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"Hola hermosa", dijo Changmin justo antes de que lo empujaras a su camerino. Acababan de terminar un espectáculo y no podías evitar las ganas que te dieron de disfrutar de él. Verlo tomar el control en el escenario enciende tu alma. Lo necesitabas desesperadamente. Sus ojos se agrandaron cuando su espalda golpeó la pared y tú caíste de rodillas. Miró a su alrededor esperando que no hubiera nadie.
“ Bebé, ¿q-qué estás haciendo? Tartamudeó, un manojo de nervios salió a flote mientras le abrías la cremallera. Respiró profundamente, muy sorprendido por tus acciones cuando metiste la mano en sus bóxers y lo sacaste. Changmin ya estaba creciendo en el momento en que te hiciste cargo de él. Le sonreíste mientras le mostrabas la lengua, comenzando por la base y lamiendo lentamente hacia arriba.
Changmin siseó, disfrutando de la sensación de tu cálida y húmeda lengua sobre su endurecida polla. Ha estado ocupado últimamente, así que escuchar que vendrías al show lo hizo muy feliz. Pero ahora, tener tu lengua sobre su polla lo ponía extasiado.
" Aw baby, ¿me extrañaste tanto?" Él hacía pucheros juguetonamente mientras besabas su punta, moviendo la cabeza hacia él. Tu lengua continuó masajeando su longitud justo antes de empujar contra él. En la primera sacudida, lo llevaste hasta la parte posterior de tu garganta, haciéndolo resoplar profundamente. Lo probaste, chupándolo como si de una paleta se tratará, ya lo considerabas tu sabor favorito.
"Si sigues chupando así, me voy a correr en tu boca bebé ", se quejó, su mano iba a tu cabeza. Te acarició tiernamente, mientras tu boca hacía un gran trabajo.
"Correte en mi garganta bebé", susurraste débilmente, tu boca se llenaba de él. Bombeabas con más fuerza, se le podía escuchar gruñir en voz alta. Susurraba tu nombre como un canto mágico que te motivaba por completo. Sorbiéndolo una vez más antes de que explotará en tu boca. Su semilla caliente se derramaba por tu garganta mientras dejaba escapar un gemido entrecortado con tu nombre en él.
Limpió tu barbilla y lamió tus labios. Una débil sonrisa se formaba en su rostro ya cansado.
“ Eso no es justo, quiero terminar esto en otro lugar." Él sonrió, inclinándose hacia ti, para darte un beso lleno de deseo.
“Nop. Eso será para después ... ahora, vamos a celebrar con los chicos ".
