• V E I N T I T R E S • 𝑓 𝑖 𝑛 𝑎 𝑙 •

72 4 0
                                    

Regresé al instituto la semana pasada, ésto ha sido mejor porque Hoseok está conmigo, Yoongi sigue sin aprobar mi relación con él, Jisoo y Nam se empezaron a conocer más y ahora están saliendo. Jimin, para ser sincera no e sabido nada de él desde que de fué a Busan.

En éste momento estoy en mi última clase, la clase es biología, no me aburre, pero ya quiero que sea la salida para ver a mi novio Hoseok, eso se escucha tan lindo, pensar que hace unas semanas lo acosaba y ahora es mi novio, es él motivo de mi felicidad.

La clase terminó, junté mis cosas y las metí en mi mochila, me la colgué en el hombro y salí feliz del salón, a Hoseok lo veo en la entrada de la escuela últimamente, así que ésta vez no fué la esepción, a lo lejos lo ví parado viéndome con una sonrisa en su rostro, me acerqué rápido a él y lo abracé.

—Mi amor ¿Cómo te fué? —me dió un beso en la frente.

—Todo bien —sonreí —¿Nos vamos?

—Vámonos mi princesa —me sonrió y me tomó de la mano.

El agarró mi mochila y se la llevó él, soy la mujer más feliz del mundo cuando estoy con él. Éste fin de semana nos iremos a la isla Jeju, solo nosotros dos juntos, Yoongi no estaba muy de acuerdo pero al final terminó accediendo. Llegamos después de unos minutos a mi casa.

—Bueno Suhee —ambos nos detuvimos frente a mi casa— Pasó por ti mañana ¿Si?

Asentí —Nos vemos mañana —tomé mi mochila.

—Pon todo lo necesario —me guiñó un ojo y me besó.

Nos despedimos una vez más, entré a mi casa y nos despedimos con la mano, cerré la puerta y subí a mi habitación, del clóset saqué una maleta, metí la ropa necesaria, a pesar de que nos iremos solo una noche quiero estár lista, y a lista me refiero a llevar anticonceptivos, estoy segura que Hoseok es el ideal.

×××

Ayer puse mi alarma a las siete y media, nosotros salimos de aquí a las nueve, pero aún debía bañarme y arreglarme, así que hice todo eso, a las nueve en punto la puerta de mi casa sonó, le avisé a Yoongi que me iría, el dijo que me cuidara y esas cosas, también me dijo que usaramos condones. Bajé lo más rápido posible con mis mal ya listas, abrí la puerta y ahí estaba Hoseok.

—Buenos días Suhee —me miró con una sonrisa.

—Buen día —le sonreí de vuelta.

El tomó mis maletas y las metió a su cajuela, el abrió la puerta del copiloto en señal de caballerosidad, me subí al auto y me coloqué el cinturón, el dió la vuelta y de igual manera se introdujo al interior del auto. Encendió el mismo y condujo hasta Jeju, el viaje es un poco largo, por lo que decidimos poner un poco de música, ambos íbamos cantando a todo pulmón, me la paso tan bien con Hoseok, después íbamos platicando de nosotros.

—Me gusta la idea de nosotros solos en Jeju —me dijo mientras sostenía mi mano.

—A mi también me agrada —recargué la cabeza en su hombro, pero sin distraerlo.

Después de un rato más de Hoseok conduciendo decidí dormir un poco, en realidad no quería hacerlo, quería quedarme despierta como un buen copiloto, pero Hoseok notó mi aburrimiento y sueño que me terminó diciendo que no habría problema, así que no lo pensé ni dos veces y me acomodé para poder dormir un rato.

°°°

Sentí unas manos moverme de una manera delicada.

—Suhee ya llegamos —Hoseok repartía besos por todo mi rostro para poder despertarme.

Abrí los ojos lentamente —Ya voy —Bajé del auto.

—Entremos —tomó mi mano.

—Debemos bajar las maletas primero —señalé la cajuela.

—Ya he metido todas —me sonrió.

Le dí una sonrisa en forma de agradecimiento y entramos a la cabaña, ésta era bastante linda, es muy cálida, me gusta; Hoseok desempacó las maletas y yo la nevera, trajimos varia comida así que lo saqué y la metí al refrigerador. Después de acomodar ambos las cosas decidimos ir a la recámara principal a descansar.

—El viaje sí que fué cansado —habló Hoseok mientras se tiraba en la cama.

—Ya duerme un poco —acaricié su mejilla.

—¿Tú no quieres dormir?

—Creo que ya tuve lo suficiente —reí.

—Me encanta tú risa Min Sun Hee.

Me acerqué lentamente a él y lo besé, cada beso con él es como si fuera el primero, siento las misma mariposas en el estómago.

—Ya no tengo sueño —se separó un poco.

—Hay que comer algo —le sonreí.

Ambos nos levantamos de la cama y bajamos a la cocina, Hoseok iba abrazándome por detrás, sacamos de la refrigeradora el ramen, lo preparamos y comenzamos a comerlo.

—¿Qué quieres hacer hoy? —me preguntó Hoseok.

—Deberiamos ir al agua —le sonreí.

—Muy bien, termina tú ramen y vamos —me sonrió.

Esa sonrisa es la más hermosa que he visto en toda mi vida.

Una vez que terminamos de comer el ramen subimos a cambiarnos, yo no soy muy fan de los trajes de baño y menos los que son de dos piezas, por eso traje uno de solo una pieza, pero era descubierto de atrás y dejaba a los pechos un pequeño escote. Cómo solo había traído dos me puse ese, salí del baño con una toalla enredada, Hoseok solo tenia puesto un short y su abdomen descubierto, estaba tan marcado que no pude evitar abrir un poco la boca.

—Amor ¿Se te perdió algo? —apenada dirigí mi vista para otro lado.

—Lo siento ¿Ya nos vamos?

Él rió en forma de burla —¿Por qué te pones la toalla? Quítala.

Negué —Hasta estár allá.

El colocó sus manos en mis hombros y  fué bajando hasta llegar al inicio de la toalla —No tiene porqué darte pena, estás en confianza —me besó mi mejilla, seguido quitó la toalla.

—Bien, entonces vamos —con mis mejillas más rojas que un jitomate caminé por delante de él.

Él me alcanzó y tomó mi cintura, ambos caminamos hasta el área del mar, primero nos quedamos ahí en la orilla dejando que solo nuestros pies se mojaran, poco a poco nos metimos al agua jugando, Hoseok me lanzaba o yo lo lanzaba a él, nos metimos un poco más profundo nadando, Hoseok se quedó siempre a mi lado sosteniendo mi cintura.

—Me gustas como te ves mojada —besó mi cuello.

—Deberíamos entrar ya —enredé mis piernas al rededor de él.

—No, hay que disfrutar aquí.

Hoseok con una mano seguía sosteniendo mi cintura, con la otra había bajado hasta mi trasero, no me sentí incómoda ni nada, creo que que Hoseok es el indicado. Yo ambas manos las puse al rededor de su cuello atrayendolo más a mí.

El agua estaba un poco fría, pero lo que sobraba ahora era el calor que había entre nosotros, después de una sesión de besos salimos del agua y entramos a la cabaña, llegamos a la recámara y nos acostamos en la cama aún mojados, los besos continuaban, pero cada vez más se hacían más necesitados.

Hoseok iba bajando sus besos hasta mis hombros hasta que llegó a mis pechos, me miró en forma de indicar un permiso y asentí. Esa tarde me entregué totalmente a Jung Hoseok.

—Te amo Min Sun Hee —me miró.

—Te amo Jung Hoseok.

¿Quién diría que todo inició un domingo en la plaza? Yo lo veía bailar, después lo acosé, ya no soy más su acosadora, ahora soy oficialmente tú novia.




Acosando A Jung Hoseok [terminada]✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora