Capítulo IX (II)

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Alejandra pov.

Cuando recibí la llamada de Ana en la madrugada sentí un pequeño golpe en mi pecho, porque la llamadas en la madrugada eran un martirio de malas noticias, pero ella estaba bien, en cierto sentido, así que fui por ella acompañada de mi hermano, ese momento la madrugada estaba lluvioso, pero la lluvia era bastante fuerte que cuando la vi, ella estaba empapada con sus ojos rojos de tanto llorar, porque cuando me vio se lanzó a mis brazos comenzando apretar mi cuerpo y llorando con dolor, le pregunté que era lo que tenía pero no contestaba porque sus sollozos no la dejaban, así que la lleve a al auto y Nestor condujo a la casa, cuando llegamos llevé a Ana conmigo a mi cuarto prestándole una toalla y algo de ropa.

Me quedé esperando sentada en la orilla de mi cama mientras ella se bañaba, mis dudas eran bastantes y muchas preguntas quería hacerle pero no sabía si era buena idea preguntarle que era lo que pasaba o simplemente esperar que ella sola me dijera lo que había pasado ese momento. En seguida Ana salió ya cambiada con la ropa que le había prestado, su cabello estaba suelto y alborotado, sus ojos se miraban tristes y caídos mientras mostraba una ligera sonrisa.

---- Ven... Te cepillo el cabello.- Ella se acercó sentándose en la cama, agarró la pequeña sabana que tenía ahí y con ella se cubrió las piernas, comencé acomodar su cabello y a cepillarlo. El silencio entre nosotras no era incómodo, sabía que ella estaba mal y muchas de las veces necesitamos estar en paz sin que nos cuestionen. Después de cepillar su cabello nos recostados en la cama y puse Netflix para ver Toy Story.

---- Quieres palomitas o algo de comer? De comida te puedo ofrecer cereal, no sé cocinar.- Le dije a la castaña lo cual ella sonrió.

---- Dame cereal.

---- Bien, deja voy. - Me levanté y caminé hacia las escaleras bajando en ellas, caminé hasta el comedor buscando en la alacena el cereal, saqué la caja sirviendo un poco en ambos platos y después servir un poco de leche.

---- Ale.- Escuché la voz de la chica que caminaba lentamente a mi pero de una manera tierna.

---- Ana... Ya llevaba los platos solo era unos minutos.- Dije en el momento que la chica me tomo de la cintura acercándome a ella.

---- Ale, me gustas... De verdad me gustas...- Dijo entre un susurro, se acercó más a mí para unir nuestros labios, sus manos las llevó a mis muslos haciendo que subiera en ella lo cual la chica me sentó en la mesa.

---- No... No Ana...- Dije para separarla de mi y bajarme de la mesa.

---- Chiqui...

---- Ana, no por favor.- Le di su plato cereal y fui a la escaleras pensando en lo que había pasado hace un momento, llegué a la habitación para recostarme en la cama tapando mis piernas.

(...)

Me desperté y vi la hora que eran las siete de la mañana, noté a Ana aún dormida que se mostraba en una posición de lado hacia a mí, me levante de la cama estirandome con un bostezo acompañado, caminé hacia el baño para comenzar a llenar la tina y quitarme la ropa poco a poco hasta quedar desnuda. Al ingresarme dentro del agua comencé a tranquilizarme un poco, sintiendo los músculos relajarse.

Escuché la puerta abrirce y observe como la chica castaña entraba.

---- Ana... Qué - qué haces aquí?.- Dije mientras me tapaba con mis manos. No obtuve respuesta de la chica y se acercó a mí quedando en cuclillas, acercó su rostro comenzando a sentir nuestra respiración, la tensión entre nosotras eran grandes, rozabamos nuestros labios e igual que nuestras narices hasta llegar al punto de unir nuestros labios.
Duramos varios segundos así hasta que ella se separó levantándose del suelo y quitándose la ropa mostrándose en ropa interior, la chica comenzó a ingresarse al agua poco a poco y a sentarse lentamente mente, yo solo la miraba sorprendida por verla en estas condiciones, sus manos fueron rápidas que me jalaron quedando sentada sobre ella comenzando a besarnos.

---- Ale!.- Escuché la voz y desperté ante ese llamado, pues me había quedado dormida.

---- Si... Ya voy a salir.- Dije para levantarme y secarme, me puse mi bata para pasar a la otra habitación donde era mi armario comenzando a cambiarme.

Al salir ya cambiada Ana estaba ya arreglada con un pans y playera que le había prestado.

---- No quiero ir a la escuela.- Dice la castaña.

---- Por qué? Tenemos que ir, es el último día.

---- Pues precisamente no quiero ir, casi nadie va a la escuela, nada más los que ya se van.

---- Ana...

---- Ale... A que hacer otra cosa, no creo que te regañen.

---- No no creo que me regañen pero... No quiero faltar aun que sea el último día de clase.

---- Ay Ale... - Comenzó hacer un puchero.

---- Esta bien... Pero que quieres hacer?.

---- No se, tu di.- Tengo libre hasta el Lunes porque el Martes comenzaré a trabajar.

---- Ok... Vamos a la finca.- Ella sonrió y bajamos al comedor para pode pedirle permiso a mi mamá.

---- Oye mamá.- Le hablé a mi madre que se mostraba de una manera formal.

---- Dime hija.-

---- Quería pedirte permiso para este fin de semana...

---- Dime de qué se trata y veré si te daré permiso.

---- Pues... Quería pedirte si... me prestabas un ratito la finca este fin de semana hasta el Lunes.

---- Por qué o qué, con quién?.

---- Pues quería ir con Ana, quiero enseñarle un poco más de tu trabajo, quizá... Le puedo enseñar a cultivar... Básicamente llevarla al campo.- Dije aventando ese chorote para que ella tuviera esa insinuación de que puede alear a Ana a todo esto del Vino.

---- Me parece una maravillosa idea, sirve que me checas con este Ángel sobre los envíos a New York.

---- Está bien, ya se como se maneja todo eso, tu no te preocupes que yo me haré cargo, te haré llegar el resultado y todo el movimiento que se está realizando por allá.

---- Muy bien Ale... Entonces a que hora y cómo se van a ir?.

---- Pues queríamos irnos ya y el otro era el favor... Que si le puedes decir a Nico que si nos lleva en helicóptero.- Dije sonriente tratando nuevamente convencerla y ella dijo que si.

---- ¡Yo quelo ir!.- Escuhe la apeticion de mi hermana pero de inmediato negué.---- Hay por qué no?.

---- Por qué iré por el trabajo de mamá.

La niña dejó de insistir y en seguida me fui con Ana a su casa para que ella pudiera empacar y llevar a Cobby a la casa de Gladys para que pudiera cuidarlo en todo el fin de semana.

Agarramos un Uber dirigiendonos a despacho de mi padre, el edificio era inmensamente grande y tuvimos que subir al último piso para poder subirnos al helicóptero. Ana se miraba contenta y un poco nerviosa porque era la primera vez que ella iba viajar de esta manera.
Nico fue tan amable que nos llevó a la finca de mi madre, desde las alturas podíamos apreciar el terreno inmensamente grande, la finca de un lado y del otro el campo la empresa donde se hacía el vino. Al estacionarnos nuestro mayordomo nos recibió muy sonriente y cargando nuestro equipaje, nos fuimos directamente a la casa en donde la señora encargada del aseo y de la comida nos esperaba con una delicia, nosotras por obvias razones decidimos comer.

PLEBES YO SÉ QUE NO ES LARGO Y SIENTO QUE TAMPOCO LO HICE INTERESANTE PERO CADA VEZ QUE ME INSPIRABA, MI FAMILIA ME INTERRUMPÍA Y PUES PERDÍA AL MOMENTO ESA INSPIRACIÓN.

OTRA COSA MÁS QUE LES QUERÍA COMENTAR, ES DE QUE ME HACEN REALMENTE FELIZ SABER QUE HAY PERSONITAS QUE REALMENTE LES ESTÁ GUSTANDO ESTÁ HISTORIA, JAMÁS PENSÉ RECIBIR COMENTARIOS DE QUE LES HA GUSTADO, DE QUE SIGA ACTUALIZANDO ETC. ETC. ESO ME INSPIRAN AÚN MÁS PARA SEGUIR CON ESTÁ HISTORIA.

LES AGRADEZCO MUCHO POR ESTE LINDO APOYO. ❤️✨

A LO MEJOR EL DÍA DE HOY (PORQUE YA ES MIÉRCOLES) VAYA HABER DOBLE CAPÍTULO, POR QUÉ? PORQUE REALMENTE LO HAGO POR USTEDES PORQUE SÉ QUE AVECES LOS DEJO INTRIGADOS, ALGO QUE A MI ME SOLÍA PASAR CUANDO TAMBIÉN ERA LECTORA. ENTONCES SIN MÁS CHINGADERAS!!!! NOS LEEMOS EN LOS PRÓXIMOS CAPÍTULOS. ✨💥🌈

EL PODER DE CREER EN TI (Editando) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora