Tiker & Tosk: Los Vigias

Capitulo I: Entre humo y llamas

Comenzó como una pequeña secta en un país llamado Vezeon pero luego fue tomando más poder. Entre más personas se unían al profeta, más grande se hizo el problema.

Los políticos que Se opusieron a ellos poco a poco fueron formando parte de "los Vigías".

Pasaron los años y "los vigías" tomaron tanto poder, que provocaron un golpe de estado a los Gobernantes de Vezeon, y tras muchas muertes, tomaron el control total del país. Aquellos pocos que lograron escapar, serían los portadores de malas noticias.

"Los vigías" no solo querían tomar el país, su verdadero objetivo era expandir sus Creencias a todas las tierras a las cuales le pudieran Echar mano.

De su poder aquellas naciones y países pequeños fueron dominadas por completo, ya nadie se oponía a su Profeta...o eso es lo que ellos creían.

Jamás esperarían que un pequeño Descuido, les causaría tan fuertes dolores de cabeza...nuestras salvadoras *

Infierno, eso es lo que definiría la situación de este pueblo. Al pie de la colina se hallaban escombros y cenizas de los hogares de sus habitantes y en lo que antes eran pacíficas calles, cuerpos incinerados, gritos desesperación que fueron provocados por lo que habitantes denominaron "Demonios con Túnica".

En un dojo que estaba al lado del camino que dirigía a la cima de la colina, la última resistencia del pueblo para salvar lo que quedaba de sus familias: Los Espadachines Mandalare. Un grupo Formado por La Familia Mandelare y Todo Aquel que Poseyera el Poder del Mantra o quisiera seguir el camino de la espada.

¡Que no Pase Ninguno de esos Demonios, debemos aguantar hasta que todos puedan evacuar! - Grito Aquel Hombre Fornido mientras empuñaba su espada-

-Ninguno de ustedes podrá huir, los Herejes deben ser exterminados para cumplir la meta del profeta~ -respondió el Hombre Frente a él, Entonando sus palabras como si de una plegaria de tratase- Su existencia solo es un estorbo para aquellos que llevamos palabras de paz~

¡Tch!...¡¿De qué paz hablas? Ustedes Demonios solo Predican Dolor y Muerte; En Nombre de la familia Mandelare Acabare contigo

Apuntando su espada se dirige hacia el para darle una estocada, pero... No lo toco aunque él no se hubiera movido ni un centímetro, él fue atravesado pero no tenía un rasguño en sus ropas.

-Es imposible que tu...

- Tu muerte Traerá Paz al mundo~

Debajo de su túnica saco unos tubos que al unirlos hacían un bastón con Grabado extraños en él, acto seguido, Dio un salto y haciendo rápido moviendo hacia abajo con su bastón buscaba golpear la cabeza de su enemigo. Mandelare aun estando de espaldas todo sobre su hombro esquivando el golpe.

El suelo donde golpeó se agrieto, si no hubiera esquivado ese golpe, es probable que no estuviera respirando.

Observando a su oponente se dio cuenta que no podía vencerlo, por lo menos no en la situación en que se encontraba, aún faltaban personas para evacuar y aún más importante, sus hijas aún no estaban fuera de peligro.

Con una expresión de Amargura un el rostro, volvió a su posición de ataque y con el mismo movimiento arremetió contra el hombre, pero el resultado no cambio, lo volvió a atravesar sin hacerle un rasguño. Sin embargo él ya sabía que no podía cortarlo, el movimiento era solo una fachada para el poder escapar y dirigirse al Dijo donde esperaban los Espadachines que aún podían luchar y su familia.

--¡Toge! - Exclamó Al abrir las puertas del dojo- necesito que me hagas un último Favor: Quiero que Te lleves a mi esposa y Mis Hijas a la almenara en la cima de la colina, apagar la almenara y esconderlas en el sótano secreto que está debajo de él; Tú conoces la entrada.

-Yo No Iré

Respondió una Mujer, que tomaba de la mano a 2 pequeñas niñas.

- ¡¿Que estás Diciendo Mujer?! Ya no podemos Resistir más, Tenemos a Un Los 5 Ojos aquí mismo.

-No Me importa, Si he de Morir, Moriré Contigo. Toge, Cuídalas, Protégelas y enséñales; Tú serás su Maestro, confiamos en que tú la llevarás por el camino del Guerrero de la luz.

-S-si señora, lo prometo, las Cuidare como ustedes lo hicieron conmigo y les enseñaré como ustedes lo hicieron

-Mama, no entiendo, ¿saldrás?

Dijo una De las Pequeñas mirándola a los ojos.

- Si, Lo haré

- ¿y cuando Volverás, Nos traerás algo dulce?

-No, no les traer dulces

- Escuchen niñas, esto es muy importante.

Agachándose y lágrimas en los ojos las tomo de las manos y acaricio el rostro de una de ellas.

-A partir de hoy estarán con Toge, obedezcan a los que él les ordene, no sean groseras y coman de todo, nada de comer Dulces antes de dormir y siempre mantengan una sonrisa en sus rostros, es lo más poderoso que ustedes poseen. Prométanme que Serán Felices.

-Te lo prometemos Mamá, Pero cuando vuelves?

-No volveré, Mamá Hará un largo Viaje con Papá.

-A Donde Van?

-No se lo podemos decir, Pero les Prometo algo, Cuando llegué su momento De ir al mismo lugar que nosotros, las esperare con su comida Favorita.

-Está Bien Mami, Cuídate Mucho, no enfermes.

Las Lágrimas Brotaron de sus Ojos y La abrazo con fuerza, como si nunca quisiera Soltarlas.

-Niñas, Les Daré un Regalo, con esto siempre estaremos con ustedes, donde sea que se encuentren nunca estarán solas.

Del suelo toma su espada y se la da a una de ellas

-Tosk, Te Doy mi Nodachi, empúñala con Firmeza. Su filo es como el agua, Fluye con ligereza y gracia aunque con furia puede ser agresiva como un torrente, todo dependerá de lo filosa que sea tu mente.

Su Padre, se acerca lentamente, Toma de su cinturón, toma su espada y de rodillas se la ofrece a otra pequeña.

-Tiker, Te Ofrezco mi Katana, Pórtala con Orgullo, El viento tan veloz y raudo, a veces una brisa fresca que tan siquiera lo notas pero Cuando ruge significa peligro. Tu Agilidad será la clave para vencer sin siquiera ser vista.

Las niñas tomaron aquellas armas sin siquiera entender el significado de las palabras de sus padres, y antes de decir una palabra, un abrazo cálido pero con un sentimiento de pesar que lleno todo el dojo.

-Tiker y tosk, Hijas Mías, Las Amamos Más Que a Cualquier cosa en nuestra vida, sigan el camino de la luz, esa será la única manera de encontrar sus libertad. Siempre estaremos con ustedes.

Y con un beso en la frente, fueron entregadas al joven Toge, que antes de Irse, hizo una reverencia ante sus maestros en señal del profundo agradecimiento que les tenía.

-Cuídalas Bien Toge, eres al único al que le podíamos confiar esta tarea, También te amamos Toge "El Joven Maestro"

-Adiós

El joven Vio Por última vez a sus Maestros y antes de que un las lágrimas Corrieran por sus mejillas, tomo a las pequeñas y partió del dojo dejando atrás a los que ya algún tiempo considero sus padres.

-No entiendo Porque te quedaste a morir, Nuestras hijas necesitan del amor que solo tú le puedes dar. Se enojaran cuando tengan la edad para entender que pudiste haber escapado junto con ellas.

-cierto que llegara la edad en la que piensen que pude escapar y no lo hice, pero, también le llegará la edad en la que comprendan la Razón por la que me quedé.

- ¿Y cuál es esa razón? aquella que es tan importante para Morir por ella.

- Cuando me Enamoré Le prometí a mi esposo, que estaría junto a él en las buenas y malas, descanso y en el trabajo, en la salud y en la enfermedad y...en la vida y en la Muerte.

Lo toma del brazo y Coloca la cabeza en su pecho.

-Me Haces Feliz En cada momento desde que nos casamos incluso antes de morir me haces sentir el hombre más afortunado, es un Honor Que tú seas Mi esposa.

- Y yo estoy Orgullosa de que tú sea el mío. Entonces, que tal si hacemos de Nuestra Última Noche La Más Emocionante de todas

Tomando las espadas que aún quedaban, salieron del dojo, tomando de la mano y se dirigieron a enfrentarse a las llamas, incluso a la muerte, como lo habían prometido en el momento de sus Votos.

-Bendecidos aquellos que encuentran el amor, porque ellos consiguieron la paz en su corazón~

Se escuchó una voz detrás de las llamas que entonaba alegremente sus palabras.

-Aun no te has Largado de aquí, Maldito bastardo.

-Así que ese es el "Ojo" que mencionaste antes.

-Soy El Predicador~, he malgastado mucho tiempo en eliminar basuras paganas~

- Serás un Buen Calentamiento, Bastardo Cantor

- No pueden tocarme, porque yo he sido bendecido por aquel que traerá dicha al mundo~

-Querido, demostremos el Poder de la Familia Mandelare

-Entonces ustedes aún piensan oponerse~

Sin esperar, desenfundaron sus espadas, sus ataques eran tan rápido que el predicador no tuvo tiempo de Sacar su Báculo, pero de nuevo las espadas no pudieron alcanzarlo.

-A esto te referías...

-Así es, No podemos Atacarlo directamente, aún no tengo ningún plan pero debemos entretenerlo para que no alcance a los que están huyendo.

-No Huirán, Ningún Hereje saldrá Con vida~

Balanceando su Báculo Tomo una posición ofensiva, tenía la intención de terminar rápido el combate. Salto en medio de ellos y con un giro golpeó a ambos enviándolos lejos.

Se levantaron rápidamente, ninguno de los dos sufrió daños severos, volvieron a sus posiciones de combate y de nuevo oscilaron su espada

-Sweet Water
-Stocade

Dos ataques simultáneos, ella dio un pequeño salto Y con un Grácil Giro tomo velocidad Y fuerza para Cortar El cuello. El inclino su cuerpo y puso su espada frente poniendo una de sus manos en el borde de la empuñadura se dispuso a atravesar el torso de su oponente, dañando así sus órganos internos.

Pero su ataque volvió a Fallar, El predicador se volvió Intocable justo antes de que el filo de sus espadas rozará su piel y luego de que fue atravesado, golpeó a hacia abajo a aquel que intento darle una estocada pero la mujer no detuvo su ataque y e. Medio del aire volvió a oscilar su espada contra él y este no tuvo más opciones que bloquear el ataque con el bastón y retroceder.

¡Eso es! - dijo en su cabeza y miro al su esposo que estaba de rodillas en el suelo, con su cabeza sangrando. Sus miradas se cruzaron y al instante, sin palabras entendieron lo que el otro pensaba.

La mujer salió corriendo de la batalla como si estuviera huyendo.

-No Me des la espalda~

Corrió hacia ella, era tan veloz que en los ojos de la mujer se veía sorpresa y luego de un sonido de acero chocando esa expresión de sorpresa cambio a una sonrisa pícara.

-Los mismo digo, no me des la espalda

Empujo su enemigo hacia atrás luego del choque de acero con una patada. Sabía que debido a su poder no podría siquiera hacerle un rasguño, por eso hacer tiempo.

-Siquiera quien eres, no es que me importe, pero es mi deber notificar a tu líder cuando te mate.

- Mi nombre es Vledas y soy La Voz Del Profeta Banastor, Aquel Que Habla Directamente con Dios~

-Y porque están aquí haciendo esto, acaso tu Dios permite genocidios, sí que es un dios que busca la Paz en el mundo

- Este es la última tierra que alberga a Herejes y paganos, de aquellos que no pueden sentir al dios de la paz y solo ensucian estás tierras y mi deber como la Voz de aquel que recibe Órdenes divinas es llevar el mensaje a cada rincón está tierra

- Pues aquí no son bienvenidos Locos Homicidas, así que si aún quieres seguir moviendo esa Boca tuya será mejor que te largues.

-Ahora Hazlo!

Inmediatamente al escuchar la orden, el Hombre Respiro Profundo, Corto a la nada y cuando exhaló dijo -Vendaval- Una serie de Cortes Viento se dirijo hacia su enemigo, uno de ellos Corta do Su Hombro Derecho.

-AGGH!

Dijo con una expresión de dolor en su rostro. Pero aún no cesaban los ataques, Por Encima de él Caían Dos Cubetas con agua que luego se transformaron el la figura de aquella mujer que había escapado.

Inmediatamente se volvió intangible para esquivar el corte que probablemente lo llevaría a la muerte, cuando la mujer lo atravesó y cayó al suelo, Giro su Bastón y La golpeó en la espalda pero la mujer se volvió a Convertir en Agua y formó un charco en el Suelo.

-Salad Water: Oleage-

En un instante fue atravesado, su Brazo Derecho Fue cercenado Con un Corte Limpio.

Antes de ceder al Dolor Dio un Bastonazo Con Irá a la Mujer Enviándola Con fuerza Lejos Atravesado las una Casa que allí se encontraba.

-YUU!

Grito Mandelare Corriendo hacia donde Terminó aquella Mujer.

-¡Yuu, Respóndeme vamos! Di algo, lo que sea.

Tomándola en sus brazos, noto que de su boca salía mucha Sangre, Y también tenía Un Moretón muy Grande en lado derecho de su Torso. Se podía ver qué muchas de sus costillas se rompieron, cortando así sus pulmones y órganos.

-No Yuu, Si tan solo hubiese sido más rápido...

La mujer puso la mano en su mejilla, y lo miro con ojos Compasivos, con su mirada le dijo que estaba bien, que él no tenía la culpa.

-Te Amo...

-Yo también Te Amo...

La mano cayó sin fuerzas, Y el hombre dejo con delicadeza el cuerpo de la mujer en el suelo, y coloco la espada sobre su pecho.

-¡AAAAAHHHHH QUE HUMILLACIÓN, SOLDADOS ACABEN CON ELLOS, SI FALLEN YO MISMO ACABARE CON USTEDES!~

En un instante Una Horda de solados Con túnica Rodeo Al hombre, apuntando sus armas contra el

-Espérame Yuu...Voy detrás De ti, Estilo De viento: TORNADO!

Desenfundo su espada y dando un corte circula Los vientos se alzaron cortando y enviando a los soldados Cercanos al Aire.

Eso, es lo último Que Pudo Ver Toge Desde la Colina, Como Sus Maestros Luchaban a Muerte, Y el no le fallaría.

Ya faltaba Poco Camino Para llegar A la Cima de la colina donde se hallaba la Almenara, el lugar seguro. Cargando en la espalda a Tiker Y a Tosk en Brazos Corrió con todas sus fuerzas para llegar.

Una Vez Estando Arriba, Abrió La Puerta De La almenara con un golpe, se dirigió a una de las habitaciones, donde había Leña y Cajones, arrastró El estante más alto o y pesado que se hallaba en la habitación, Detrás se encontraba un Trampilla con la que se podía acceder al Sótano secreto, que era conocido solo por la familias fundadoras del pueblo.

Bajo las escaleras, Dentro de encontraban Recursos, como Comida de reserva, frutos, armamento y camas. Aquel lugar se había estado abasteciendo regularmente desde la noticia de que Un grupo estaba Invadiendo tierras adyacentes.

-Está Bien, Llegamos, quédense aquí, y no hagan ningún ruido, ya vuelvo. Pueden dormir y comer algo si desean solo no haga ruido.

- Sí señor

Respondieron las pequeñas al Unísono.

A continuación el chico subió las escaleras de nuevo, cerró la escotilla y movió el estante a su posición inicial para cubrir la entrada.

Comenzó a subir rápidamente los pisos para llegar a la torre donde la almenara ardía, iluminando todo el pueblo.

Cuando llegó arriba y se asomó, sus ojos no podían creer lo que habían visto. Todos los que intentaban escapar por detrás de la colina se encontraban rodeados por Soldados de los vigías Y estaban siendo masacrados rápidamente hasta que ninguno quedase con vida.

Se quedó sin aliento, no sabía que decir, no sabía que pensar, la tristeza se apoderó de él pero aún no podía llorar, tenía que terminar el trabajo que le habían encomendado.

Dando un gran salto tomo una Cadena y usando todo el peso de su cuerpo la Jalo hacia abajo, se abrió una escotilla dando paso a que una cantidad enorme de agua cayera sobre el fuego ardiente apagándolo inmediatamente.

Lentamente y caminando como un zombi, se dirigió al refugio donde se encontraban las pequeñas. Arrastro el Estante y desde adentro lo volvió a colocar en su lugar tapando la entrada, Bajo las escaleras y observo en una esquina a las pequeñas que parecían estar temblando del miedo.

Tomo una Manta y las cubrió a ambas.

Tranquila, yo las protegeré a partir de ahora. Duerma, seguro están cansadas.

Luego de que se quedarán dormidas, él se acostó, miro al cielo y dijo.

-Maestro... ¿Qué hago ahora?...