Tenia 3 semanas con el aquelarre, fueron un gran soporte para poder controlar mis poderos incluso me enseñaron nuevas habilidades, la mayoría del tiempo la pasaba con Gran pero después de estudiar y entrenar me juntaba con Alma, ella se volvió como una gran amiga para mi se parecía mucho a Iván, eran divertidos, seguros de si y condenadamente atractivos.
Desde el día que deje la casa de los chicos no había sabido de ellos, en realidad aun seguía doliendo, pero ahora ya solo existía una ira reprimida dentro de mi y según Gran eso bloqueaba mi control. Al parecer el fuego no solo es destrucción, rabia, venganza, muchos usaban el fuego como representación de estas pero no tenían nada que ver.
Me sentía segura y acompañadas con el aquelarre, todas eran mujeres con historias tan difíciles y de pronto las vez ahí paradas tan fuertes, que me hacen sentir que puedo lograrlo sola.
-¿En que piensas?.-me decía alma mientras se quitaba un trozo de espagueti de la cabeza.
-Pienso en lo torpe que eres comiendo.-no podía evitar no reírme estando con ella.
-Vamos tonta, Gran cito a todo el aquelarre en la fogata.
Tome un suéter y baje con alma las grandes escaleras para llegar a la fogata, donde las brujas le rendían culto a mi madre. Abecés me pregunto si aun existe en el mundo de dioses, la extrañaba demasiado.
al llegar a la fogata estaban las grandes lideres y en medio de ellas Gran, al parecer las lideres eran sus hijas y subordinadas que habían demostrado estar a la altura de la legión, Alma era hija de Sahaz, una de las brujas lideres, en pocas palabras era nieta de Gran, aun que en realidad no se parecían en nada Gran a pesar de estar ciega tenia bonitos ojos color avellana y alma tenia ojos cafés y el cabello platinado supongo que se lo habría teñido.
Estamos en presencia de la diosa de nuestra legión, el día de hoy prometemos nuestras vidas a Venus diosa legitima del fuego. Para restaurar la paz entre legiones serán necesarios sacrificios y no podemos escondernos por mas tiempo, haremos lo posible para que venus cumpla con su misión, así que dinos Venus ¿Qué necesitas de nosotras para derrocar a tu padre?-.decía Gran apuntando su dedo a mi dirección.
A mi me mente llego el ónix de las 3 legiones, pero solo necesitaba mencionar el echo de que necesitaba la sangre de los chicos para nadar en el lago y sacarlo de ahí para llevarlo a las montañas, para poder adquirir los demás dones y vencer a mi padre, necesitaba todo el poder y fuerza posible para vencerlo después de todo el era un dios.
-Necesito una pequeña cantidad de sangre de los demás hijos de dioses, solo necesito eso y en cuanto lo tenga deberán distraerlos para que yo pueda ir por lo que necesito para matar a mi padre.
Las brujas asintieron ante mi petición y así fue como todo empezó.
POV. Dean
-Te lo dije Deth, debimos encerrarla desde que la encontramos, no sabemos donde esta desde hace semanas y al parecer mi conexión con el agua se perdió, no me da nada acerca del paradero de venus y a ti nadie te quiere decir ninguno de tus amiguitos del bosque.-decía exasperado
-Cálmate Dean, es cierto desde que se fue algo cambio es como si nos dieran la espalda, pero es que ellos no vieron lo que nosotros si, cuando te ataco fue como si no se quisiera detener incluso algunas plantas podrían decirme su vibra y todo en ella era destrucción y maldad.
Deth siempre me había juzgado sobre como trataba a Venus, pero el no sabe toda la verdad, ella era la única razón de mi dolor y odio, jamás podría perdonarla, desde pequeña fue un peligro por eso su madre la había escondido de todos para que no le hiciera daño a nadie y el echo de que no recordara nada sobre lo que hizo me hacia enfurecer, cuando la vi casi morir, tan lastimada sentía que el corazón se me hacia pequeño pero no podía permitirme tenerle simpatía.
-Debemos dejar de preocuparnos de Venus y enfocarnos en el Ónix, la respuesta esta en mis libros yo lo se, lo que dibujaste lo había visto ya antes en ellos, después de tener los demás poderes podremos buscar a Venus para encerrarla con su padre.-me decía Deth.
Subimos a la biblioteca, al cruzar pasamos por el cuarto que antes era de venus entre para ver si no había dejado algo de importancia, solo habían unos libros de Deth, debajo de la cama una muda de ropa, busque en sus bolsillos y solo había una foto de su madre, la guarde en mi bolsillo y salí de ahí.
-Joder esa chica!!!!! Arranco la pagina donde estaba el diagrama, ella ya sabe todo nos lleva la delantera, debemos encontrarla ahora.-decía deth
Prepárate princesa, esta vez te encontrare, para encerrarte para siempre.
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La ultima descendiente
Roman pour AdolescentsHace exactamente mil quinientos milenios, cuándo la tierra comenzaba a crecer y la creación de las cosas emergía, los dioses, sabían que debían crear un ente que pudiera disfrutar de las grandes maravillas que ahí habían nacido, así que creo a un gr...