Forget You ❀ᴛᴀᴇᴋᴏᴏᴋ

13

Abrió los ojos pesadamente, se sentía demasiado cansado, quizá porque la noche anterior había tenido fiebre, revelaciones y demasiados sentimientos acumulados. Soltó un suspiro, sintiendo el peso de algo recargado en su cintura, alzó la vista para notar como cierto chico de cabellos azules dormitaba a su lado. Se veía tan pacífico, elegante y varonil, no podía creer que estuviera durmiendo al lado del que había sido su primer y gran amor.

Notó como la mano que se recargaba en su cintura se removía, mientras la mirada ajena se iba notando poco a poco. La cual le miró con interés, sonriendo y moviendo un poco su cuerpo para encarar al del pelirrojo.

— ¿Cómo amaneciste? —Indagó con calma, moviendo un poco su mano hacia la mejilla ajena, rozándola con sus nudillos—. ¿Te sientes ya sin fiebre?

—Un poco cansado si soy sincero, pero ya estoy mejor—cerró los ojos al sentir el tacto suave de los labios del de cabellos azules en su frente—. Y... ¿tú cómo te sientes?

—Aliviado, me he sentido mucho mejor ahora que hablamos—iba a decirle algo más, pero el pequeño ladrido de YeonTan les interrumpió—. Parece ser que no somos los únicos que necesitamos mimos.

Se levantó de la cama con pesar, mirando hacia el cachorro que jugueteaba en busca de atención de alguno de los chicos.

—Será mejor apresurarnos, para jugar un poco con él y encaminarnos a clases con calma.

El menor asintió, levantándose de la cómoda cama y estirándose un poco, pensando por un momento en la ropa que tenía. ¿Debería irse a cambiar?

—Tengo ropa nueva guardada—escuchó, como si TaeHyung pudiera leer su mente—. Puedes usarla, no tengo problema con eso.

—Pero es nueva...

—Es lo de menos, anda, está en ese cajón—señaló, el contrario asintió acercándose—. Iré a preparar el desayuno nuestro y de YeonTan. Te espero en la cocina.

El menor sonrió, mientras tomaba las cosas del mayor para vestirse, para seguir una rutina muy similar a la de la noche anterior. Pero que, de cierto modo, lejos de incomodar a ambos, los hacía sentir extrañamente muy bien, quizá demasiado para ser tan pronto.

Ambos se dirigieron a sus clases juntos, como si estuvieran resistiéndose a la idea de tomarse las manos o lo que fuera. Esperando en su interior, quizá, que las cosas pronto fueran tan naturales entre ambos y que el sostenerse de la mano mientras se encaminaban a clases, significara algo más que solo hacerse compañía por agradarse.

TaeHyung nunca había deseado algo con tanto fervor en su corazón.

JiMin no podía creer lo que estaba viendo en esos momentos, es más, estaba seguro que todos los presentes no cabían en la sorpresa. Pues nunca, desde que llevaban en aquel lugar, habían visto el mínimo interés de parte de TaeHyung hacia JungKook, sin embargo, allí estaban, caminando lado a lado con rostros tranquilos.