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Te lamiste los labios mientras Sangyeon se apoyaba en el escritorio, después de haberse escabullido de la fiesta de la empresa, se encargó de encontrar una oficina vacía.
Te había estado mirando desde el momento en que llegaste al evento. Tu pequeño y bien proporcionado vestido negro lo dejó sin aliento y con ganas de devorarte.
“ Te ves tan sexy nena. ¿Por qué no vienes aquí y me ayudas?" Habló en voz baja, sus hacían un gesto para que te acercaras. Mientras su otra mano fue a su pantalón, y se lo desabrochó.
Tus talones chasquearon mientras te acercabas seductoramente, tu piel se calentaba cuanto más te acercabas.
Ladeó la cabeza mirándote con fascinación, lamiendo casualmente sus labios mientras te parabas frente a él. Sus ojos admiraron tus rasgos y luego se posaron en tus labios, su mano subió a tu mandíbula. La agarró con fuerza, acercando tu rostro al suyo.
Sangyeon lamió tus labios, estabas congelada por la brutalidad repentina pero te gustó.
“ Tus labios ... tan suaves. Me encantaría verlos alrededor de mi polla ". Habló en voz baja, su tono profundo. Estabas un poco sorprendida, pero sabías que harías cualquier cosa por él.
Te inclinaste hacia él, colocando un beso rápido en sus labios regordetes. Tu mano fue a su bulto que formaba una carpa en sus boxers. Su pantalon estaba abierto, así que empezaste a darle palmadas.
Sangyeon tranquilamente comenzó a quitarse el saco del traje, sin apartar los ojos ni una sola vez de los tuyos. Tu palma estaba unida a su ingle como un imán, adorando cómo su longitud crecía con tu toque.
Sangyeon te movió para después de colocar su saco en el suelo, bien doblado.
“ Ponte de rodillas… ” dijo con una voz ronca. Sonreíste cayendo lentamente de rodillas, tus ojos nunca dejaron los de él.
“ ¿Qué vas a hacer con esa linda boquita tuya, bebé?" Preguntó, mientras una leve sonrisa se dibujaba en su hermoso rostro.
Antes de que pudiera guiñarte un ojo, sacaste su polla. Sus ojos se agrandaron cuando vio que tu lengua se asomaba y lamía su línea. Tus ojos todavía estaban conectados a los de él, bajaste a sus bolas y lamiste todo el camino hasta la cabeza de su polla. Podías ver a Sangyeon tragar, estaba impresionado, nada lo preparó para tu próximo movimiento.
Después de chuparle la cabeza por un tiempo, con confianza lo tomaste entero hasta que golpeó la parte posterior de tu garganta. Sangyeon siseó en voz alta, sus manos iban a tu cabello para jalar de él.
“ Niña, tomas mi pene tan bien." Te elogió cuando empezó a follarte la boca. Pequeñas maldiciones dejaron sus labios junto con más elogios a tu talento.
Decir que Sangyeon estaba impresionado era por decir lo menos… Sangyeon estaba viviendo su mejor momento mientras se corría en tu garganta. Su respiración era irregular pero sus ojos brillaban con una intensa noción de la que no eras consciente.
Poco después de recuperarse, bajó y te recogió. Colocándote en el escritorio en el que te recostó.
“ Lo hiciste tan bien bebé. Ahora es momento de mostrarte cuánto te agradezco lo que hiciste". Te guiñó un ojo de nuevo mientras sus manos caían a tus muslos, separando bruscamente tus piernas y cayendo de rodillas.
Te arrastró hasta el borde y te arrancó las bragas de encaje antes de que pudieras discutir. Tu boca se abrió, sorprendida por sus acciones, pero pronto tus ojos se pusieron en blanco una vez que sentiste su larga lengua saborearte.
Era un hombre de palabra, su lengua no se detenía ni una vez para dejarte respirar. No importa cuántas veces hayas gritado su nombre o tarareado un simple " No ". Eso nunca le importó. Estaba demasiado ocupado escuchando tu cuerpo. Como te estremecías cuando lamió una nueva parte sensible o cuando temblaste antes de llegar al clímax.
Te corriste completamente en su boca, y el bebió todo tu jugo.
Digamos que estaba muy agradecido por tus acciones.
