EL PODER DE CREER EN TI (Editando)

Capítulo IV (IV)

Ana pov.

Sentirla en mis brazos como temblaba con cada llanto que soltaba me hacía sentir la necesidad de no soltarla, de no dejarla, ella tocó fondo que se sentía tan frágil, su delgado cuerpo encajaba bien con el mío, así que recargue mi mejilla en su cabeza y mis fosas nasales olieron ese shampoo de fragancias naturales y frescos.

---- Lo siento mucho Ale.- No obtuve respuesta de parte de ella solo me abrazó aún más fuerte, como si buscará un refugio en mi y yo se lo daba, la abrazaba aún más fuerte para que ella no se sintiese sola y que supiera que yo no la podría defraudar, que ella sintiera la confianza de contar conmigo.

---- Ale.- Escuchamos un pequeña voz que hizo que nos separara, la hermana de Ale estaba parada a un lado de nosotras con los ojos semi abiertos, Ale se limpio las lagrimas y se acercó a ella tomándola en brazos.---- Por qué lloras?.- Pregunta la pequeña mientras se acomodaba en los brazos de Ale.

---- Por nada, mejor duerme.- Alejandra se levantó de la banca y en seguido volteo a verme.

---- Iré a dejarla a su cuarto ya vengo.

---- Ale, creo que tengo que irme.- Dije mientras ella caminaba lentamente a la entrada.

---- Esperame.- Dijo la pelinegra para dirigirse a la sala principal.

Fui por mi mochila sacando el celular, porque en todo el día no lo había utilizado, me tomé una foto y lo subí a mis historias de Instagram sin ninguna descripción solo la foto.

Me levanté del sofá y me dirigí a la pared en donde se mostraban las fotos de graduación de las escuelas que han estado, de sus papás, de su hermano y claro de ella, solo faltaría la graduación Universitaria de Ale, comencé a caminar y mire todos esos reconocimientos, esas diplomas de la familia. En el otro extremo había unas repisas de cristal en donde se posaban diversas cosas de colección como pequeños juguetes que la verdad desconozco, en la repisa de abajo se mostraban fotografías enmarcadas en vidrio con orillas blancas o negras, fotos en donde la familia estaba junta, fotos en donde se puede apreciar que era el matrimonio de sus papás y en una de muchas me llamó especialmente la atención, una foto de Ale, en donde se mostraba que ella estaba en un escenario, llevaba puesto su vestuario de bailarín y se miraba concentrada, en la postura en la que estaba era de valer para tomar la foto en esa preciso momento. Mire hacia las escaleras para ver si no estaba ella y fui a mi mochila sacando mi cámara, en seguida les tomé fotos tanto a los diplomas de baile y a ella.
Escuché una puerta y apagué rápido la cámara comenzando a guardarla en mi mochila.

---- Ana, tus papás se enojarian si te quedas esta noche? digo porque ya es muy tarde.

---- Ale, se enojen o no me tengo que ir, tengo cosas que hacer mañana temprano y no quiero estar a la carreras.

---- Esta bien, te pido el Uber.

Alejandra pidió el Uber y en cinco minutos el auto ya estaba afuera esperando, agarré mis cosas y me despedí de Ale.

---- Gracias Ale.

---- De qué?

---- Tonta, pues de todo, del celular, de la ropa y de tu confianza.

---- Si.- Sonríe muy tiernamente.

Me acerqué a ella y la abracé.

---- Me mandas mensaje cuando llegues a tu casa y espero no se enojen tus papás.

---- Si, yo te mando mensaje.- Caminé al Uber y subí en la parte trasera, saludé al chófer y en seguida puso en marcha el carro.

Llegué a mi casa sana y salva después de quince minutos, Cobby corrió hacia mi en cuanto entré al hogar, saludé a mi perro con mucho entusiasmo, con cariñitos y besos, le di de comer y me senté en el sofá mirando a mi alrededor.