→. 34

27.2K 2.5K 523
                                    

Decir que la cena de primer mes había sido un éxito era una mentira porque no hubo cena, tanto JiMin como JungKook habían estado llamándose para ir a los diferentes restaurantes que ambos habían escogido y aparte de que quedaban en diferentes direcciones, uno esperaba que llegara el otro; al final ninguno pudo ir hacia el otro.

Por suerte, mientras pensaban que caminar a la casa de JungKook era una buena idea, pasaron por el parque de juegos que estaba cerca de ahí. Había niños jugando a lo lejos bajo la mirada vigilante de sus padres, ellos habían decidido sentarse en las bancas más alejadas de ahí para poder hablar con calma.

—Yo... Ah, seguro piensas que como novio soy terrible porque olvidé nuestro primer mes... Por eso quería invitarte a cenar pero al parecer tuvimos la misma idea.

—¿De qué hablas? Yo también te invité a cenar por nuestro primer mes... También lo olvidé, lo siento— se apresuró a decir Jeon.

Ambos se miraron en silencio por unos segundos para luego soltar carcajadas, ¿Quién diría que los dos pasaban por la misma situación? Al menos gracias a ello no habían tenido ningún conflicto. JungKook se encontraba aliviado de que aquel error suyo no hubiera causado una discusión o algo por el estilo, ahora se había jurado que ya no olvidaría esa fecha y se encargaría de dar un regalo mejor que el anterior.

Con cautela, acercó su mano, deslizándola entre el espacio que quedaba en medio y logró posar su mano sobre la de JiMin; el rubio al sentir el tacto, se sonrojó, dirigió su mirada de forma tímida hacía Kook y consiguió ver su perfil.

JungKook miraba hacia en frente, el sol iluminaba en su parte izquierda de la cara y sus gafas parecían reflejar un poco de esos rayos de sol, Park se detuvo nuevamente a mirar detenidamente cada detalle, su cabello negro caía sobre parte de su cara dándole un aspecto casual pero tierno, sus ojos eran iluminados por la luz del sol y podían notarse en un café chocolate y sus labios rosados se curvaban en una sonrisa; sin duda, adoraba sus facciones.

¿Pero Park JiMin gustaba de ver a JungKook por qué razón? El rubio podía atreverse a decir que le parecía atractivo, y eso lo dejaba claro como si se expresaran de un amigo ¿Verdad? Porque se suponía que JiMin fingía amar a ese inocente chico de gafas.

Pronto, la atención del pelinegro escogió a JiMin como su nuevo objetivo, el darse cuenta que era observado desde hace unos minutos le hizo sentir una sensación de felicidad, se sentía querido y no solo eso, se sentía tan feliz porque la persona que lo miraba era su amor ¿Ésto era un sueño? Ojalá no lo fuera porque Jeon sentía vivir los mejores momentos de su vida desde hace un mes.

—¿Pasa algo?— preguntó él en un susurro aunque lo único que quería era escuchar la voz de JiMin.

—N-no... Nada.

—¿Habrá alguna forma en la que pueda hacerte feliz? Siento que ésto es muy poco— el pelinegro pensó en una gran idea.

—Pero yo me siento cómodo así... ¿O es que ya tienes algo en mente?

—Claro que sí...

Cómo habían planeado en un principio, la pareja fue a casa de JungKook. El chico de anteojos había pensado que ver alguna película sería una buena manera de pasar el rato, le daría a su novio la libertad de escoger una de su agrado.

Estando dentro de la casa, JiMin se dispuso a buscar un filme para ver mientras que su pareja hacía palomitas en la cocina, justo como la última vez que habían estado ahí, entonces fue cuando recordó esas veces que iba a casa de Kookie o él iba a la suya, cuando aún eran amigos claro, sus madres solían decir que ambos iban a ser inseparables, tenían grandes tardes de videojuegos, dormían en casa del otro pocas veces y aunque seguían viéndose en la escuela, el cambio más extraño fue que las clases ocasionaran que sus reuniones disminuyeran hasta que ya no las hicieran.

Adore 💙 || AU KookMinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora