KiriBaku Week 2018

Día 1 - Tema 3

• Lágrimas •

★•°. ∞ .°•★

Kirishima es alguien empático y de lágrimas fáciles.

Bakugō es consciente de aquello, sin embargo, la mayoría de las veces lo pasa de largo.

Y no porque no le importe, sino que porque lo olvida.

Justo como ahora. Cuando ambos se encuentran uno junto al otro viendo una película.

Es una película de acción, sin embargo, están en la parte dramática cuando el protagonista revela el por qué de sus actos y su pésimo y predecible mal pasado.

Es algo cliché. E incluso un poco tonto (por lo repetitivo de la situación). Sin embargo, Bakugō no hizo ningún comentario acerca de aquello.

Está más concentrado admirando en silencio el perfecto perfil de Kirishima.

Y este mismo no ha notado eso.

En parte porque es un distraído. Pero, mayoritariamente, su desconcentración se debe a que está realmente interesado en el filme de acción.

Entonces, aún bajo la mirada de su novio, se acomodó de modo que, aún a pesar de estar cerca, Katsuki no lograba ver del todo su expresión.

Pero eso no fue percibido como algo malo por el rubio, quien, de manera lenta, dirigió sus ojos a su mano derecha. La cual reposaba sobre el sillón de la sala común, cerca, más no unida a la de Kirishima.

Y, de manera valiente, se atrevió a colocar, con poco cuidado, sus dedos sobre los ajenos, entrelazandolos casi de manera brusca.

Entonces sintió, gracias a la unión, como Kirishima se estremecía, volteando bruscamente a verlo.

Fue ahí cuando el cenizo, quien volvió su vista arriba para conectar sus ojos con los ajenos, que notó con desagrado que Eijirō estaba derramando gruesos ríos de amargas lágrimas de sus grandes y rojizos ojos.

Su expresión calmada cambió inmediatamente por una preocupada, enderezandose de su posición floja sobre el sofá para poder ver más de cerca el rostro afligido de Kirishima.

- ¿Qué pasó? -preguntó, apretando la mano que estaba sosteniendo, sintiendo como Kirishima también apretaba la suya, tratando de secar sus mejillas con su mano libre

- Es que... No sé, su llanto se escuchó muy real -explicó, señalando con uno de sus dedos la pantalla en la que se veía llorando a la protagonista que acababa de perder a su enamorado a manos del enemigo

Bakugō entonces volvió a relajarse, murmurando un pequeño "idiota" que no hizo más que sacarle una pequeña sonrisa al pelirojo, quien se inclinó hacia el rubio para dejar un beso en el costado de su cuello.

- No tienes por qué preocuparte, sabes que soy sensible a las emociones del resto -susurró Kirishima, sintiendo como, poco a poco, el agarre de los dedos de Bakugō se suavizaba hasta volverse algo cómodo y cálido

Algo de dos.

- Carajo -maldijo Katsuki, virando sus ojos con falsa molestia, volviendo a tirarse de manera floja sobre el sofá, tirando de Kirishima para que recostara su cuerpo junto al suyo