II un despertar de recuerdos

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Ya tengo 14 años después de mucho tiempo, al parecer, hay cosas que no tienen importancia, pero que contaré poco a poco, mi vida es algo normal con cosas normales, nada fuera de sus parámetros.

Mi madre me levanta para ir a la escuela junto a mi hermana, me doy una ducha, me pongo algo de ropa y tomó mi desayuno para luego esperar el transporte público.

Mis emociones por ir al Instituto no eran las mejores, no es que tuviese problemas, solo que, a pesar de tener un grupo de amigos, me esforcemos mucho para encajar, pero, no me siento yo mismo.

Al llegar, caminamos un poco para llegar a la escuela, luego todos entramos y cada persona entra a su aula, pero, ese día, conocí a una chica, su nombre era ______ era una de esas chicas otakus que todo el mundo veía como un bicho raro, pero para mi, era una chica común.

Mis clases iniciaban y todos tomaban asientos, los primeros días eran para acomodar a los nuevos, y después, bueno, solo eran clases y más clases, pero yo, trataba de salir de ese parámetro y hacer algo diferente, pero normalmente no lo lograba, mis compañeros me veían como el clásico "chico tierno, sin novia y sin ganitas de pasar al siguiente año" ,Bueno solo acertaron en dos cosas, en una que yo era uno de los más peques del aula y la otra, que no tenía ganas de seguir al otro año.

Al salir de clases siempre veía a la chica otaku, bueno, al parecer no eran raros como yo creía, o como lo contaban los demás, solo le di un hola y ella respondió ese Hola, yo no era de hacer amigos, si tenía amigos es por que ellos tomaban la iniciativa o por que ya nos conocíamos, ella solo sonrió y yo seguí hablando de cosas triviales.

Ella dijo que quería verme de nuevo al día siguiente, cosa que no tube que reprochar, después de tanto tiempo, al fin tube una razón por la cual ir al Instituto.

Una amiga

Y de nuevo mi vida se volvio monótona y común, después de tardar algunos días en familiarizar me con ella fuy perdiendo el interés en volver al Instituto, al parecer, era de esas chicas que faltaba cuando ella quisiera.

Poco a poco tomamos demasiada confianza juntos, pero al pasar un año y medio, me contó su "secreto" Días después cuando trate de hablarle, ella se Alejo, y no volvimos a hablar en lo que quedaba del tiempo Escolar. 

Al siguiente año es donde descubriría muchas cosas, sobre mi, sobre ella y sobre casi todo el Instituto.

UNA VIDA NO TAN COTIDIANADonde viven las historias. Descúbrelo ahora