportar cualquier cosa, menos que él estuviese enfermo, siempre esperaría que Gun Atthaphan estuviese bien, por eso le hervía la sangre verlo así, repartiendo comidas, trabajando quizás cuantas horas a la semana, porque Gun no vivía, solo sobrevivía.
- Su presión es baja, pero hay algo más, no sabría decirle sin los exámenes, creo que sería bueno que se haga un chequeo urgente, tiene la piel algo amarillenta, manos frías, puede ser anemia.
- ¿Anemia? - De modo que estaba enfermo, esa noticia se sintió como un golpe en el pecho.
- Si, aunque... - El doctor lo miró extrañado. - Me gustaría hacerle unos exámenes. Por ahora, que descanse, señor Jumpol es muy..., muy importante que descanse. - Dijo recalcando esa última parte.
- ¿Por qué?, ¿hay algo más? - El doctor miró a Gun y luego a él otra vez, después sacudió la cabeza.
- No estoy seguro, como le dije, lastimosamente no tengo como hacerle exámenes aquí, pero debe ir a la clínica lo antes posible. - Le pareció extraño que el doctor de pronto quisiera que a toda costa lo llevara a la clínica.
Cuando el medico se fue Off volvió a la habitación esperando que Gun continuara dormido, pero, para su sorpresa él estaba sentado al borde de la cama, dispuesto a irse lo antes posible.
- ¿Dónde vas? - Preguntó desde la puerta, molesto consigo mismo por estar preocupado por una persona que solo le había traído dolor.
- Tengo que trabajar.
- Pero, acabas de desmayarte, tienes que descansar.
- Si, lo sé. - Sus respuestas eran vagas, aun así, no dijo nada más, solo se dispuso a ponerse los zapatos.
- Gun...
- Lamento esto, gracias por ayudarme. - La rabia se acumuló dentro de su pecho.
- ¿Acaso pensabas que no te ayudaría?, ¡por todos los cielos!, ¡si acabas de desmayarte!, ¡¿Dónde vas tan de prisa?!
- Ya le dije, tengo que seguir trabajando. - Se detuvo un instante solo para decir. - Por favor, firme los papeles del divorcio.
- ¿Tienes tantas ganas de separarte de mí?
- ¿A qué viene esa pregunta?, sabe perfectamente que tenemos que terminar con esto.
- ¿Vas a casarte con alguien más? - Gun sonrió irónico.
- No en esta vida señor Jumpol. - Lo dijo como si estar casado con él fuese lo peor del mundo.
- ¿Fui tan mal esposo?, ¿Por qué hiciste todo esto?, ¡dime!, ¡creo que merezco una explicación!
- Yo no hice nada. - Le dijo, antes de salir de la habitación.
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EL MALO DEL CUENTO
RomanceArgumento: El presidente Jumpol echó sin contemplaciones a su joven esposo después de descubrir que lo estaba traicionando. Gun volvió a buscarlo, pero un implacable Off por medio de su abogado le extendió un cuantioso cheque para que desapareciera...