El primer pride.

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Daba miedo.

Sirius se estaba arreglando frente al espejo y aunque primero había pensado en usar un atuendo llamativo, algo exagerado que gritara "soy un maldito queer", al final había optado por su ropa de diario, porque, joder, él era gay todos los días del año y al diablo. Se puso su camiseta de los Rolling, unos jeans gastados, sus botas más rudas y la clásica chaqueta de cuero que siempre terminaba por hacer un look completo, como decía Lily.

Remus también estaba usando su ropa normal, nada extravagante. Se veía hermoso como sólo él sabía hacerlo y el pensamiento de esto le hizo sentir más valiente que nunca, dispuesto a ir a esa marcha para todos los raritos como ellos. Sus miradas chocaron en el espejo y recibió una sonrisa tímida que regresó con ánimos cargados de energía.

— ¿Listo? Creo que deje los carteles en la encimera. — Dijo el hombre lobo, acomodando el cuello de su camiseta por fuera de su suéter. Sus manos se veían algo temblorosas, quizás estaba nervioso y no podía culparlo, pero ellos eran magos y si algo salía mal, siempre podrían lanzar un par de maldiciones.

— Yup, listo. ¿Estos jeans me hacen ver gordo, cariño? — Contestó de forma bromista y cuando logró sacarle una risita, se sintió mejor. No estaban haciendo nada malo, sólo una marcha pacífica para visibilizar que ellos existían.

— Tu trasero se ve precioso. — Respondió de vuelta lanzándole un beso de forma exagerado y lo hizo carcajear mientras salían del cuarto y se dirigían al pasillo para partir.

Estaban listos para irse cuando de su chimenea, apareció la cabeza de James.

— ¡Chicos! ¿Están ocupados ahora? Es que... — Se escuchaba emocionado, pero se vio interrumpido por la voz de Lily, aunque no pudieron escuchar qué dijo. — No, no, es ahora porque después ya no tendrá caso.

— Mmm, ¿Prongs? Ya estamos de salida para llegar al punto donde sale la manifestación. — Dijo Remus mirando con curiosidad las llamas, entonces la atención de James regresó a ellos.

— ¿Podrían pasarse por aquí un momento? Lily dice que vengan después de la marcha, pero estoy seguro de que les gustará y- Oh, maldición, creo que use de la pintura tóxica. — Hubo silencio de nuevo y entonces Sirius decidió que James se había esforzado para algo y debían ir aunque fuera unos segundos, Remus estuvo de acuerdo y dos minutos más tarde ya estaban saliendo de la chimenea de los Potter, sacudiendo el hollín que se había pegado a su ropa.

Sin embargo, la imagen frente a ellos les hizo quedar estáticos y Sirius estalló en una carcajada estridente que contagió a Remus.

Delante de ellos estaba James, Lily y Harry -incluso el gato- con el rostro pintado de arcoíris. Era ridículamente encantador.

— ¡Sorpresa! — Gritó la pelirroja acercándose a ambos, abrazándolos con fuerza cuando llegó a ellos. — Hoy es un día especial para ustedes y lo sabes y queríamos que supieran que los apoyamos en esto, aunque espero que esto no sea una ofensa, le dije a James que sí esto los molestaba podemos quitarlo de inmediato y bueno... — Parecía tan parlanchina como siempre, algo nerviosa pero sin duda se notaba que habían hecho eso con la mejor de las intenciones, al igual que Prongs. Si no hubieran estado tan divertidos con la situación, probablemente se habrían puesto sentimentales por la excelente familia que tenían. — Harry guardó pintura para ustedes, si quieren.

Harry estaba riéndose por su reflejo y por el gato, lo que sólo les hizo sentir más ternura. Se quedaron media hora más, lo suficiente para que Remus le explicara a Lily la importancia de ir a la marcha para apoyar a aquellos mineros y para que James pintara una bandera de arcoíris en el torso de Sirius con el nombre de Moony escrito en él.

— Estamos orgullosos... muy orgullosos de ustedes. — Le dijo James con firmeza. Sirius no lo dijo, pero verlo así le recordó a la difunta Euphemia Potter, quien siempre hablaba con un toque maternal. — Son muy valientes y Lily, Harry y yo los admiramos por ello.

Hubo una ronda de abrazos afectivos y entonces Remus y Sirius se aparecieron cerca del inicio de la marcha, listos para gritar al mundo lo que eran. Gritar al mundo que estaban orgullosos de amar al otro.

- Fin. -

Tengo la loca idea de que ellos fueron al "pride" del 84, que en ese momento fue una marcha llamada "lesbians and gays support the miners" y se dio en varios puntos del Reino Unido, pero principalmente en Londres se juntó mucha gente, so, era algo importante para ellos y no puedo evitar pensar que James habría querido apoyarlos y pues eso.

Esta es la primera idea que me nació, esperen el resto.

~A married life~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora