Capítulo 5

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Ya ha pasado una semana desde la visita del señor Jones, durante esa semana mi vida se baso en el trabajo, la escuela y alguna que otra reprimenda en el cobertizo.

Ahora mismo me encuentro en la cafetería horneado para evita que la gente me vea, ayer en la noche mi madre me dio una fuerte cachetada por no hacer la cena a tiempo, si me alcanzó a dejar marca pero con un poco de maquillaje logre medio cubrírla.

Mientras termino de llenar unos moldes con la mezcla del pastel escucho la televisión que está por un lado.

En otras noticias; La familia Montenegro está de luto, hoy hace 13 años se les fue arrebatada a la menor de los Montenegro, Karla Montenegro. Hasta la fecha la investigación sobre el secuestro sigue abierta pero sin resultado alguno, cómo cada año, amigos, familiares y vecinos se reúnen en templos y parques, donde hacen altares y plegarias para que la menor sea encontrada.

Cambio de canal, ese tipo de noticias me ponen realmente triste, no puedo imaginar lo duro que ha de ser el que te quiten a un hijo, mis más sinceras condolencias para la familia.

-Alessa cariño- me llama la señora Ofelia desde la barra -tenemos un pedido a domicilio, ¿Crees qué puedas entregarlo?- a pesar de ser cafetería también hacemos pasteles para fiestas, originalmente haciamos postres para acompañar las bebidas, pero al ir aumentando la demanda de estos comenzamos a hacer para venta individual

-Claro- acepte sin pensarlo mucho ya que la señora Ofelia ya está grande para andar caminando con un pastel de aquí para allá.

-No hay pierde- comenzó a decir mientras me pasaba el pastel y la nota- sales y caminas a la izquierda, son como dos cuadras hasta llegar a la estación de bomberos- decía mientras me hacía un "croquis" al reverso de la nota -de la estación das vuelta a la izquierda y te sigues recto una cuadra, luego vuelta a la derecha y al final la calle deberá topar con un parque pequeño, pasas el parque y te metes en la calle donde está la casa amarilla, de esa a dos casa, la de color azul rey.

Asenti con la cabeza y me encaminó a mi nueva a misión, en este momento agradezco haber prestado algo de atención porque el croquis dibujado más bien parece una serpiente sin rumbo.

Antes de girar en la estación de bomberos me detengo junto a un pequeño grupo de personas, han de ser 15 cuando mucho.

Cuando sigo sus miradas me topo con lo que parece ser un tablón de anuncios, éste está lleno de ofertas de trabajo y fotos de perros extraviados, pero lo que más resalta ahora es la foto de una niña.

No ha de tener más de 5 años, es realmente hermosa, su cabello es castaño y tiene unos bonitos ojos café, abajo de ella hay una frase que dice "Ayúdame a volver a casa. Karla Montenegro". Así que esa es a niña de las noticias....

Después de casi 10 minutos de caminata llegó al parque que mencionó la señora Ofelia, cabe decir que parece más un baldío, al pasar por el notó que justo a unos metros de mi hay un grupo de chicos, nunca he sido fan de juzgar a la gente, pero estos en serio parecen sacados de una banda de cholos, están totalmente llenos de tatuajes y cadenas, aparte de que parecen estar más que fumados.

Con los nervios a todo dar y en estado de alerta sigo mi curso, evitó a toda costa hacer contacto visual al pasar junto a ellos.

-¡EY TÚ!- Virgen Santísima -¡MUÑEQUITA TE ESTOY HABLANDO- no manches, sólo ignoralos, haste wey.

Él que parece ser el líder al ver que no volteó comienza a caminar hacia mi.

Dios por favor, iré a misa el domingo sólo te pido que se vaya....
No voltees, no lo mires y no corras. No voltees, no lo mires y no corras. No voltees, no lo mires y no corras.

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