Capitulo 35: Inesperado

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Si hay pruebas que lo comprueben -dijo una voz femenina.

Todos voltearon a ver de quien se trataba los ojos de Mew y Gulf se abrieron como platos era nada más y nada menos que Soleth Suppasit.

-Fiscal: Señora Suppasit -dijo sorprendido.

-Soleth: En efecto soy yo y estoy aquí para declarar toda la verdad y entregarme.

-Arthit: Cariño -susurro saliendo del trance no podía creer que la mujer que amaba lo fuera a delatar.

-Joss: Que tiene que decir usted señora Suppasit -pregunto curioso.

Soleth se acercó al estrado y tomó asiento allí.

-Fiscal: Soleth Suppasit jura usted decir la verdad y nada más que la verdad -pregunto.

-Soleth: Si juro.

-Mean: Señora Suppasit que es lo que tiene que declarar.

-Soleth: Acuso a Arthit Suppasit del asesinato de los Kanawut y de los Jongcheveevat -dijo firme y sin titubear -y me entrego como cómplice de todo -dijo agachando la cabeza.

-Arthit: Soleth que demonios haces -grito enojado.

-Soleth: No más Arthit, calle por años para cuidar a Mew, me aléjaste de el, me obligaste a tratarlo mal, esta es mi venganza hacia ti -grito sin titubear.

Mew se sorprendió al escuchar las palabras de Soleth de que carajos se trataba todo esto.

-Mean: Señora Suppasit podría ser más específica.

-Soleth: Hace años conocí a Arthit en la universidad me enamoré perdidamente de el, después de 5 años de noviazgo nos casamos, éramos felices un año después quedé embarazada de gemelos era la mujer más feliz del mundo, pero cuando tenía 5 meses de embarazo descubrí todo lo que hacía Arthit, traté de huir de él pero me descubrió y me amenazó con matar a mis amigos y familia si me iba, así que decidí quedarme de lado, aparentaba seguir amandolo para que no me hiciera daño cuando mis bebes nacieron fue un rayito de felicidad en medio de toda la tristeza pero lamentablemente el doctor nos informó que uno de mis bebes padecía Cardiomiopatía viral, de inmediato Arthit me ordenó dejarlo en un orfanato no iba a permitir que los demás supieran que tenía un hijo enfermo, me negué rotundamente no quería dejar a mi bebe pero entonces me volvió amenazar, con pesar acepté dejarlo una parte de mi corazón se rompió ese día, traté de ser fuerte por mi pequeño Liham, pero cada día era un infierno para mi, escuchar todo lo que hacía Arthit me atormentaba quise denunciarlo pero siempre temí por mi familia y por mi hijo, cuando Liham cumplió 2 años le detectaron la misma enfermedad que a mi otro pequeño, fuimos a Estados Unidos, busqué los mejores doctores pero nada pudo salvarlo y murió, ese día sentí morir yo también no tenía más nada porque luchar o seguir había perdido a mis dos bebés, Arthit quería tener otro hijo pero no quise, entonces dijo que buscaría a mi pequeño a ese que me obligó abandonar, eso era algo que no podía permitir, no sabía si mi pequeño seguía vivo o también había muerto debido a su enfermedad pero si lo estaba no iba a permitir que Arthit lo arrastrara a sus malditos negocio y estilo de vida, así que tomé la peor decisión de mi vida y a la vez la mejor me involucre en los negocios de Arthit para poder estar al tanto de las investigaciones de mi bebé -dijo empezando a llorar había tratado de contenerse pero los recuerdos y el arrepentimiento golpearon su mente.

-Mean: Por favor señora Suppasit continúe.

-Soleth: Arthit contrato al mejor detective para encontrar a mi bebé yo rogaba que no lo hiciera pero luego de 3 años lograron dar con el,al parecer lo habían adoptado, el día que el detective llego a dar informes sobre el paradero de mi hijo Arthit no estaba se había ido de viaje así que le rogué que mintiera y que dijera que aún no lo encontraba, le pagué un agran cantidad por su silencio y este acepto, los años fueron pasando y en realidad crei que Arthit se había olvidado del asunto pero no fue así, se cansó de no recibir respuestas y decidió cambiar de detective, este dio con mi pequeño más rápido que el anterior y en menos de un año llego con la información no pude hacer nada para impedirlo -volvió a romper en llanto.

Se tienen que casar Donde viven las historias. Descúbrelo ahora