My Way

Let it Snow!

Había una casa en Basing Street de un color amarillo muy peculiar, con un arco enorme hecho por arbustos en la entrada principal, esta casa no estaba oculta para los muggles, algo que desaprobaba la familia de Alphard Black. Como él lo veía, esconderse de los muggles era innecesario y esa era la razón principal por la que las cenas familiares nunca sucedan en su casa. 

- No son ellos Alphard.— Lucretia soltó después de darle un sorbo a su té.— Le escribí a Ignatius la misma noche del Yule para contarle todo, dijo que vendría en cuanto ya no requirieran de sus servicios en America.

- Si no fueran ellos la casa de mis padres no los hubiera dejado entrar, deja de decir tonterías Lucy...

- Yo no digo tonterías.— Había dicho indignada.— Nunca había visto así a mi hermano, jamás había levantado la voz frente a mi padre, lo sabes y Walburga decidió llevar a Andromeda, eso es algo que ella no haría nunca, siempre han sido tan correctos, por eso los casaron, eran los únicos que podían traer orgullo a la familia.

El silencio comenzaba a formarse, Lucretia tenia una curiosidad innata, no podía quedarse con la duda y menos en un tema tan extraño como el cambio repentino de Orion y Walburga.

- Quiero que mi esposo vuelva pronto, solo él sabría si alguien los hechizo o algo.— Lucretia se veía realmente preocupada.— ¿Sabias que tienen un crup?

- Si, Regie lo mencionó en el Yule.

- Walburga los dejó tener un crup, otra cosa que no tiene ningún sentido, ella no es así.

- ¿Qué más da Lucretia? Regulus estaba feliz, ¿lo habías visto sonreír genuinamente alguna vez? Y Sirius no provocó ni un altercado, hace unos meses la casa de mis padres habría sido una guerra de gritos entre Siri y mi hermana.

- En eso tienes razón, pero...

- Pero nada, nadie lo admitirá en voz alta pero haber tenido a Andy y a su familia con nosotros en el Yule fue algo que a todos les gustó, lastima que Cygnus haya arruinado todo con ese comentario tan hiriente.

- Orion lanzó el primer hechizo, no lo olvides Al.

- Orion defendió a su hijo y eso es lo que un padre debe hacer.

Alphard dio por sentada la conversación con su prima y ambos siguieron tomando el té y comiendo unas galletas que Walburga le había mandado esa mañana. Él también estaba seguro que algo había pasado para haber cambiado así a ese par, pero no le importaba, esa noche en el Yule pudo ver sonrisas en todos los integrantes de su familia, unas mas escondidas que otras, pero sonrisas al fin y al cabo; eso no podía significar nada malo.

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El 12 de Grimmauld Place estaba lleno de adolescentes tratando de poner decoraciones navideñas en el árbol al estilo muggle.

Era víspera de navidad y los Black habían invitado a sus nuevos amigos a pasar la cena en su casa. James, Remus, Peter y Olivia habían llegado un día antes y ahora se dedicaban a ayudar con las preparaciones.

Era la primer navidad de Orion y Walburga, no conocían esas tradiciones, pero Sirius les contó que era igual de divertido que el Yule, también les contó que los Pettigrew y los Lupin conocían muchos juegos que se hacían antes de cenar.

Orion estaba encantado con esta nueva celebración, había puesto su álbum navideño de Frank Sinatra y de fondo sonaba Santa Claus is Comin' to Town, siempre quiso saber quién era Santa Claus y ahora gracias a Olivia sabia que era un viejo regordete que le llevaba regalos a los niños en navidad, se preguntaba por qué nunca le habían enseñado de ese sujeto es sus clases de historia de la magia, ya que claramente era un mago viajando por Red Flu.