Chapter 1

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Embarazo.

Cuando Deaton le dijo que podría estar embarazado su única respuesta fue la carcajada de su vida, porque, vamos, es un chico. Hombre. Tal vez existan los hombres lobo. Tal vez el ah matado a varios de ellos, pero de ahí a un embarazo masculino, no no no no y no.

Pero cuando Deaton le dijo que si es posible dado que Stiles tiene un poco de magia en su interior (otra noticia) y sus antecedentes de poder usar el Ash Mountain, en realidad si era probable.

Lo peor vino cuando Deaton también le dijo que puesto a que el único con el que ha tenido relaciones sexuales era Derek, el bebe podría ser hombre lobo. Un bebe lobo.

Oh, y que el embarazo de hombres lobo duraba cinco meses solamente.

Antes de que terminara la consulta, Deaton le dio a Stiles unos libros sobre mitología licantropa y griega, además le dio uno sobre cómo controlar la magia que Stiles estaba empezando a despertar, porque según deaton “La magia es buena, pero si no la controlas esta te consumirá hasta volverte loco” y no, Stiles no quiere ser una versión joven de Peter Hale, gracias.

Para estar seguro, antes de llegar a su casa, paso a la farmacia y compro cinco pruebas de embarazo. Tenía la esperanza que la cajera no supiera que es el hijo del Sheriff, al parecer no.

Stiles tenía tantas cosas en la cabeza que no se percato de la mirada asombrada de la cajera, porque no todos los días llega un chico de 18 a comprar cinco pruebas de embarazo. Tan pronto como la cajera le dio el cambio Stiles salió corriendo gritando “¡Gracias!” antes de cerrar la puerta.

****

Positivo.

Positivo.

Positivo.

Positivo.

Positivo.

En realidad, Stiles tenía la esperanza que por lo menos uno diaria negativo. Pero al ver cinco confirmaciones un pequeño sentimiento le recorrió el cuerpo, se toco el vientre que ahora estaba plano y un poco marcado y no pudo evitar pensar que un pequeño ser estaba creciendo en su interior, un pequeño bebe, con super poderes.

Se pregunto si así se sentían todas las mujeres al enterarse que estaban embarazadas. Si así se sintió su madre al saber que estaba esperando a Stiles. Se podría decir que ahora tenía otra cosa en común con su madre.

Su madre.

Al acordarse de su madre y saber que no la tenía a su lado para compartir su dicha (claro, después de explicarle todo sobre lo sobrenatural) su entusiasmo decayó un poco.

Pero no se dejo vencer, aunque no tenía a su madre físicamente, podía sentirla en todos lados y donde quiera que este, Stiles supiera que estaba enterado de todo. Solo esperaba que su mama lo hubiera visto con Derek… en la cama.

Así que para tratar de llenar ese vacío, llamo a la única mujer con la que era lo suficientemente cercano y estaba enterada sobre lo natural.

Erica.

Desde que Derek la había mordido y las pocas miles de veces que Stiles la salvo de la muerte, se habían vuelto más cercanos, a tal punto de tener pijamadas en la casa Stilinski, eso sí, la única condición de Stiles era que no llegara con los kilos de maquillaje y los litros de perfume, porque según el castaño “no necesitas todo eso para verte linda, para mí ya lo eras antes de todo esto.

Espero Boyd no me haya escuchado”.

Ese día y aprovechando el doble turno de su padre le llamo a la rubia para invitarla.

-Tengo algo que contarte –

-Si es sobre tus noches con Derek créeme cuando te digo que no necesito detalles – se burló la rubia.

-No es sobre eso, bueno si, pero no sobre eso – al escuchar el suspiro-gruñido de Erica dijo rápidamente – tu solo trae tu hermoso trasero a mi casa – ahora escucho el gruñido de Boyd, tal vez lo hizo más alto para que Stiles pudiera escucharlo desde el teléfono – ah, hola Boyd – rió nervioso.

-Está bien, espero que estés preparado para otra derrota en el Xbox a manos de Catwoman! – se rió con ganas la rubia.

-Hey! Siempre te dejo ganar, como sea, aquí te veo...

Ill be better for youDonde viven las historias. Descúbrelo ahora